Senderos Abiertos [Introducción][Oliver Queen][Omega]

Las calles de aquel lugar estaban desiertas, lo unico que sonaba eran mis pasos, como si el sonido mismo hubiese sido enviado a otra dimension. Mientras corria hacia el punto donde la señal era emitida, no podia evitar que mi mente se diera un festin con todo lo que estaba sucediendo. ¿Estaria bien Roy? Lo se, no soy su persona favorita, pero aun asi, pienso en el, y no es que nunca lo haya apreciado, rayos, claro que lo hacia, pero siempre he tenido problemas para convertir ese afecto en acciones. Criar y cuidar nunca fueron mis fuertes, por mas curioso que suene eso viniendo de un heroe, y ahora, quizas nunca podria arreglar las cosas con el.

Donde sea que estes, Speedy, lucha, no te rindas, no puedes rendirte, aun...te debo una disculpa...

En milesimas de segundo, pude sentir el insignificante pero conocido sonido en el aire. Las cerdas moviendose, la punta cortando el aire, y casi como un acto reflejo, me detuve e hice mi pierna izquierda hacia atras, notando como una flecha oscura se clavaba justo donde habria estado mi muslo. No era para matar, era para incapacitar, al menos por ahora. ¿Pero quien...?

Tanto tiempo sin vernos, Arrow...

Dijo aquel hombre con la altaneria que siempre lo acompañaba, saliendo de entre un rincon particularmente oscuro que daba acceso a un callejon. Entorne mis ojos con verdadero desprecio. Ahora si que no entendia por que no habia disparado a matar.

Merlin...

Merlin, uno de los mas grandes arqueros de esta epoca, y junto con Robin Hood, uno de mis dos heroes, que, a pesar de cuanto lo idolatraba, era en verdad un simple mercenario que prestaba su arco al mejor postor para hacer cualquier clase de trabajos. Cada vez que nos hemos encontrado, esos recuerdos regresan a mi, y aun a pesar de cuanto llegue a admirarlo, nunca he vacilado en frustrar sus trabajos.

El que viste y calza...

¿Mi muslo? Eso no suena a ti en absoluto...

A difrencia mia, Merlin utilizaba flechas de punta normal, las cuales estaban preparadas para clavarse lo mas profundamente posible en el cuerpo de su blanco. Eran armas letales, y claro, no tenia flechas utilitarias como yo, seguramente las considraba entre ridiculas e inutiles. Es dificil ver a tus idolos caer, pero cuando los tienes que terminar de derrumbar tu mismo, se hace aun mas doloroso. Creo que ahora esta mas claro por que me sorprende tanto que no haya disparado a matar, ¿No es asi?

No puedo permitirme que mueras aun, Arrow...Necesito explicaciones...

El era casi tan astuto como yo, y sabia bien como operar en situaciones caoticas como estas. No era de extrañarse su plan: Buscarme a como diese lugar, extrarme cualquier informacion posible, y darme una flecha directo entre los ojos cuando tuviera lo que necesitaba. Discretamente, deslice el transmisor en un bolsillo interior de mi chaqueta de cuero verde, esperando que no lo notara. No queria darle la mas minima pista que pudiera servirle para comprender la situacion y aprovecharse de ella.

No no no, mi eterno rival, no guardes ese aparatito tuyo...Sabes que ya lo vi, y que es lo que estoy viniendo a buscar, ya van unos cuantos minutos que vengo observandote...

Sonrio de lado, presumido como siempre, y toda mi expresion se tenso de seriedad, mientras adlantaba la pierna que habia atrasado lentamente, queriendo estar lo mas preparado posible en caso de que me atacara. No solo mataba, sino que tampoco tenia Merlin honor alguno, y si veia una sola oportunidad verdadera, atacaria sin pensarselo dos veces.

Entonces ya te das una idea de lo que estoy haciendo, pero si crees que voy a entregarte este transmisor, estas muy equivocado, tengo que salir de aqui y ver que hacer al respecto de todo esto, y tu no vas a detenerme...

¿Que tal un trato?

¿Y ese trato seria...?

El arco en el suelo y el transmisor en mi mano, y te dejo vivir...

Tengo una contraoferta: Te apartas de mi camino y sales ileso, es mas, hare de cuenta que esto no sucedio y te dare libertad de huir con el rabo entre las patas...

Asique, va a tener que ser como siempre...

Musito el, notoriamente enfadado con mis ultimas palabras. Le sonrei escuetamente y volvi a ponerme serio, mejorando mi postura un poco y tomando mi arco, cargandolo con una flecha de humo y tensando la cuerda. El tambien tenia la flecha ya cargada y el arco tensado. Cuando se trataba de nosotros dos, siempre acababa en un duelo de arqueria.

¿A la cuenta de tres?

1...

¡3!

Y sin esperarse, solto su flecha, la cual volo con una increible prcision hacia mi. No lo habia admirado en vano: Tenia las manos y la vista de un arquero legendario, pero era tan engreido que no era capaz de ver los detalles. Solte mi flecha y, en unos segundos, habia colisionado con la suya, destrozandose la punta de la mia y emitiendo una nubareda oscura que impedia la vista. Un segundo antes de qu el humo me alcanzara, tire mi cuerpo completo hacia un costado para evitar el disparo y me parapete en mi pierna derecha para estabilizarme y poder correr hacia el. Recordaba su posicion, y sabia bien que tardaba en cambiarla, asique continuea acortando la distancia, hasta que, haciedome abruptamente a la derecha, evite su siguiente disparo, y es que sabia que, ante la desesperacion, tendia a disparar en esa direccion. Cuando no tienes superpoderes, dependes de cada pedacito de informacion, detalle o gaje que le conozcas a tu rival, y vaya si conocia bien a Merlin.

¡Agh!

Cuando la niebla se habia disipado, solo quedabamos el, de pie, y yo, tambien de ie, con mi mano extendida golpando el punto justo de su cuello para inutilizarlo. Enseguida, Merlin solto su arco, sus ojos se cerraron, y cayo al suelo frente a mi. Relaje mi postura: Porque no todo es conocimiento, ser un maestro de artes marciales tambien viene bien. Tome mi transmisor denuevo y segui corriendo, hasta que, a los dos minutos, di con una bodega en un estado de deplorable abandono. Aun asi, no lo dude un instante, puse una flecha en mi arco, tense un poco, y me dispuse a entrar, empujando la puerta con un hombro y fijandome que no hubiesen moros en la costa. Por suerte, estaba todo despejado, asique guarde mi flecha y entre de lleno en aquel lugar. Apenas lo hice y vi quien me estaba esperando con el transmisor en la mano, casi se me cae mi arco.

Parece que hubieses visto a un fantasma...

Me devolvia la mirada...Bueno, yo mismo, pero no era yo mismo. ¿Como explicarlo? Tenia mi rostro, mi mirada, hasta mis gestos, pero llvaba un traje algo mas holgado, y una gran capucha que cubria casi todo su rostro. Estaba de pie, pero su arco estaba a un lado de el, en el suelo, mientras que su transmisor, igual al mio, seguia pitando en su mano, hasta que, presionandolo unos segundos, lo apago. No podia salir de mi asombro, aunque di un paso hacia el.

Tranquilizate, Ollie, soy yo, tu...

Menciono, y rio suave pero jocoso. No se porque, pero algo en esa ultima frase me ayudo a tranquilizarme, reconocia eso, ese mecanismo de bromear para relajar los animos. Al parecer, estaba ant mi mismo en verdad.

¿Como llegaste hasta aqui?

Cuando todo se fue al demonio, mi dimension ya estaba algo...complicada, asique decidi tomar todo mi equipo y saltar hacia lo primero que se pareciese a Star City, esperando ncontrarme conmigo mismo en alguna otra linea espacio-temporal...

¿Eso quiere decir que yo...?

Veras...se tanto como podrias saber tu de esto, a lo sumo, un poco mas, ya sabes, la edad...Pero no, como no eres mi pasado, sino una version alternativa de mi, no necesariamente viviras las mismas cosas que yo, ni llegaras a ser como yo, y creeme, eso es algo bueno...

¿Algun error persiguiendote?

Dije, con un tono entre amable y complice, mientras acortaba la distancia entre ambos y le daba la mano con fuerza, dirigiendonos ambos la misma sonrisa agradable.

Demasiados, no por nada menciono tan decidido que no seras como yo...

Ambos reimos alegremente, riendonos de nuestro propio humor, ese humor entre resignado e histrionico, tan cinico pero efectivo. En cierto modo, me agradaba estar conmigo mismo, aunque ambos cambiamos nuestro semblante al mismo tiempo. Siempre estabamos al tanto de lo que sucedia, con los pies en la Tierra, no nos gustaba perdernos en palabras demasiado tiempo.

Te llame porque queria darte algo, y claro, ayudarte en todo lo que pueda, bueno, al menos, hasta que resista...

Y alli fue cuando baje la mirada y lo vi, justo en su costado izquierdo: una mancha enorme de sangre. Trate de de moverme en pos de abrir su camisa verde para evaluar su herida, pero el me detuvo con un gesto de la mano.

Volaron a traves de una grieta de la que no me percate mientras esquivaba un auto en llamas que venia bajando una avenida, estan enterrados hasta el fondo, no se si es general, pero me estoy desangrando, no me preocupa, el plan siempre fue llegar hasta ti, y lo logre...Aunque estos trozos de vidrio si que duelen...

¿Tienes alguna idea de que esta sucediendo?

El entorno sus ojos, como recordando todo lo qu sabia, y note las arrugas, ese dejo oscuro en su mirada, el de quien ha pasado por demasiadas cosas en relativamente poco tiempo. Era yo y no lo era al mismo tiempo, ¿Que te sucedio en tu vida? Al parecer, cometer errores graves y cargarlos en la consciencia era algo que se transmitia hasta entre dimensiones.

Batman me dijo todo lo que sabia antes de irme, al parecer imagino que yo haria algo como esto, siempre ha sido un murcielago astuto ese...

¿Que tanto sabia?

Lo suficiente, Ollie...Veras: Algo o alguien esta desestabilizando el flujo espacial-temporal, y claro, si te metes con eso, tambien te metes con la estabilidad dimensional, y cuando tienes todo ese revoltijo, causas estragos en el Multiverso, o sea, en todos los universos que existen...

Entonces ese tunel que vi en la bodega...

Si, imagino que viste una vision de otro lugar, quizas a millones de años luz, quizas no...

Y el transmisor...

Eso solo puedo adivinarlo, y mi mejor idea es que estamos en una suerte de pequeña zona aislada del resto de Star City, como una especie de singularidad, ¿Me sigues?

Entonces, si estamos en una singularidad...

Exacto: Estas parado en el ultimo trozo de la Star City de tu propia dimension, el resto vaya uno a saber adonde habra ido a parar...

Sentencio, y quise caer de rodillas, pero me obligue mentalmente a permanecer fuerte, de pie. La idea de haber perdido toda mi dimension me desgarraba por dentro. Puede no parecer mucho si se considera que, cuando salga de la singularidad, seguira siendo Star City, pero el problema es que no sera "mi" Star City, sino la de alguien mas, alguien que, quizas, tambien morira, o ya murio. Te hace pensar en tu nocion de hogar todo esto, ya saben, uno quiere creer que su casa es su hogar, su familia, y sin embargo, aqui me tienen, llorando para mis adentros a todo un universo del que ahora sere un exiliado a la fuerza.

Agh...

El Oliver de la otra dimension se quejo calmadamente de dolor, y se recosto contra una gran caja, deslizadose hasta sentarse por completo, alzando su vista para no perderla de la mia.

¿Puedo preguntarte algunas cosas?

No te prometo que tenga las respuestas, pero adelante, aun tengo unos minutos...

¿Que preguntarle? No quise dar rodeos, necesitaba informacion dura, de la que me ayudaria a solucionar este problema.

¿Alguien puede detener esto?

No tengo la menor idea, pero si se quienes pueden ayudarte...Dime, ¿en que situacion se encuentran la Liga de la Justicia, Black Canary, Roy y Mia?

Me puse a pensar, y no pude evitar suspirar ante el recuerdo de Roy. Deberia haberle podido dar mejores noticias, pero supongo que tendre que decirle la verdad.

La Liga no me ha contactado en mucho tiempo, ni yo a ellos, pero seguro que donde haya una catastrofe, estaran...¿Black Canary? Bueno, la recuerdo de la Atalaya, pero no hemos podido hablar mucho aun...

Y mis recuerdos volaron como una flecha a esos cabellos rubios y esa mirada picara, astuta y penetrante, perteneciente a aquella mujer que casi no tenia rival con los puños y las patadas, y que parecia poder leerte la mente con solo mirarte. No queria admitirlo, pero algo en ella me cautivaba, aun si parecia peligrosa por fuera.

¿Roy y Mia?

No se quien es esa Mia a la que te refieres, y Roy...tuvo un problema con las drogas, no hemos hablado en años, ahora trabaja solo...

Vaya...Si que la regaste con ese chico...

Y he querido arreglarlo durante mucho tiempo, pero no acepta verme, ni hablarme...

Parece que todas tus opciones son un poco flojas...

Si, pero aun asi puedo intentarl...

...salvo por...

¿Quien?

¿Que me dices de Artemis?

Hice silencio unos instantes y trate de rememorar. No fue muy dificil. Artemis habia sido una larga fanatica de lo que yo hacia, y claro, cuando necesito mi ayuda para entrar en Young Justice, dije que era mi compañera y sobrina, para que pudiese lograr entrar sin sospecha alguna. Gran arquera y buena combatiente cuerpo a cuerpo, era una verdadera heroe, aun considerando su edad.

No hemos hablado mucho estos ultimos meses, pero si, la conozco, yo mismo la ayude a entrar en Young Justice...

Imagine que seria de esa manera...

Y sonriendome enigmatico, puso un transmisor en mi mano.

Presiona el boton y sigue la señal una vez que hayas salido de esta singularidad, llegaras con ella...Y cuidalo, ya no hacen de esos en verde...

Arquee una ceja ante esa ultima frase. ¿Que tanto mas que yo habia visto de Artemis? No queria ni imaginarmelo, solo espero que ella no sea parte de ninguna tragedia como las que esa version de mi ha vivido.

Y por cierto...Kid Flash...

Buen chico, tiene plumas en la cabeza, pero un corazon de oro...

El rio suavemente, tociendo algo agitadamente, mientras me miraba con una peculiar condescendencia.

Recuerda lo del corazon de oro...

¿Y eso que tiene que ver con...?

Agh...En su momento...Agh...lo entenderas...

De entre sus ropas tambien tomo una pequeña capsula de color verde, al parecer, un complejo dispositivo mecanico en miniatura. Poniendolo en mi mano.

Guardalo enseguida...

Y asi lo hice, poniendolo en un bolsillo interior de mi chaleco verde.

Si en cualquier momento un miembro fundador de la Liga se saliera de control, presiona la cabeza de se artefacto y sigue sus instrucciones, si necesitas desplegarlo por completo, dale tres giros completos...Agh...

El sangrado en su costado se estaba haciendo cada vez peor, y en el fondo de mi ser, lamente en el alma no poder ayudarlo. Era muy paradojico tener que verme morir lentamente, pero trataba de no pensar en eso y enfocarme en lo que me daba y decia.

Y por ultimo, mi mas especial regalo para ti...

Dijo y, algo torpemente, probablemente por su estado actual, hurgo en su carcaj y tomo un largo paquete, extendiendomelo. Arrodillandome ante el, lo tome, y lo desenvolvi: Una Katana, una espada japonesa de las mas fina hechura, el trabajo de un maestro herrero del lejano oriente, y un tesoro de incalculable valor.

Me imagino que no matas, de ahi tus flechas especiales...Pero, debo darte esto, pues se acrcan tiempos dificiles para ti...Y como cada vez que se la pasa de mano en mano, te regalo un poco de sabiduria junto con tu espada nueva...

Menciono, entre toces cada vez mas fuertes, casi desfalleciendo mientras lo tomaba agilmente por la espalda y lo mantenia cerca mio, sin querer dejarlo caer al suelo, impotente ante su sufrimiento, pero lo mas respetuoso que podia ser. Solo pudo susurrarme unas pocas ultimas palabras.

"Ten el valor de aceptar lo que no puedes cambiar"

Asi sera, te lo prometo...

Mucha...Suerte...

Y, con una sonrisa que me era ya conocida de toda mi vida, mi yo de otra dimension me abandono, cerrando lentamente sus ojos y quedandose flacido en mis brazos, sin oponer resistencia a la gravedad. Llore, llore amargas lagrimas que nadie mas veria nunca por lo que yo habia sido y ahora no seria ya mas, y me permiti grabar a fuego sus ultimas palabras en mi memoria. No entendia completamente el sentido de esa frase, pero no me importaba, algun dia, lo haria.

Sin mucha mas ceremonia, lo recoste en el suelo, puse su arco y flecha en sus manos, y me quede de pie, dedicandole un ultimo minuto de silencio y reflexion, jurando para mis adentros no permitir que nadie mas muriese sin motivo. Tome la Katana y la ate al costado de mi pantalon verde, esperando nunca tener que emplearla.

Me gire y camine hasta la salida, comenzando a correr hasta que senti la fina tela dimensional discurrir frente a mis ojos, dejandome en una calle desolada de Star City, de otra Star City, y sin embargo, de una muy parecida a la que recordaba. Presione el boton del transmisor, que tenia la forma de la punta de una flecha, y este comenzo a emitir un pitido suave, pero reconocible. Me puse en camino.

Se que no tengo nada mas que un arco para combatir al mismisimo Caos, pero tengo algo mas, algo verdaderamente poderoso, y eso es mi fuerza de voluntad.

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