Omega Universe - Foro de Rol de Marvel y DC
¿Quieres reaccionar a este mensaje? Regístrate en el foro con unos pocos clics o inicia sesión para continuar.

Omega Universe - Foro de Rol de Marvel y DC

Los Universos de DC y Marvel se han unido en uno solo. ¿Qué ha sucedido? ¿Quién está detrás de todo? Y, lo que es más importante, ¿cómo reaccionarán héroes y villanos de los distintos mundos al encontrarse cara a cara...?
 
ÍndiceOmegaÚltimas imágenesRegistrarseConectarse
Años de Omega


¿Quién está en línea?
En total hay 97 usuarios en línea: 0 Registrados, 0 Ocultos y 97 Invitados :: 2 Motores de búsqueda

Ninguno

El record de usuarios en línea fue de 190 durante el 8th Noviembre 2024, 02:38
Últimos temas
» Me permite esta Pieza(Nicron/Rusia)
Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Icon_minitimeHoy a las 17:11 por Nicrom

» Ficha de El Vigilante / Gregory Saunders
Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Icon_minitimeHoy a las 07:46 por Daichi Matsukaze

» Un rayo de Sol y la melena de león (Arión) [28/05/2019]
Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Icon_minitimeHoy a las 00:18 por Ahri'ahn

» Prueba de rol de El Vigilante.
Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Icon_minitimeAyer a las 21:03 por Dick Grayson

» Bat-regreso del hijo pródigo
Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Icon_minitimeAyer a las 19:19 por Dick Grayson

» Proud and strong [Magneto]
Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Icon_minitimeAyer a las 17:21 por Nicrom

» Hundir la Balsa (Burai, abierto)
Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Icon_minitime18th Noviembre 2024, 04:27 por Omega

» Ficha de Martha R.
Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Icon_minitime13th Noviembre 2024, 13:30 por Joker

» Ficha de TimeSkip
Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Icon_minitime13th Noviembre 2024, 13:23 por Joker

» Ficha de Danne Schmidt (Der Schnitter)
Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Icon_minitime13th Noviembre 2024, 12:48 por Joker

Los posteadores más activos de la semana
Dick Grayson
Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Back_titleUn pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Back_titleUn pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Back_title 
Nicrom
Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Back_titleUn pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Back_titleUn pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Back_title 
Daichi Matsukaze
Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Back_titleUn pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Back_titleUn pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Back_title 
Burai Ishii
Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Back_titleUn pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Back_titleUn pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Back_title 
Omega
Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Back_titleUn pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Back_titleUn pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Back_title 
Ahri'ahn
Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Back_titleUn pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Back_titleUn pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Back_title 
Los posteadores más activos del mes
Nicrom
Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Back_titleUn pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Back_titleUn pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Back_title 
Midnighter
Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Back_titleUn pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Back_titleUn pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Back_title 
Omega
Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Back_titleUn pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Back_titleUn pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Back_title 
Dick Grayson
Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Back_titleUn pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Back_titleUn pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Back_title 
May sheen woo
Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Back_titleUn pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Back_titleUn pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Back_title 
Joker
Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Back_titleUn pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Back_titleUn pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Back_title 
Daichi Matsukaze
Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Back_titleUn pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Back_titleUn pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Back_title 
Max Eisenhardt
Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Back_titleUn pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Back_titleUn pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Back_title 
Davidkawe
Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Back_titleUn pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Back_titleUn pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Back_title 
Ahri'ahn
Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Back_titleUn pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Back_titleUn pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Back_title 
Afiliados Hermanos (1/4)

Afiliados Élite (24/25)
Time Of Heroes

 

 Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba)

Ir abajo 
3 participantes
AutorMensaje
Rebecca Logan
DC Universe
DC Universe
Rebecca Logan


Bando : Villano

Insignia de Fidelidad : Año 1

Mensajes : 495
Fecha de inscripción : 24/05/2014
Localización : ¡Yiha, vaquero, mi hogar esta allí donde tengo mi sombrero!
Empleo /Ocio : Criadora de Caballos
Humor : ¡Hay una serpiente en mi bota!

Ficha de Personaje
Alias: Cowgirl
Nombre real: Rebecca Logan
Universo: DC Universe

Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Empty
MensajeTema: Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba)   Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Icon_minitime6th Noviembre 2016, 14:37

El motor del helicóptero resonaba dentro de la cabina, a pesar de los cascos, no podía evitarse cierta reverberación constante y ese vértigo en el estómago que causaban los pequeños altibajos que iban sufriendo a medida que el piloto hacía las correcciones pertinentes para mantener la nave estable. Desde esa altura, el desierto parecía un océano de arena, con sus dunas dibujando extraños paisajes bajo la luz del sol. El día era claro, limpio como una mañana después de las lluvias de verano. El calor había empezado a descender, pero no en esa zona, donde el sol era un castigo constante. Sentada en uno de los asientos del aparato, con las piernas afianzadas en noventa grados, se encontraba el Sheriff.

Portaba su sombrero de ala ancha, su poncho, sus botas, sus pistoleras. Pero además de todo aquello, sobresalían los tubos y piezas de metal anexionadas a sus piernas, que de vez en cuando arrancaban algún destello cuando las iluminaba la luz que entraba por el ventanal lateral. La operación había sido relativamente sencilla, su curación, excepcionalmente rápida, pero la rehabilitación había exigido un ejercicio de largas semenas constantes sin parar. Las veces que había apretado sus fijaciones de más que habían estado a punto de costarle un par de dedos del pie. Las rozaduras que había hecho el aparato en su cuerpo, cuando se le había olvidado quitárselo para dormir. Los rituales constantes de colocación, con el dolor que eso implicaba. El tiempo que había tardado en ser capaz de levantarse, de sólo mantenerse en pie. El tiempo perdido en largas horas de exorcismos e intentos fallidos, mientras aún continuaba sometiéndose a esas sesiones de espiritismo con Krauss en las que parecían a punto de echar a Victoria de su cuerpo, pero a las que siempre les faltaba el último intento. El constante subir de esas marcas a través de sus piernas, y el recordatorio de que tenía que detenerlas antes de que le subieran por el tronco.

Unas pequeñas turbulencias hicieron que el aparato temblara, pero el Sheriff permaneció sin moverse, con las manos cruzadas frente al pecho. Estaban en el tiempo límite que Hellboy había pactado con el dios. Quince de septiembre. El fin del verano. Había sido imposible acudir antes, a causa de la cirugía y le rehabilitación. Decisiones que había tomado bajo su cuenta y riesgo con el único propósito de poder andar. En el ámbito médico, se consideraba un caso totalmente excepcional, e incluso llegaron a tacharlo como psicosomático. Una mancha más en un historial que al Sheriff no le importaba. Lo único importante es que había recuperado su capacidad de caminar. Que volvía a tener piernas funcionales.

Alzó la cabeza, encontrándose con hellboy, que indicaba constantemente al piloto, pues el lugar al que se dirigían no aparecía en los mapas. El palacio de hueso del Dios del Voodoo Papa Legba. Ese nombre le sonaba de una manera lejana. Le recordaba por sel es desvergonzado que había violado su santuario, aunque en ese momento le pareciera oportuno aceptar sus disculpas, aquello no volvería a repetirse. Podía estar seguro de que la benevolencia del sheriff se había endurecido, ahora que el mundo se había vuelto mas cruel e inhóspito. Ahora que la antigua ley había demostrado ser tan laxa con algunas criaturas y acontecimientos que se vislumbraban de cara al futuro. No volvería a cometer ese error. No volvería a tolerarlo.

_________________
Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) 25zjebs
Volver arriba Ir abajo
Hellboy
Dark Horse Universe
Dark Horse Universe
Hellboy


Personaje No Jugador

Bando : Héroe

Grupo : B.P.R.D.

Insignia de Fidelidad : Año 1

Mensajes : 1081
Fecha de inscripción : 26/04/2014
Localización : Donde haya algún cabronazo
Empleo /Ocio : Pateador de culos sobrenaturales a jornada completa
Humor : ¡No juegues conmigo, mujer! ¡He estado bebiendo con esqueletos!

Ficha de Personaje
Alias: Hellboy.
Nombre real: Anung-Un-Rama.
Universo: Marvel

Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Empty
MensajeTema: Re: Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba)   Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Icon_minitime13th Noviembre 2016, 14:09

[OCC: Respuestas habladas y pactadas con la user de Rebecca Logan]

18 de agosto de 2018.
12:45 hora local.
Base del B.P.R.D.
Ala hospitalaria.


Dos meses. Dos meses habían pasado desde todo lo de Victoria. Cualquiera lo diría, pero parecía una eternidad y al mismo tiempo que hubiese sido ayer. Para algunas cosas el tiempo no tenía misericordia, arrollándolas sin piedad, como una ventisca primaveral con las primeras flores. En cambio, con otras cosas parecía tomárselo con calma, como si disfrutase de lo que sucedía. Este era el caso de la recuperación de la vaquera. Mientras ella se esforzaba día y noche en volver a andar y en librarse de aquel ser que se había asentado en lo más profundo de su alma sin muchos resultados el tiempo para ir a ver al dios Voodoo se agotaba. Cada vez quedaba menos. El demonio sabía que todavía les quedaba casi un mes, e intentaba demorar lo máximo posible aquel encuentro por lo que pudiese pasar y por darle una oportunidad a Rebecca de recuperarse del todo, o todo lo que pudiese. Miró el reloj una vez más antes de dirigirse a su encuentro. La rehabilitación estaba siendo larga y pesada, sobre todo para ella. Aunque le habían colocado unas prótesis en las piernas que le ayudaban a la hora de andar todo el proceso de colocación y regulación era arduo y aburrido. La joven no terminaba de acostumbrarse y más de una vez maldijo fuertemente ante la situación en la que se veía envuelta. Pero era hora de aclarar todo, así que el demonio se levantó de la cama y se puso en camino.

Aquel día los pasillos parecían más oscuros, como si supiesen lo que sucedía, como si fuesen conscientes de lo que Hellboy tenía que decirle a la rubia. No iba a ser fácil ni agradable. Tratar con un dios siempre era un contratiempo enorme, y más aún cuando se trataba de alguien como Legba. Ese ser era inteligente, mucho, y siempre guardaba un as en la manga, como cualquier demonio o dios que se preciase. Y ahora a él le tocaba ir de nuevo a su castillo para cumplir su parte del trato. No tenía ni idea de qué quería. Le había asegurado que Rebecca no sufriría daño alguno, pero nunca había que confiar en un ser así. Les encantaba la letra pequeña y complicar las cosas. La cabeza de Rojo estaba llena de pensamientos de todo tipo, pero intentó aclarar sus ideas. Tenía que hablar con ella y lo que le iba a decir no sería sencillo.

Cuando entró en la zona hospitalaria varias personas le miraron y le saludaron con un gesto. Él devolvió el saludo y se dirigió a la zona de rehabilitación. La sala tenía varias máquinas o barras para lentamente ir recuperando la movilidad, los reflejos o cualquier cosa que requiriese el paciente. Allí pudo ver a la joven, caminando entre dos barras horizontales con cuidado. Se sujetaba con cuidado de ellas y cada paso parecía un mundo, al menos para el demonio. La veía tan frágil, tan pequeña después de todo lo que había pasado... Suspiró y se acercó a ella y a la enfermera que le acompañaba.

- Buenas tardes chicas. ¿Qué tal estáis? Tienes buen aspecto hoy Rebecca... ¿Cómo van esos ejercicios?- Ella miró al demonio y suspiró.

- Como un potro aprendiendo a caminar... ¿Necesitas algo?- Su tono denotaba amargura. Aquello le estaba costando y no le gustaba sentir que necesitaba ayuda, o esa era la sensación que le llegaba al demonio cuando intentaba echarle una mano. Este tomó aire y lo expulsó, armándose de valor para el mal trago que le tocaba.

- A decir verdad, sí. Necesito hablar contigo de algo importante... ¿Puedo llevármela 15 minutos?- La enfermera asintió y ambos se dirigieron a unos sitios apartados de las miradas indiscretas. Hellboy llevaba mucho tiempo pensando cómo contarle todo esto a la vaquera y no había encontrado un modo bueno. Era una situación complicada y no sabía cómo se lo tomaría Rebecca, así que decidió ser directo.- Verás, hay algo que tengo que comentarte... Después de todo lo de Victoria Marrakesh quedó destrozada. Hubo muertos y heridos, y muchas de las calles por donde pasó la estampida quedaron en ruinas. Mucha gente perdió sus negocios. Tuvimos suerte de encontrar los rastros de Victoria poco antes de que atacase, y a pesar de ello las bajas fueron considerables. Yo sabía que aunque habíamos conseguido frenar de algún modo al jinete la suerte nos había acompañado, al igual que con Peste. Pero no podíamos jugárnosla contra Guerra y Muerte.-

El demonio se tomó un par de segundos para que la mujer fuese situándose poco a poco. Tuvieron que contarle el final de toda la aventura en el norte de África días después de que sucediese, cuando poco a poco iba recuperando la consciencia y la salud. No había visto aquella ruina.

- Hay seres en este mundo con poder y conocimientos suficientes como para saber cuándo va a suceder algo, o cuya precisión es bastante buena a la hora de prever un acontecimiento. No son totalmente fiables, pero suelen acertar en la mayoría de los casos. Uno de ellos es el dios del Voodoo conocido como Papa Legba, un dios que vive en las profundidades de un desierto en Zambia en un castillo hecho de hueso. Su poder es enorme y a regañadientes fui a hablar con él para ver si sabría dónde atacaría Guerra... Se ofreció a ayudarnos, a cambio de algo...- Ella le escuchaba atenta, todo lo atenta que podía estar pensó Hellboy. Llegó al punto de inflexión de aquella conversación, a la verdadera razón por la que tenía que hablar con la rubia. Suspiró y se rascó la cabeza. Repentinamente sintió un picor en la zona posterior de esta que le resultó más desagradable de lo que era en realidad por la situación.- Me dijo que haríamos un pacto. Yo obtendría la información de Guerra y a cambio debía presentarme contigo antes de dos meses en su castillo. Sólos tú y yo. Al principio me negué, pero me aseguró que no te pasaría nada, que tan solo quería verte... Y yo accedí... Estaba cansado y entre la espada y la pared... Siento... Haberte metido en todo esto... Otra vez.-

Bajó la cabeza, pues su disculpa no era solo por lo del dios, sino por todo lo que había pasado con Victoria. Seguía convencido de que aquello era su culpa, y cuando veía las piernas de la vaquera no podía sino maldecirse por dentro. ¿En qué estaba pensando? ¿Cuándo llevar a una joven de diecinueve años le había parecido una buena idea? Todos los que le habían increpado aquella locura tenían razón. Todo eso del nuevo universo y demás le estaba pasando factura, estaba convencido. Notaba que no era el mismo de antes, que algo había cambiado en él. Tal vez ahora fuese más temerario o simplemente estaba harto de todo. Fuera como fuese ahí estaba, sin saber qué le depararía el mañana.

- Conozco a ese hombre. Se coló en mi casa.- Hellboy frunció mucho el ceño y la miró a los ojos.

- Espera. ¿Qué? ¿Cómo que se coló en tu casa? ¿Un tío alto, de tez morena, con una calavera pintada en la cara de color blanco?- El demonio no podía creérselo. ¿Qué puñetas hacía aquel tío en la casa de la vaquera? ¿Acaso ya se conocían y solo quería jugar con él? No, tenía que haber algo más detrás de todo aquello. Nunca es tan sencillo con un demonio.

- Y con mucho humo. Le dispare en plena cara, pero ni siquiera se inmutó. Claro que no se inmutó. Era un dios, un ente sobrenatural que seguramente habría usado su forma astral para presentarse a la vaquera. Lo que ahora al demonio le rondaba la cabeza como una abeja a la miel era qué demonios quería de ella. ¿Por qué se habría presentado justo en la casa de la vaquera?- Trajo una interesante información sobre el señor Logan y su boda. Hice buen uso de ella.-

- ¿Pero tú contactaste con él o algo o simplemente se presentó en tu casa? ¿Cuándo sucedió esto y por qué no me habías comentado nada?-

- Se presento. Dijo que quería ofrecerme la información a cambio de confiar en el. Y le di una oportunidad. Sirvió bien. No hice ningún pacto o contrato. Solo charla. No se me ocurrió que fuera una amenaza. Si lo hubiera sido, te lo habría dicho.- La vaquera era sincera en cuanto a lo que le dijo se refería. El demonio podía ver en sus ojos que lo que le contaba era lo que ella había vivido tal cual. No tenía sentido ocultarle algo ahora que estaban hablando del tema. Ella apoyó su mano en el hombro del demonio y este la miró a los ojos.- No sabia que fuera una especie de deidad, pero no importa. Si quiere Sheriff, tendrá Sheriff. No tienes que disculparte. es mi trabajo, hijo.-

El demonio asintió, sin dejar de darle vueltas al asunto. La enfermera volvió y preguntó si eso era todo. Ambos se levantaron y ella volvió a la barra para continuar con sus ejercicios y él se dirigió hacia la puerta.

- Cuando estés algo mejor viajaremos a su castillo... De momento procura cuidarte bien y hacer lo que te manden los médicos. Sé que es engorroso y un coñazo, pero lo hacen por tu bien... Ya sabes dónde estoy por si necesitas algo vaquera... Y no te preocupes por Legba,

2 de septiembre de 2018.
11:30 hora local.
Espacio aéreo de Zambia.
Zambia, África.


... Yo cuidaré de ti.-


Aquellas últimas palabras resonaban en la cabeza del demonio mientras miraba a través de la ventana el desierto que parecía no acabar. "Yo cuidaré de ti." El demonio había estado hablando con la vaquera desde que se enteró de que Legba había ido a hablar con ella, explicándole de qué iba y qué cosas era capaz de hacer, previniéndola, allanando el terreno. Parecía tranquila, expectante, como el guerrero antes de la batalla, esperando lo que era inevitable pero si que esto le afectase los nervios. Hellboy estaba convencido de que ella no era consciente de la situación que tenían entre manos, y que ignoraba los peligros que podían correr en el interior de aquel castillo. Esa era su casa, y por tanto sus reglas y su juego. Deberían amoldarse a lo que sucediese, y lo que no sabía el demonio es qué harían si en algún momento al dios se le iba la mano e intentaba matarlos. La vaquera no podía correr en su estado, así que si algo así pasaba le tocaría cargarla a su hombro y rezar por que fuese lo suficientemente rápido como para salir de allí. Existía la posibilidad de que todo fuese como la seda y no pasase nada malo, pero prefería ir con un par de planes por si la cosa se torcía.

Habían aterrizado en Lusaka y ahora se dirigían a las profundidades de aquel país. Tras una hora de vuelo el demonio indicó al piloto que aterrizase allí mismo. Este le dijo que no veía ningún castillo y que si estaba seguro de que aquel era el lugar.

- Ese castillo sólo puede ser alcanzado a pie. Tendremos que andar. No te preocupes, no está lejos.- Sabía que tal vez le tocase en algún momento cargar con la vaquera, pero no le importaba. Tenía fuerza de sobra para levantar un coche, y Rebecca pesaba bastante menos que uno. Lo más probable sería que ella se negase en rotundo, pero si la arena se metía entre las juntas de sus prótesis tal vez no le quedase más remedio que ceder. Llevaban aceite para evitar que esto sucediese y para engrasar las juntas, pero ante una tormenta de arena era lo mismo que llevar una bonita pamela para cubrirse la cara.

El helicóptero se posó sobre la tierra algo más violentamente de lo que le habría gustado al piloto por el fuerte viento. Hellboy abrió la compuerta y este le golpeó en la cara con fuerza, haciendo que miles de pequeños granitos se estrellasen en su piel. Entrecerró los ojos y ayudó a la vaquera a bajar. Miró al piloto y gritó que le avisarían cuando todo terminase. Cerró la puerta y se volvió hacia la inmensa explanada de arena que les daba la bienvenida. Al menos la tormenta no era ni la mitad de fuerte que la última vez que estuvo allí. Ahora era más bien molesta, pero la vaquera entre su sombrero y unas gafas protectoras estaría bien. Se pusieron en marcha en dirección a aquel aterrador lugar que el demonio habría deseado no tener que pisar de nuevo.

- ¿Cómo te encuentras? Si necesitas que paremos lo hacemos. No tenemos prisa.- Llevaba una bolsa con bebida y comida por si la cosa se alargaba o a la vaquera le entraba hambre. Frutos secos y bebidas revitalizantes así como agua para mojar alguna toalla o paño por si el sol pegase demasiado fuerte. A él no le molestaba ni le afectaba, pero para una persona normal podía ser catastrófico y causarle deshidratación o una insolación. Hellboy paró un momento oteando el horizonte y luego continuaron su marcha. No era fácil ubicarse cuando todo a tu alrededor es arena, y aunque había pasado mucho tiempo viajando por aquel continente en el pasado había muchas cosas que todavía se le escapaban.

Una media hora después, paró a lo alto de una enorme duna dorada. Suspiró y asintió con la cabeza.

- Bueno, aquí estamos...- A lo lejos pudieron ver alzándose majestuoso y tenebroso sobre la arena un enorme castillo de huesos que les daba la bienvenida.

_________________
Quién soy                         Qué hago                         Mi careto

Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) 2nu254g
Volver arriba Ir abajo
Papa Legba
Omega Universe
Omega Universe
Papa Legba


Bando : Villano

Insignia de Fidelidad : Año 2

Mensajes : 129
Fecha de inscripción : 17/01/2015

Ficha de Personaje
Alias: Legba
Nombre real: Papa Legba
Universo:

Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Empty
MensajeTema: Re: Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba)   Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Icon_minitime31st Diciembre 2016, 13:38

El extenso puente aguardaba la llegada del demonio y del sheriff, esperando paciente con los dos guardias que permanecían inmóviles, cada uno con una lanza que apuntaba al cielo. Vieron a lo lejos dos figuras y el dios, que descansaba en su trono hasta entonces con la frente apoyada en el puño, se alzó con una sonrisa en los labios, entusiasmado para luego recolocarse en una posición más cómoda y serena. Cuando las dos figuras llegaron al inicio del puente uno de los soldados giró el rostro súbitamente noventa grados, clavando el vacío de sus cuencas en los ojos de Hellboy con facilidad, ya que eran aproximadamente de la misma altura. Sin mover ninguna facción de su rostro, del cuerpo de ese guardia empezó a surgir la voz del dios que ambos conocían, como en la primera visita del demonio  - ¡Rojo! … Viejo amigo… Esto es jugar con los límites, ya creía que tendría que acabar por ir a buscarte - En su salón, mientras tanto el dios se frotaba los ojos con el dedo índice y el pulgar - Bienvenido Sheriff…- dijo sonriendo. La inspección sobre su historial había merecido la pena y la intriga brillaba sola sobre por qué una posesión había aumentado su trastorno.

El rostro del guardián recuperó su posición original y las altas puertas al final del puente se abrieron dejándoles ver cómo no sólo era de hueso el castillo sino también sus entrañas. En cuanto pusieron un pie dentro las puertas volvieron a cerrarse solas con suavidad dejando el único sonido de los granos de arena que había entre las puertas y el suelo. Nada más entrar había un gran recibidor. A cada lado, tres escaleras de caracol y al fondo de frente una amplia escalera que se dividía en dos. Todo el ambiente olía a cerrado, polvo, arena, ceniza y sal. Quizá también quedase un ligero aroma a vela quemada en algunas zonas.

Antes de que se les implantase la duda de hacia dónde ir una de las chamanas agarró el brazo de Rebecca, siendo ese el primer momento en el que se percataron de su presencia - Dentro de ti hay una fuerza poderosa que sin duda culminará…- Los ojos en blanco parecían poder mirarlo todo dentro de ella - El guardián está ansioso por verte- Dijo entonces liberando su brazo y empezando a caminar con su sencilla desnudez y todos los complementos que colgaban de su cuerpo subiendo una de las escaleras de caracol de la derecha. Algún tramo más de escaleras más hacia arriba, giros en esquinas que parecían no ser posibles, puertas que se abrían… y al fin la sala del trono, ambientada para la ocasión. Cristaleras amplias con balcón, altas bóvedas y arcos árabes en las ventanas. La iluminación a pesar de ser otorgada por velas era más que clara y suficiente para ver nítido sin esforzarse. -Bienvenidos- dice él, acomodado en su trono con las piernas cruzadas. Detrás de ambas figuras surgieron dos asientos, más modestos que el trono pero cómodos, que se acercaban a donde estaba el dios lentamente buscando acomodar a los invitados. Legba clava los codos en sus propias rodillas y juega frotando la palma de ambas manos entre sí. -Creo que tenéis mucho que contarme- Sonríe, mirando una de las piezas que sobresalía del mecanismo ortopédico de la rubia - ¿Puedo ofreceros algo? Una copa, un tentempié? Seguro que estáis sedientos… ¿Zumo de Bissap?- No estaba solo. A su alrededor había seis soldados exactos a los dos de la entrada pero en cuanto pronunció la bebida Guineana una nueva figura apareció de un recoveco con una bandeja vacía. Era un cuerpo flacucho compuesto de parches de esparto que vivía con la cabeza gacha y la cabeza entre los hombros. Aguardaba paciente las peticiones de los invitados para marcharse y traer todo lo solicitado cuanto antes.

- Así que… ¿Quién empieza?- dice sonriendo ampliamente mientras los ojos rojos brillaban en dos pequeños mares negros.

_________________
Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Firma-Legba-A
Volver arriba Ir abajo
Rebecca Logan
DC Universe
DC Universe
Rebecca Logan


Bando : Villano

Insignia de Fidelidad : Año 1

Mensajes : 495
Fecha de inscripción : 24/05/2014
Localización : ¡Yiha, vaquero, mi hogar esta allí donde tengo mi sombrero!
Empleo /Ocio : Criadora de Caballos
Humor : ¡Hay una serpiente en mi bota!

Ficha de Personaje
Alias: Cowgirl
Nombre real: Rebecca Logan
Universo: DC Universe

Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Empty
MensajeTema: Re: Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba)   Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Icon_minitime22nd Mayo 2017, 18:36

El Sheriff descendió del aparatoso trasto mecánico, satisfecho de poder volver a posar los pies en el suelo. Desde que había recobrado la facultar de andar, se había vuelto uno de sus mayores placeres. A pesar de que la arena era un terreno traicionero para transitar, y el viento la levantaba hasta que te hacía arder los ojos, rozarte la piel, y secarte la garganta. Carraspeó y se arrebujó en su poncho, inclinando la cabeza de tal modo que el ala del sombrero la protegiera de la arena en la medida de lo posible. Tenían que avanzar a pie, bajo el sol abrasador, pero no era nada que pudiera espantarle. Había hecho cosas mucho peores para impartir justicia, y había aguantado torturas mucho mayores. Eso, en comparación, sería como un paseo.

Una de las juntas se atascó tras verse obligada a bajar a media carrera un montículo de arena, pero consiguió desencallarla para que volviera a circular como debía. Los serbos eran de una calidad muy buena, así que era difícil que tuvieran problemas severos que no se arreglaran con facilidad. Se detuvieron a beber agua, y tras media hora, afrontaron la imponente mole de huesos que, según hellboy, era el castillo del Dios llamado Papa Legba. Recordó la socarrona sonrisa del joven cuando le disparó en plena cara. Incluso aunque ahora contara con munición bendecida, era posible que nada fuese capaz de dañar a ese ser. Pero no importaba. Nada le había amilanado hasta entonces, y no empezaría a hacerlo ahora. Se detuvo al llegar a una entrada que daba pie a un largo puente, de nuevo compuesto por huesos. Alguno de ellos tan grande, que se preguntaba de que tipo de animal o criatura podrían provenir semejantes esqueletos. Frente al comienzo del puente había dos criaturas que recordaban vagamente a pájaros. Su piel era tan negra que parecían dos desgraciados condenados al alquitran, y sus facciones ocultas tras una máscara no permitían vislumbrar si eran personas, o si por el contrario, eran criaturas. Una de ellas giró la cabeza de forma repentina, dirigiéndose a hellboy, y permitiendo después el paso de ambos hacia la entrada del castillo. Las enormes puertas se abrieron con un ruido chirriante y en su interior, una enorme sala daba pié a una tríada de escaleras que se retorcían hacia el interior del palacio.

La inercia jugó un papel esencial en su reacción. En cuanto la mujer negra la cogió por el brazo, un colt salió de su funda en menos de un parpadeo, y apuntó directa a la cabeza de la chamana. Su extraño mensaje hizo que los ojos acerados del Sheriff, enrojecidos por la tormenta de arena, se entrecerraran con suavidad estudiada, sin permitir que pudiera entrever los verdaderos pensamientos que había concluido de esa especie de advertencia. Tenía un sonido especial, el taconeo de las botas sobre el hueso. Como dos maderos quemados al frotarse.

Encontraron al Dios sentado en su salón, con un porte magnánimo y una apariencia señorial, como el de una Madame de burdel que no espera la última visita, y está dispuesta a ofrecerse en caso de que no queden chicas disponibles. Al aproximarse a la mesa, dos sillas aparecieron como por embrujo, ayudándoles a sentarse, deslizándose sobre el suelo. El Sheriff dirigió una mirada indómita al Dios del Voodoo. Todo allí parecía supeditado a los deseos de su señor. Era un terrateniente. Un potentado. En la mayoría de los casos, eran mala gente que había conseguido lo que tenían de maneras fraudulentas, o sacrificando a sus familias, y explotando a sus jornaleros. Por lo que podía ver del mayordomo, podría tratarse de cualquiera de todas esas cosas.

- Whisky doble. - gruñó a la penosa criatura compuesta de trapos, que apenas si parecía capaz de tenerse en pie. Todo su cuerpo transmitía una sensación inmensa de miseria. Por el rabillo de los ojos percibió el creciente interés que sus implantes despertaban en el Dios. Arrugó la nariz con cierta desgana, y luego, le remitió una mirada endurecida. - ¿Hemos venido para tener una charla de viejas?- preguntó al Dios, y luego miró a Rojo. Tras una pausa suficiente, volvió de nuevo la mirada a Legba. - A diferencia de nuestro primer encuentro, esta vez se me ha invitado. No irás a decirme que me has hecho venir hasta aquí sólo por el placer de mi compañía. - añadió, sacándose el sombrero para retirarse el poncho, y luego volver a ponerse el sombrero. - Tu dirás que quieres saber. - finalizó, para después acomodarse en la silla, con las rodillas en 90 grados, la posición mas cómoda para mantenerse sentada, y entrelazando ambas manos sobre su regazo, observando la extraña arquitectura de la sala.

_________________
Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) 25zjebs
Volver arriba Ir abajo
Hellboy
Dark Horse Universe
Dark Horse Universe
Hellboy


Personaje No Jugador

Bando : Héroe

Grupo : B.P.R.D.

Insignia de Fidelidad : Año 1

Mensajes : 1081
Fecha de inscripción : 26/04/2014
Localización : Donde haya algún cabronazo
Empleo /Ocio : Pateador de culos sobrenaturales a jornada completa
Humor : ¡No juegues conmigo, mujer! ¡He estado bebiendo con esqueletos!

Ficha de Personaje
Alias: Hellboy.
Nombre real: Anung-Un-Rama.
Universo: Marvel

Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Empty
MensajeTema: Re: Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba)   Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Icon_minitime9th Junio 2017, 11:06

Los últimos metros fueron los más difíciles. A medida que se acercaban a aquellas enormes puertas, la tensión del demonio iba en aumento. Tenía que estar sereno, tranquilo. "Recuerda, Papa Legba es un dios que os ha invitado a su casa. Debes ser educado y cortés en todo momento. Al fin y al cabo, es vuestro anfitrión." Las palabras de Abe resonaban en su cabeza. Lo habían estado ensayando durante las últimas semanas: templanza, tranquilidad, buena actitud... Cosas con las que Hellboy estaba poco familiarizado a decir verdad. Su modus operandi era ser terco y hacer las cosas a su manera. Efectivas sin duda, pero a veces es mejor cerrar la boca y bajar un poco la cabeza, y más aún si estás en la casa de un dios que podría convertir tu vida en un sufrimiento eterno con un simple muñeco y un alfiler. Recitó las palabras en su cabeza de nuevo, memorizando bien el significado de cada una y recordando lo mal que podría ir si se comportaba como solía hacerlo él.

Cuando casi habían llegado a la puerta, uno de los soldados que la guardaban hizo un movimiento brusco con la cabeza que causó que el demonio diese un respingo y el corazón le diese un bote en el pecho. La voz del dios salió a través de la extraña criatura que carecía de ojos y boca, y Hellboy puso los ojos en amarillo, contando internamente hasta diez para relajarse. En cualquier otra situación eso no le habría importado, pero con los nervios a flor de piel no pudo evitar asustarse.

- Dije que vendría y aquí estoy. Siempre cumplo mi palabra.- Dijo con una sonrisa que hasta él habría sido capaz de ver lo forzada que era, pero por lo menos lo estaba intentando. El soldado volvió a adoptar la posición original y las puertas se abrieron ante ellos. Tras cruzarlas y dejar un pequeño rastro de arena en el pasillo, estas volvieron a cerrarse lentamente. Estaban dentro. Ahora sí que no había vuelta atrás. Solo quedaba esperar y ver cómo acababa todo. El demonio apoyó los dientes inferiores por delante de los superiores, sacando ligeramente la mandíbula inferior mientras observaba la arquitectura del castillo. Era realmente impresionante, macabro, pero impresionante. Por el rabillo del ojo vio otro movimiento brusco, esta vez por parte de la vaquera, quien apuntaba a la cabeza con su arma a una mujer que había aparecido casi por arte de magia. Sus ojos blancos miraban a la rubia con atención mientras le hablaban de lo que guardaba en su interior. Legba lo sabía pues, que Victoria vivía en el interior de Rebecca. Eso podía ser muy bueno o muy malo. Tal vez quisiese ver hasta dónde alcanzaba el poder del demonio o simplemente quisiese usar a la vaquera como su jinete personal. Helboy agitó la cabeza, decidiendo no pensar en esas cosas y esperar a ver qué sucedía en realidad. La mujer les guió a través del castillo y la siguieron.

Rojo estaba seguro de que habían recorrido todo el castillo antes de llegar a la sala donde les esperaba Legba. Estaba completamente perdido, y habría jurado que el camino hasta la sala del trono había sido distinto cuando él fue solo. El dios les dio la bienvenida y les ofreció algo de beber. La vaquera, ni corta ni perezosa, le pidió al improvisado camarero un whisky doble. Tal vez un poco de alcohol le ayudase a relajarse un poco, así que le indicó a la criatura que fuesen dos los que trajese. Se sentaron y el demonio apoyó su mano izquierda sobre la mesa, mirando al dios que parecía complacido con la presencia de sus dos invitados. Rebecca le contestó, en un tono que al demonio le pareció demasiado seco para la situación en la que estaban, aunque también podía ser eso. Al estar tan tenso todo le parecía demasiado cortante o borde, pero no le faltaba razón en sus palabras, y volvió la mirada al dios.


- Nosotros hemos cumplido nuestra parte del trato. Estamos aquí, como pediste. Ahora nos queda saber qué es lo que quieres de nosotros...-

_________________
Quién soy                         Qué hago                         Mi careto

Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) 2nu254g
Volver arriba Ir abajo
Papa Legba
Omega Universe
Omega Universe
Papa Legba


Bando : Villano

Insignia de Fidelidad : Año 2

Mensajes : 129
Fecha de inscripción : 17/01/2015

Ficha de Personaje
Alias: Legba
Nombre real: Papa Legba
Universo:

Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Empty
MensajeTema: Re: Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba)   Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Icon_minitime28th Julio 2017, 17:58

El ambiente enrarecido desaparecía poco a poco con los primeros instantes. El muñeco gigante y esmirriado, sin levantar la vista, asintió ante la petición de la rubia, a quien el dios miraba con rostro neutral pero un genuino interés. En el preciso instante en el que la rubia abrió la boca, el dios esbozó una sonrisa brillante y sincera, destacada por lo oscuro de su piel. - No, claro que no- Se recuesta en el trono, acariciando con una mano la calavera que funcionaba de reposabrazos. Ninguno de los dos accedió a contarle absolutamente nada sobre el alma mística que yacía en el cuerpo de la joven, así que supuso que no era plato de buen ver ni de agrado, y con insistencias sólo conseguiría incomodarles. -Yo cumplí mi parte del trato hace tiempo, Rojo… No alardees, mantén orgulloso a papá- dijo guiñándole un ojo haciendo referencia a Manning. -Efectivamente, esto no es una reunión de señoras- dijo mirando a Rebecca, fijando sus pupilas en los ojos lapislázuli. - Le veo diferente, si me lo permite, Sheriff- Y a partir de ese instante, todo se convirtió en un debate de diálogo doble, en el que Legba trataba con ella mientras el demonio y el dios mantenían una conversación paralela, telepática, que se desarrollaba con indirectas y comentarios de lo más sutiles. - Quise que su amigo nos presentase por varias razones- En ese preciso instante, el siervo vuelve, con un vaso de puro whisky doble, seco y cargado. Durante los instantes que ese siervo estuvo presente, Legba enmudeció, aguardando que volviese a marcharse. -Cheers…-dice en perfecto inglés americano, asintiendo para que lo pruebe y con él, la sorpresa que le ayudaría para cuando consiguiera lo que quería. Porque lo iba a conseguir. -La primera, el interés. No todos los días se conoce a un verdadero Sheriff… la mayoría de los otros condados están más que echados a perder- Eso era cierto. Aunque la figura del sheriff seguía existiendo, la mayoría eran policías gordos de pueblo que no podrían andar una milla sin ahogarse en el intento-La segunda, tu talento…- dijo clavando los ojos en ella mientras se quitaba un alfiler del sombrero, lo limpiaba frotándolo contra la solapa y lo volvía a poner, dándole a entender que se refiere a su talento subterráneo. Desconocía si Rojo sabría lo de aquel día, pero si no, no tendría por qué entender de lo que hablaban. -Y la tercera… Que puedo ayudarte. Y siempre merece la pena ayudar a los necesitados- Una mirada fugaz a sus piernas, luego a rojo, sonriendo de medio lado-Quiero proponerte un trato… Como bien sabes, son sencillos- Que se presentasen en el castillo, fácil de conseguir, y que le diese la oportunidad de confiar en él, cosa que incumpliría si no estuviese dispuesta en ese instante a escucharle.

-Conozco ciertas cosas por las que habéis pasado- En ese momento desvía por una milésima de segundo la pupila hacia rojo- Y por mi parte humana, conozco perfectamente bien lo que es vivir con un parásito... - A partir de ese instante, el entendimiento telepático adquirió un nuevo nivel para el dios y la joven. Hellboy empezó a ser un adorno junto a ella, ni siquiera importaba su presencia -La incomodidad, sentir que te retrasa, que te entorpece en tus verdaderos propósitos… Es cuanto menos frustrante. Pero yo sé que quieres estar bien, y sé que si pudieras, te liberarías de esa gran carga- Los ojos del dios parecían durante todo su diálogo, más humanos, comprensivos. El dios que mira por encima del hombro, que vacila y que ríe con la indefensión, desaparece y abre paso uno piadoso y comprensivo que sin embargo no refleja la más mínima intención de sentir misericordia o lástima por ella. Sólo conexión, como dos heridos de guerra.-Pero imagino que el demonio te habrá informado sobre que no trabajo gratis. Por suerte, lo que quiero a cambio de este trabajo no es mucho- Se inclina hacia delante, con los codos apoyados en los muslos, acariciándose las palmas de las manos entre ellas. Alza la cabeza y la señala un par de veces, para luego recuperar la postura- Tu parásito. Quiero quedármelo. Ese sería todo el precio de mi trabajo, íntegro- Su rostro está tranquilo. No es el rostro de un depredador de los negocios ni el de un trilero. Sino la de un hombre que realiza un trueque como parte de su rutina, como una venta más. Respira hondo y mira con el ceño levemente fruncido a la rubia, citando al brillante Clint Eastwood en una de las películas más famosas del oeste- El mundo se divide en dos categorías: los que tienen el revólver cargado y los que cavan- Y le añade su toque personal - Y tú tienes mucho que enterrar… Tú decides- se recuesta, volviendo a cruzar la pierna en perpendicular, volviendo a reposar el codo en el trono mientras la punta del dedo índice resbala por su labio inferior, pensativo.

_________________
Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Firma-Legba-A
Volver arriba Ir abajo
Rebecca Logan
DC Universe
DC Universe
Rebecca Logan


Bando : Villano

Insignia de Fidelidad : Año 1

Mensajes : 495
Fecha de inscripción : 24/05/2014
Localización : ¡Yiha, vaquero, mi hogar esta allí donde tengo mi sombrero!
Empleo /Ocio : Criadora de Caballos
Humor : ¡Hay una serpiente en mi bota!

Ficha de Personaje
Alias: Cowgirl
Nombre real: Rebecca Logan
Universo: DC Universe

Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Empty
MensajeTema: Re: Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba)   Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Icon_minitime25th Septiembre 2017, 02:40

- Los atardeceres no pasan en balde para nadie. - dice con neutralidad, y un sutil tono de desafío que seguro que al Dios del Voodoo no le pasa desapercibido. No es tanto que sea hostil, como que parece incapaz de amilanarse ante cualquier salida que aun hombre como él, que posee tanta información, capaz de colarse en los recovecos mas íntimos de cualquiera y escapar de las peores situaciones en una nube de humo, se le pueda ocurrir. Eso, teniendo en cuenta que a ojos de Legba era una simple mortal, era digno de ver, y sencillo de calificar como una temeridad absoluta. El Sheriff alargó la mano con sequedad hacia el vaso lleno de hielo flotando en el líquido dorado. En una temperatura como esa, era como un abrevadero en el rincón más escondido del desierto. Habría sido capaz de beber meada de caballo. Por suerte no tenía ninguna necesidad de pasar por eso. Sólo por el color era posible saber si el Whisky era de calidad. Ese lo era. - ¿Presentarnos? - su rostro juvenil se arrugó en una mueca que hizo que le cayeran varios años de golpe, torciendo los labios, enseñando los dientes por un lateral. - Es algo que ya hiciste tu sólo. Haciendo alarde de un descaro que no te habría consentido de no ser por. - chasqueó la lengua de inmediato y después, vació medio vaso de Whisky de un par de tragos ansiosos. No por la sed, si no por quitarse aquel terrible sabor a bilis de la boca. La laxitud con la que actuaba antes del incidente le resultaba repugnante. Tragó sin hacer el mínimo gesto a pesar de que ese alcohol sin duda era fuerte, y debía haberle quemado la garganta a su paso. Por neutra que fuera su expresión, no quitaba ojo del Dios estudiando cada uno de sus movimientos. A pesar de haber comprobado que las balas no eran eficaces contra él, le tranquilizaba tener la certeza de que podría haber hecho que ese alfiler saliera despedido de su mano si hubiese querido, antes siquiera de que pudiera reaccionar.

El discurso quedó interrumpido cuando, ante la frase del dios, la silla salió despedida hacia atrás. El Sheriff se había levantado con tal velocidad que la silla se había caído al suelo con un estruendo que probablemente sorprendería a los dos presentes en la sala. Mantenía sus manos apoyadas en la mesa, y miraba a Legba con sus acerados ojos, con tal intensidad que por un instante casi pareció capaz de vislumbrar lo que el Dios estaba pensando. El rostro se mantenía tirante, a causa de la manera que tenía de apretar los dientes y los labios, tan fruncidos que el color había desaparecido de los bordes. Entonces entendieron que no se trataba de una reacción, si no de un ejercicio absoluto de autocontrol. Su capacidad para contenerse y pensar con frialdad era lo que había impedido que vaciara un cargador sobre la cabeza de Legba, en su propia casa. El hecho mismo de que insinuara que el Sheriff era un necesitado, un tullido relegado a la misericordia y la caridad de los que le rodeaban desafiaba el concepto mismo que representaba. Su ojos derecho tembló a causa de la rabia, pero a continuación, se agachó, recogió la silla y volvió a sentarse, dando un golpe con las patas que amenazaba con desmontar el amasijo de huesos que la componía. Tomó asiento de nuevo y se bebió el restante del líquido, para apoyar el vaso con un golpe seco sobre la mesa. - ¡OTRO!- el Sheriff le habló al salón. Le era indistinto cual de los esclavos que tenía bajo su poder el negro le rellenara el vaso.

Su expresión impertérrita no varió durante todo su discurso. De su mirada fría como el acero era imposible sacar consideración alguna respecto al discurso que Legba estaba elaborando en aquel momento. Mucho más entender que sus palabras escondían un significado que escapaba al entendimiento de los presentes, sobretodo para Rojo. Sus ojos se entrecerraron con la lentitud con que cae el sol, antes del mediodía. Como si del contendiente de un duelo a muerte se tratara, controló cada parte de su musculatura para que no se moviera ni un milímetro, buscando valorar lo que el ofrecimiento suponía para él.

Efectivamente, tenía ese mal dentro. No había sido consciente de hasta qué punto había cambiado su vida, hasta qué punto echaba por tierra sus esfuerzos por ser la figura ideal que él debía ser para sus gentes, pues siempre, SIEMPRE se ha de predicar con el ejemplo. Sin embargo, el incidente le había dejado esas terribles secuelas que había necesitado suplir con la ortopedia de unas piernas de metal que se atascaban, que crujían, que dolían como el mismísimo infierno. Todo lo que le aquejaba, le ralentizaba, todo lo que no le permitía ejercer de una manera total el cumplimiento de la ley, era a causa de ella. De ese parásito.

La frase del antiguo Sheriff resonó en sus entrañas, mientras Legba le daba un nuevo sentido a todo eso. Después, se hizo el silencio absoluto, al menos durante unos segundos. La sonrisa que se dibujó en su rostro no era juvenil, o socarrona, ni tan siquiera provocadora. Algo que habría ido acorde al rostro que la mostraba. Era una sonrisa empalagada de una animadversión que sin duda, era inquietante en alguien cuyo rostro mostraba tan corta edad como el del Sheriff.

- Que me arranquen la cabellera y se hagan con ella un chaleco de flecos. - su cuerpo se balanceó hacia atrás apoyándose con hastío en la mesa, volviendo a coger la copa que habían rellenado. Tras un trago que le llenó ambos carrillos, dejó de nuevo el vaso en la mesa. - Legba, el buen samaritano del palacio de huesos, se ofrece a ayudarme. - asintió, bufando. - Y lo único que quiere a cambio, es este parásito que me está consumiendo por dentro. - la media sonrisa que había quedado se desvaneció, y por primera vez en todo el diálogo, el Sheriff observó de forma penetrante a Hellboy, como si en unos segundos pudiese ser capaz de leer en los ojos amarillos de su aliado todo lo que pensaba al respecto. - No me hagas reír. - su mirada helada se dirigió de nuevo al Dios, acabando la segunda copa en un instante. - ¿Qué interés puedes tener en querer quedarte esa escoria? Ni al peor de mis enemigos se la desearía. - espetó, elevando después la cabeza, y manteniendo sus ojos sin temor clavados en los del Dios del Voodoo.

Aunque por como hablaba, y por cómo esperaba su respuesta, aquello para nada se acercaba al no rotundo que sin duda habría aliviado a su acompañante Rojo.

_________________
Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) 25zjebs
Volver arriba Ir abajo
Papa Legba
Omega Universe
Omega Universe
Papa Legba


Bando : Villano

Insignia de Fidelidad : Año 2

Mensajes : 129
Fecha de inscripción : 17/01/2015

Ficha de Personaje
Alias: Legba
Nombre real: Papa Legba
Universo:

Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Empty
MensajeTema: Re: Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba)   Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Icon_minitime5th Marzo 2018, 13:36

El primer comentario de la vaquera no le pasó desapercibido y de hecho generó una sonrisa en la boca del dios. Esa capacidad de duelo, de reto constante, la competitividad de quien no puede permitirse bajar un eslabón...Resultaba intrigante a la vez que entretenido para quien disfrutaba ver a los humanos aferrarse a lo que le quedaba para mantener un estatus. Cuando se empieza el estudio de los hombres y su comportamiento resulta peculiar el detalle que no pasa desapercibido. Todo el mundo le teme a algo. Arañas, aburrimiento, hambre, soledad, cárcel… Cuando después de tanto tiempo encuentras unos ojos que no tiemblan ni se humedecen, la curiosidad invade lo más profundo de tu ser como el gato que persigue un insecto y es incapaz de dejarlo ir. Cuando el discurso de la niña empezó un crescendo particular, la mano de carne roja se posó sobre el hombro de la mujer como gesto de moderación. Era tranquilizador saber que el único elemento en discordia que podía poner en riesgo el pacto le temía más que nadie de los presentes. -No me habrías consentido…-repite como en un murmullo echándose hacia delante en el sitio mientras asiente con la cabeza. Sutil el cambio de trato de usted a una segunda persona, menos respetuoso.  La serpiente que rodeaba sus hombros estiró el cuello cuando escuchó la provocación y regaló al ambiente un sonido de cascabel.

Le gustaba ver la simpleza del orgullo humano. Una simple provocación a su intimidad y bastaba para hacer estallar al hombre más formal. “De no ser porque no tienes opción de detenerme” Sería la respuesta más adecuada a un concurso de egos, pero resultaba muy poco práctico entrar en esa competición absurda en ese momento y siempre convenía permitir que los mortales creyesen que tenían opción. Nadie hace una apuesta si la derrota es segura.  

A pesar de la advertencia del demonio, la vaquera hizo alarde de su edad con una rabieta propia de la criatura a la que le arrebatan su juguete favorito. Al fin y al cabo todos los niños con exceso de dinero son unos caprichosos. Cuando alzó la vista hacia el dios en gesto de autosuficiencia y autocontrol el dios reaccionó con la marca del color que le representaba. Gris. Permaneció como la calma más neutra propia de lo que está muerto. Dirigiendo la mirada directa a su pupila, sin retirarla, sin parpadear, incluso sin fingir que respiraba, mostrando la personalidad de quien tiene todo el tiempo del mundo para permitir que se le pase la rabieta, hasta que tomó asiento de nuevo.

La orden a gritos de la sheriff no generó movimiento alguno en los sirvientes y el dios alargó los segundos de silencio e inmovilidad absoluta en el entorno, hasta que Legba alzó dos dedos al aire y con dos movimientos rápidos, estos se retiraron para buscar la bebida que había requerido la sheriff. A veces los pequeños gestos delatan el lugar que ocupa cada uno. Después de la tensión lo único que demostraba que en el sitio había algo vivo era el sonido de la estruendosa respiración de Hellboy que hacía que su pecho subiese y bajase con violencia, delatando su estado de inquietud.

Para cuando el segundo whisky llegó a la mesa, comenzó la negociación. -¿Qué interés puedes tener en querer quedarte esa escoria? Ni al peor de mis enemigos se la desearía- El dios sonrió con amplitud, haciendo destacar un tono amarillento en su dentadura que aun así destacaba al contraste con su piel -Las sanguijuelas de unos curan la dolencia de otros- se limitó a decir mientras la serpiente volvía a enroscarse en su cuerpo y a reposar la cabeza sobre el hombro diestro del dios. -Y al desangrado no le importa dónde vayan a parar sus parásitos- dijo más como condición que como hecho.

Legba sabía que quien acude a él sólo es por una serie de opciones limitadas: Ser creyente y acudir a él como dios yoruba que es, no conocerle lo suficiente y estar en el lugar y momento oportunos, o bien estar desesperado y no tener muchas más opciones. Y ella era una católica que conocía de su presencia y de todos los datos de él de los que dispone el B.P.R.D.  -Odio que me hagan perder el tiempo, tanto como hacérselo perder a alguien valioso-Fingió un suspiro y del bolsillo interior de su chaqueta sacó un pergamino de papiro suficientemente grande como para sospechar que no cabía en un bolsillo tan diminuto. -Hablando en plata...- Dijo extendiendo el papiro sobre la mesa que les separaba y soltando sobre él una pluma de Oca que parece que le caía de la manga. Luego se reclinó hacia atrás y cruzó las manos. Inclinó el rostro pegando la barbilla al pecho y cuando los abrió, el rojo sangre de sus ojos brillaba más que el sol del continente. - Te ofrezco buscar solución para tu parásito hasta que pueda quedármelo, que será la manera de quitártelo de encima- En cuanto abrió la boca para hablar, la luz de las velas se intensificó y la pluma empezó a escribir encima del pergamino por su cuenta en un tono tierra muy oscuro marcando por guiones los puntos que el dios ofertaba -Te ofrezco la analgesia parcial que el parásito te produce hasta que sea mía- y en ese preciso instante, mientras el dios permanecía inmóvil con la yema de los dedos conectadas entre sí, el dolor de los tornillos hundidos en la carne, de las heridas luchando por cerrarse y de los huesos desgastados fue disminuyendo poco a poco, sin llegar a desaparecer. El alivio se notaría desde un inicio aunque fuese sólo en la postura de la humana de los músculos que trabajaban para compensar el dolor. -Te ofrezco mi responsabilidad, mi guarda y mi capacidad para ser propietario de ese fragmento de alma que aguardas en ti y de la que tanto ansías desprenderte y en complementación del primer pacto, ser quien te la arrebate cuando encuentre el modo de hacerlo- El demonio empezó a revolverse en el asiento.

La pluma descansó  en perpendicular al papel y algo más alta que cuando estaba escribiendo, los ojos del dios volvieron a toda la normalidad posible y él alzó la mirada, directa a los zafiros de la sheriff -¿Algo más por mi parte? Si estás conforme empezaremos con lo que tú- dijo extendiendo su mano vendada hacia el cuerpo de ella-me ofreces a mí- terminó llevándose una mano al pecho. Quien conociese a Legba sabría que en pocas ocasiones a excepción de los pactos se veía al dios con esa seriedad y concentración.

_________________
Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Firma-Legba-A
Volver arriba Ir abajo
Rebecca Logan
DC Universe
DC Universe
Rebecca Logan


Bando : Villano

Insignia de Fidelidad : Año 1

Mensajes : 495
Fecha de inscripción : 24/05/2014
Localización : ¡Yiha, vaquero, mi hogar esta allí donde tengo mi sombrero!
Empleo /Ocio : Criadora de Caballos
Humor : ¡Hay una serpiente en mi bota!

Ficha de Personaje
Alias: Cowgirl
Nombre real: Rebecca Logan
Universo: DC Universe

Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Empty
MensajeTema: Re: Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba)   Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Icon_minitime11th Abril 2018, 13:08

Aguardó sin moverse ni un ápice. Los sirvientes tardaron en atender su demanda una eternidad. Quizá debería plantearse tener personas en lugar de esos muñecos recosidos, que daban la impresión de ir a ceder en cualquier momento, dejando caer todo el relleno de serrín y polvo que debían tener dentro. Aunque era obvio que en un castillo de huesos en medio del desierto, esa sería la última de sus preocupaciones. Alargó la mano hacia el vaso después de volver a tomar asiento, y paseó los hielos por el interior de manera que empaparan todo el líquido dorado que le habían servido. Sintió una extraña náusea, quizá del dolor, del aparato mecánico, o tal vez del hecho de que el Dios del vodoo supiera tanto acerca de lo que le perturbaba. A pesar de lo cual, nada se tradujo a su rostro que se convirtió en una máscara imperturbable mientras Legba hablaba.

En muchos casos, la jovialidad, el temperamento y las distracciones infantiles habían hecho que el Sheriff no se encontrara en plenas facultades. De eso había empezado a ser consciente después del incidente con Victoria. Pero también había traído consigo repercusiones satisfactorias. Nada de eso conseguía nublarle la mente ahora. Así que sus consideraciones eran mucho mas objetivas, racionales, su objetivo era la ley, y por ello el resto de cosas carecían de importancia. Era capaz de mantener sin objeción los ideales inherentes a la estrella, imponer los castigos justos, y sus sentidos se habían agudizado hasta convertir su razonamiento deductivo en algo digno de admirar. Por ello, a pesar de que parecía presa del tedio, cada una de las palabras que Legba pronunció fueron cuidadosamente analizadas para crear una construcción de la situación en la mente de la Sheriff.

Hellboy se removió inquieto, sus ojos amarillos transmitiendo un nivel de advertencia que era difícil pasar por alto. El grandullón Rojo no era dado a las sutilezas, y así lo estaba demostrando de una manera más que evidente para todos los presentes. Muñecos de ojos de botón cosidos incluidos.

- ¿Quieres hacer un trato? - preguntó el Sheriff, alargando la mano hacia el trozo de papel apergaminado que le cedía el Dios, sus ojos fulgurando en un rojo tan vivo que parecía capaz de vomitar por ellos el fuego del sol. De no haber sido incapaz de sentir miedo, ese brillo sobrenatural le habría paralizado. Sus ojos acerados de un azul afilado surcaron el papel, leyendo cada una de las letras en profundidad, tratando de comprender los pormenores de lo que podía significar. No era hombre al que le gustara la formalidad a la hora de actuar, pero comprendía a la perfección que el conocimiento de la ley es poder. Cuando había disputas por tierras, por los carros, por los caballos. Al final, por mucho que la situación fuese favorable para una persona, una firma, un albarán o un sello en el papel adecuado podían cambiarlo todo. No era la primera vez que presenciaba una expropiación clara que se había hecho a través de métodos poco ortodoxos, y a pesar de ello, recurriendo a la legalidad. Si algo tenía presente era que una vez hecha la ley, no tardaban en aparecer los pillos que se escurrían a través de ella, creando la trampa.

Leyó y releyó el contrato varias veces, en pleno silencio. A su lado Hellboy apretaba sobre su regazo la mano de piedra, como si estuviera conteniendo las ganas de hacer algo impulsivo. Conociendo el recorrido del demonio, podía imaginarse de qué se trataría.

- Como suele decirse en el Missisippi, nadie regala pepitas a pan de maíz. - dejo con un gesto severo el contrato sobre la mesa. Alargó la mano hacia el vaso, y se limitó a mojarse los labios y la lengua lo justo para que el dichoso calor no le impidiera tener la garganta limpia para hablar. - Si tantas molestias te has tomado en redactar todo esto, no me cabe duda de que ya tienes en mente cuál es la pepita que vas a reclamarme. No voy a negociar sin saber si voy a comprar una granja o un caballo. - sus ojos afilados y fríos como una bala en la recámara de un revolver se clavaron sin miedo en los luminosos del Dios.- Así que te preguntaré una vez, nos ahorraremos las formalidades propias de las negociaciones absurdas por compromiso en las que yo te hago una oferta que es obvio que no te satisfará, tu me ofreces una contraoferta en la que yo no cederé, y continuaremos así hasta llegar al meollo de todo esto. - no quería perder ni un minuto de su tiempo. Del de ninguno de los dos, en realidad. - ¿Qué es lo que quieres en pago a tus servicios?- planteó el Sheriff, esperando la respuesta.

Nada de eso suponía un sí. Pero sería un estúpido si no aprovechara la oportunidad de librarse de esa criatura horrible que residía atrapada en el interior de sus entrañas. No podría vivir en paz hasta que no encontrara la manera de sacarla.

_________________
Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) 25zjebs
Volver arriba Ir abajo
Papa Legba
Omega Universe
Omega Universe
Papa Legba


Bando : Villano

Insignia de Fidelidad : Año 2

Mensajes : 129
Fecha de inscripción : 17/01/2015

Ficha de Personaje
Alias: Legba
Nombre real: Papa Legba
Universo:

Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Empty
MensajeTema: Re: Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba)   Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Icon_minitime17th Abril 2018, 11:13

La calidez y la llama amarillenta de las velas hacía que las siluetas de quienes estaban presentes temblasen en el más muerto silencio como si aún quedase algo de vida en la petrificada escena. Por un instante y hasta que la Sheriff no tocó la hoja pareció que el absoluto silencio podía ser real. Ningún mueble chirriaba, los sirvientes permanecieron inertes y ni el crepitar de la lumbre pareció escucharse. -Quiero hacer un trato- Afirmó sin darle mayor importancia, simplemente confirmando la pregunta que la niña le había hecho.

Sus ojos eran muy distintos a los de la muchacha que conoció en esa sala de taxidermia. Rebecca Logan era una muchacha que ya de por sí derrochaba seguridad allá donde sus botas de montura pisaban. Era una yegua imposible de domar que caminaba con seguridad haciendo firme cada huella. Y tratar de amansarla poseyéndola cual jinete no iba a salir bien… Por ello, el dios caminaba con cautela, dejándola su espacio libre y símplemente adentrándose donde ella no se revirase. Pero su mirada la delataba. Delataba el alma sin miedo que habitaba en su interior y la inteligencia impropia de una cría tan joven. Repasaba hábil las palabras del contrato mientras sus pupilas dibujaban líneas rectas como quien abre un sobre a puñal. No había un atisbo de duda… pero la yegua tenía las orejas hacia atrás y buscaba a quién debía cocear.

La pluma volvió a apoyar el cabezal sobre el papiro. Escribía sin necesidad de tintero ni recarga. Sólo trazaba líneas y estas aparecían en el papel con una ortografía envidiable mientras esta se movía. -Me ofreces…- La pluma se ciñó aún más al papiro y finalmente, arrancó -La propiedad del parásito en su totalidad. Para que pueda acudir a ella en el momento en que yo precise. Puedo utilizarla como me plazca, de un modo u otro a ti te resultará irrelevante- La pluma terminó y escribió otro guión antes de que el dios abriera la boca. -Me ofreces fidelidad única imposibilitando así la acción o interferencia de ritos, magia, pactos o cualquier otra alteración en lo que al parásito se refiere- Un nuevo guión - Me ofreces la privacidad y el secreto de que lo establecido en el pacto en reunión no saldrá para el conocimiento de nadie que no esté en esta sala ahora mismo de forma presencial y tangible- Desvió la mirada clavándola en el demonio-Eso te atañe a ti también y tendrás que firmar- A fin de cuentas era un favor que le hacía a su amiga… Qué menos.
En la zona inferior del papiro surgió un nuevo apartado de firmante llamado “Testigo:” y el nombre de Anung-Un-Rama al final. Le dirigió una mirada al demonio que no admitía réplica.

-Si se viola el pacto, lo sabré y se quebrantará pudiendo elegir yo la compensación pertinente- La pluma dibujó una floritura a modo de separación entre lo que ofertaba cada participante del pacto y el siguiente renglón de lo que el dios dictaba -Siempre podremos establecer contacto en el instante en el que menciones mi oración, por vía tecnológica o reencontrándonos en persona. Cualquier duda puede ser consultada al guardián de la barrera en cualquier momento y el pacto está sometido a edición en caso de que ambas partes estén conformes con la reforma del contrato- Por último, La pluma se deslizó dibujando la firma de Legba a la izquierda al final del papiro. En el centro el nombre de Rebecca Logan con dos puntos y un hueco en blanco bajo la firma. A su derecha descansaba el nombre del demonio anteriormente preparado.

La pluma se alzó un par de palmos sobre la mesa y con un ligero temblor mientras desprendía de la punta un denso humo gris, se duplicó generando una hermana idéntica a ella que serviría para el demonio. Una vez estaba preparada, se colocaron frente a cada uno de los firmantes y el dios esperó, reclinado en su trono con las manos cruzadas frente a los labios y la mirada fija en los ojos de la joven enferma de Urbach-Wiethe. -Tómate tu tiempo- Afirmó con voz grave y tranquila. En el instante en el que ella firmase, si lo hacía, aparecería en su muñeca derecha, donde debía descansar el cuerpo de un reloj sobre su piel y tatuado a tinta negra y gris un símbolo. El primer sello que determina que queda algo pendiente entre ambos. Esperó permaneciendo paciente a la firma. No respiraba ni parpadeaba. Sólo preparaba otro hilo en el telar de su destino.

_________________
Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Firma-Legba-A
Volver arriba Ir abajo
Rebecca Logan
DC Universe
DC Universe
Rebecca Logan


Bando : Villano

Insignia de Fidelidad : Año 1

Mensajes : 495
Fecha de inscripción : 24/05/2014
Localización : ¡Yiha, vaquero, mi hogar esta allí donde tengo mi sombrero!
Empleo /Ocio : Criadora de Caballos
Humor : ¡Hay una serpiente en mi bota!

Ficha de Personaje
Alias: Cowgirl
Nombre real: Rebecca Logan
Universo: DC Universe

Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Empty
MensajeTema: Re: Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba)   Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Icon_minitime17th Abril 2018, 23:52

Se trataba de eso. Eso era lo que quería. Pero aún había parte de aquello que escamaba profundamente al Sheriff. Entre otras cosas, porque no entendía que interés podría tener en ello. De una manera neblinosa, ciertos recuerdos se recrearon en su mente desde que todo aquello empezara, y como si fuera algo que había sido evidente pero que se había escapado a su conocimiento, algo que todavía le enervaba más de una manera interna que se esforzó en no expresar, consiguiendo que no cambiara ni un ápice la expresión severa y adusta que su rostro había adquirido desde que empezara toda aquella extraña negociación, comprendió que había sido algo tan evidente que quizá lo había pasado por alto por subestimarla. Esa parte pusilánime y sin sentido que ahora vivía en su interior, en parte siempre había estado allí. La obvió porque entonces consideró que no suponía ninguna amenaza, pero ahora lo era. Ahora tenía ese parásito devorándole las entrañas, y estaba sirviendo como moneda de cambio. Una que le había arrebatado uno de los dones con los que había sido bendecido. Demonios, ya ni siquiera era capaz de montar a caballo con la comodidad que era necesaria para el desempeño de su trabajo. Ahora dependía de ese infierno mecánico para funcionar. Apretó la mandíbula, sabiéndose un lisiado que necesitaba de esos cachivaches, que no era distinto de los que pedían en las calles de los pueblos después de perder sus dedos, brazos y piernas en los accidentes mineros. Aquella imagen de sí mismo le repugnaba lo indecible.

Pero si algo sabía acerca de las negociaciones, las apuestas y los faroles, es que nunca merece la pena mostrar tus cartas. Si tu mano es buena, todos se retiran, si es mala, te espolean. Cuando la pluma volvió a levantarse al mandado de Legba, el rostro imperturbable varió tan sólo en seguir al artefacto con los ojos, y a medida que escribía, leía el papel, para poder tener tiempo para plantear lo que esas secciones significaban. En qué y cómo le afectaban. Cuando el Dios planteó las primeras condiciones, el demonio a mi lado dió un respingo apoyándose en la mesa de huesos y levantándose.

- ¡No, no, no! ¡Espera!- era cuestión de tiempo. Había sido capaz de contenerse mas de lo esperado, sólo por valorar que estaban en su casa, pero a medida que el contrato se iba ultimando, el hecho de que lo firmara se convertía en algo tangible. Rojo conocía a las criaturas como Legba lo bastante bien para saber que nada bueno podía salir de ahí, pero en ese momento, la opinión del Sheriff no estaba de su lado, y así se lo hizo saber con un gesto de la mano, que dejó al Demonio extrañado y confundido.

- No depende de mi. Y lo sabes. - le cortó tras expresar los tres primeros puntos. - No puedo controlar lo que haga Victoria, ni ningún otro de esos engendros. Está visto o no tendría este problema. - Dió suaves toques con los dedos sobre el papiro. - En cuanto a utilizarla, no estoy nada cómodo al respecto. Mi interés es que te lo lleves, no que yo tenga que guardarlo para recurrir a él cuando te plazca. - añadió, clavando una mirada acerada al dios del Vodoo.- Pensé que eso había quedado claro. Mi intención no es ser un bote de conserva. O aseguras que vas a intentar sacarlo y llevártelo, o no hay trato. - dijo, dejando claro que esa era parte inquebrantable e inequívoca del pacto.

. Esto se está saliendo de madre. - interrumpió el demonio, mirando a ambos. A pesar de haberse comportado, ahora estaba claramente nervioso. - Deberías pensar esto con mucha calma. Estas cosas traen consecuencias, vaquera. - fué una advertencia que quizá no sentara bien al Dios, sobretodo teniendo en cuenta que estaba en su castillo. Por otro lado, sabía que no podía esperar menos del demonio. - Pues vamos a tener un problema, porque yo no pienso firmar nada.- aseveró cerrándose en banda. No es que no quisiera tener cuidado, si no que al final, la terquedad podía mas que su corrección. Incluso a pesar de estar en una situación de total desventaja.

- Tu me has traído aquí. - al Sheriff no le tembló el pulso en absoluto. Aquella frase le cayó al demonio como un jarró de agua fría. Era cierto. Lo que le pasara a la joven no podía cuestionarlo. En parte, había sido su responsabilidad. La había entregado.

- La compensación...- murmuró, quedando depués en silencio con la frase a medio acabar. Repasaba el contrato mirándo cada cláusula, cada recoveco. Pero lo que más problema le planteaba de todo aquello no era tanto el hecho de que él se quedara con ese parásito. En lo que a él respectaba, podía comérsela si quería. No. El problema era en hasta qué punto el saldría perjudicado por la interacción del Dios. Eso es lo que quería evitar a toda costa, así como el daño a los inocentes. - No me gusta la idea de lo que esto pueda significar. El sheriff siempre está del lado del inocente. Nada puede cambiar eso. - afirmó, como si fuese algo escrito en piedra, absolutamente inamovible. - Sería capaz de poner mi arma a tu servicio, si la causa es justa. Pero no que las repercusiones dañaran a terceros, o repercutan en aquellos que me son fieles, me ayudan y sirven conmigo. - Rojo, Sloan, Fauna. Todos ellos eran buenos ayudantes, y no quería que tuviera acceso a ellos por un trato que hubieran pactado entre ambos. - ¿Crees que las condiciones puedan quedar dentro de esos límites, o lo damos por imposible? - preguntó el Sheriff, sin transmitir nada en su tono.

Hablaba con una neutralidad que constrastaba por completo con el arrebato de hacía pocos minutos, como si un manto helado de medianoche en el desierto hubiera templado su carácter.

- El guardian de la barrera. ¿Quién es y cual es su cometido? - preguntó, procurando que todos los términos desconocidos o vagos encontraran su explicación.

La pluma se desdobló en dos, ante sus miradas sorprendidas, pero el Sheriff aún no se movió. Quería estar seguro de todo lo que fuese necesario antes de firmar. Legba era poderoso, pero aún estaba en él tomar las decisiones, y un trato como ese tendría repercusiones para ambos. A pesar de todo lo que había sufrido, aún tenía fuerzas para hacer las cosas como era debido.

_________________
Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) 25zjebs
Volver arriba Ir abajo
Papa Legba
Omega Universe
Omega Universe
Papa Legba


Bando : Villano

Insignia de Fidelidad : Año 2

Mensajes : 129
Fecha de inscripción : 17/01/2015

Ficha de Personaje
Alias: Legba
Nombre real: Papa Legba
Universo:

Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Empty
MensajeTema: Re: Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba)   Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Icon_minitime20th Abril 2018, 12:19

El dios, aún con el respaldo sobre su trono alzó una ceja ante la impertinencia del demonio. La voz grave por un instante se convirtió en un ruido atronador y vibrante que parecía hacer retumbar todo lo que había en la sala esquelética. -Creo que olvidas dónde te encuentras Anung-Un-Rama- dijo calmado, estirando el brazo hacia un bastón que siempre había estado apoyado contra el trono, poniéndolo entre sus piernas y usándolo de apoyo para ambas manos. Siempre era tan asquerosamente impertinente… Sin embargo para sorpresa del dios, era la vaquera quien ponía a Rojo en su sitio y no a la inversa. No pudo evitar formar una sonrisa en sus gruesos labios. Esa chica… era una mina de oro.

Cuando volvió a formarse el silencio, el dios desvió la mirada a uno de los ventanales.  Por fuera una tormenta de arena violenta hacía un ruido suave y crepitante contra los vidrios. A primera impresión parecía que el castillo se había sumergido en un mar de dunas que formaba mareas en su entorno. -No quiero que nadie esté a disgusto aquí- dijo como el más cordial de los anfitriones -Si lo prefieres, puedes esperar fuera-ultimó, refiriéndose al desierto.

Cuando la bestia roja parecía estar más calmada, volvió a dirigir su mirada sangrienta hacia la figura del Sheriff mientras hablaba. -No estoy hablando de que seas mi saco de arpillera personal donde guardar mis pertenencias. Pero para poder quitártela, necesito que sea mía y poder acceder a ella cuando sea preciso… Haré todos mis esfuerzos por quitártela, pero hacerlo sin que sufras más de lo que tu cuerpo puede aguantar es muy complicado. Necesitaré información constante para poder arrebatártela y eso implica que no puedo vulnerar una propiedad ajena cada vez que necesite de ella.- Aclaró mientras la pluma escribía con detalle el compromiso del dios a hacer todo lo posible por quitarle el parásito sin matarla de ningún modo.

Escuchó con atención sin desviar la mirada un instante de ella, fijándose en sus funciones y necesidades vitales. Cómo se movía su pecho arriba y abajo en cada respiración y pausa, sus parpadeos, su boca salivando. A veces se olvidaba de lo liberador que era haber conseguido librarse de todas esas cargas. Cuando terminó de hablar, Legba asintió un par de veces mirando el papiro. Parecía que el iris refulgía de nuevo  -El sheriff no cometerá dolor ni carga negativa sobre quienes nunca hayan incumplido ley o moral- Sentenció con tono narrativo mientras la pluma escribía al tiempo exacto que él hablaba. -También serán intocables todos aquellos seres a quienes el firmante principal tenga cercanía- conocía el trastorno fáunico de la muchacha y sabía que los humanos no siempre eran prioridad para ella, así que aprovechó para marcarse un tanto incluyendo a seres conscientes y vivos que escapasen de la humanidad en su parte del acuerdo. Junto al nombre de Rebecca Logan apareció un paréntesis que aclaraba que ella era la principal.

Alzó la vista a la vaquera -Eso es cuanto puedo darte. No puedo prometerte toda consecuencia negativa ya que no puedo impedir ni ser consciente de que si te pido que te quites el sombrero, tu mejor amigo puede deprimirse. Pero las acciones principales te incumbirán a ti y sólo a ti. No puedo evitar daños colaterales que sean producto de tu acción INdirecta o Inacción- remató aclarando con un matiz fuerte en la voz. No podría pedirle que disparase a alguien… Pero sí que soltase su revólver en el sitio adecuado donde otra persona podría encontrarlo más tarde.
La pluma detalló guión por guión cada condición en su apartado correspondiente.

Ante la pregunta de la aria, el demonio contestó, señalando al africano con la mano de piedra -Lo tienes delante- bufó con pesar y algo de cansancio. La tensión se reflejaba en sus hombros y en su gesto. No era particularmente bueno camuflando sus emociones. -¿Recuerdas a Sarabi, la chamana que os ha recibido en la entrada hablándote de un guardián? Se refería a mí- Aclaró sin medio toque de soberbia, como mero río informativo. Esperó calmado a la decisión mientras ambas plumas levitaban a la altura de ambas manos, pacientes. A fin de cuentas, su tiempo corría más rápido que el de Eleggua.

_________________
Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Firma-Legba-A
Volver arriba Ir abajo
Rebecca Logan
DC Universe
DC Universe
Rebecca Logan


Bando : Villano

Insignia de Fidelidad : Año 1

Mensajes : 495
Fecha de inscripción : 24/05/2014
Localización : ¡Yiha, vaquero, mi hogar esta allí donde tengo mi sombrero!
Empleo /Ocio : Criadora de Caballos
Humor : ¡Hay una serpiente en mi bota!

Ficha de Personaje
Alias: Cowgirl
Nombre real: Rebecca Logan
Universo: DC Universe

Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Empty
MensajeTema: Re: Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba)   Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Icon_minitime24th Mayo 2018, 12:29

No había hecho demasiados aspavientos desde que habían llegado. Se había limitado a mirarles, sentado desde su trono, con esa mirada roja como un fuego encendido en medio del desierto. El sheriff conocía a la perfección esa sensación y cómo funcionaba. Estaba en su terreno, lo sabía y actuaba de manera confiada porque de otro modo habría sido contraproducente para sus propósitos. Sin embargo, sabía que el Dios era inteligente, y que no estaba haciendo las cosas por hacer. Tenía un interés obvio por conseguir su parásito, y aunque no supiera a qué se debía, no le resultaba inconveniente. A cada cosa que puntualizaba le seguía una explicación que había sido valorada y calculada, y que a conveniencia de ambos acababa transcrita en el papiro en el que quedaban escritas todas y cada una de las condiciones que les atañían. El sheriff estaba haciendo sus propias valoraciones, por mucho que pareciera una persona de campo a la que era fácil atribuir un nivel de inteligencia inferior, su capacidad de razonar era muy notable. Más ahora, que cuando ese parásito se había adentrado en su interior, causando los estragos que le habían costado la facultad de andar.

Cuando la pluma que rasgaba el papiro finalizó, se levantó de la mesa afianzando las botas llenas de tornillos metálicos en el suelo. La sugerencia de que el demonio esperara fuera quedó acallada en un silencio en el que sus acerados ojos azules se pasearon a través de las palabras escritas en el papel, releyéndolas hasta tres veces para estar convencido de que cada punto del contrato estaba bien explicado. No entendía porqué razón habría hecho hincapié en añadir a cierta sección la posibilidad de atañir tanto a humanos como a bestias, pero tanto daba. Para él los animales no tenían mayor importancia, salvo por una cuestión práctica. Es cierto que una vez te habitúas a un caballo, y conoces su carácter, su resistencia y el modo en que responde a sus miedos e instintos naturales, resulta engorroso volver a empezar el proceso de nuevo con un nuevo animal. Pero fuera de eso, ¿Qué otra razón podría haber?

Para él eso no tenía a menor importancia. Pero en pleno dominio de sus facultades, ignoraba por completo que el Dios había tenido muy en cuenta las repercusiones que esa sutil cláusula podrían tener para la interesada en cuestión. La más afectada por ese contrato y que en ese momento, nada podía hacer para interceder y evitarlo.

- Es un trato muy justo. - conminó el Sheriff, que alargó la mano hacia la pluma, haciendo que Rojo desencajara su expresión. Apoyó la punta de la pluma sobre el papiro, y devolvió una mirada al Dios del Vodoo. - Antes de firmar, creo que me falta una cosa... - dijo apoyando el codo sobre la mesa y el mentón sobre sus nudillos. - Aún no me has dicho tu cometido. - entrecerró los ojos con suavidad estudiada. - Es mera curiosidad, Guardian. ¿Qué es lo que guardas? - dijo manteniendo la pluma con firmeza sobre el papiro, mientras la pluma de rojo aún se mantenía levitando.

Por mucho que le destrozara, por mucho que le doliera. El demonio acabaría firmando. Tendría que vivir con la carga de lo que había hecho. Del precio a pagar por la inestimable ayuda que Legba había supuesto para ellos con todo el tema de los Jinetes del Apocalipsis. El primer encuentro con Rebecca, fortuito por completo, y que ahora, en esas circunstancias tan desfavorables, parecía haber pasado hacía una eternidad.

_________________
Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) 25zjebs
Volver arriba Ir abajo
Papa Legba
Omega Universe
Omega Universe
Papa Legba


Bando : Villano

Insignia de Fidelidad : Año 2

Mensajes : 129
Fecha de inscripción : 17/01/2015

Ficha de Personaje
Alias: Legba
Nombre real: Papa Legba
Universo:

Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Empty
MensajeTema: Re: Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba)   Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Icon_minitime20th Junio 2018, 11:24

El pacto se estaba alargando más de lo esperado. Sin embargo nunca supuso una molestia para el Dios. Aquellos que vigilaban sus espaldas de todo recoveco y pliego posible en los huecos vacíos de los contratos eran quienes daban resultados más interesantes a la hora de ejecutar los tratos. Además, el tiempo pasa más despacio cuando su paso te genera indiferencia.

A pesar de todo ello, cuando la punta de la pluma se apoyó sobre el papiro, vivió una de las pocas cosas que aún le hacían sentir vivo. Esa excitación de riesgo y de emoción al trabajar la mente para considerar un pacto más y todas sus posibles resoluciones. El alivio de saber que al prometer un alma más a los Orishas estaría mucho menos asfixiado y la tentación excitante de saber… que ahora la vaquera, el parásito, le pertenecía.

Pero entonces escupió la última pregunta. -Una puerta. De hecho podríais verlo como un paso o un cruce- cabiló pensativo por un instante, olvidando por completo fingir que parpadear y respirar eran una necesidad también para él -Conoceréis la metáfora del río Aquerón- Lo asumió. Lo dio por hecho. Las religiones Europeas occidentales eran materia prima mientras que las de el continente negro eran tan invisibles como las desgracias de su gente. -Si tuviera que señalarme, me colocaría en el lugar, para esta metáfora completa como Caronte. Acompaño a las almas a su último destino, las cuido y guardo de resultar perdidas, de situarse en el mundo que no les corresponde o incluso ser secuestradas por los nigromantes.- Dió unos segundos de margen para analizar la reacción de sus invitados, en caso de haberla y ofreciendo un tiempo de reflexión para los mortales. -Y también soy Hades. Me pertenecen, les ofrezco un lugar seguro y garantizo un equilibrio lógico y necesario entre el mundo de los muertos y los vivos- Mintió. Pero ningún mortal podría estar bajo el conocimiento de que él era un simple barquero en un mundo de dioses. Una Ammyt que devoraba los corazones ingratos mientras ellos se deleitaban de la calidad muerta de Anubis. En la tierra de los Orishas… él era un simple Loa.

Suspiró forzado, haciendo notable la cantidad de tiempo que llevaba sin respirar -¿Satisfecha?- dijo totalmente complacido con su descripción, mientras dentro de él se extendía el fuego de la rabia por haber tenido que usar una referencia occidental teniendo tantos representantes de la mortalidad en su mundo.

El gesto habló más que sus palabras. La pluma se arrastraba fluida como el Nilo sobre la trama del papel, secándose la tinta al ritmo que sobreescribía trazos. Una sonrisa poco discreta se formó en los labios del dios, mostrando así dos colmillos de oro bajo sus labios. En el instante en el que levantó la pluma para dar por finalizada su signa, el cálamo levitó en su curso sinuoso para anudarse en torno a la muñeca de la vaquera a modo de esclava. Finalmente se desvaneció en un humo gris denso que acabaría por despejarse en unos instantes del todo, esparcido como si nunca hubiese estado ahí pero dejando la marca imborrable con el símbolo acorde al pacto.

Ahora sólo quedaba la pluma rojiza esperando a que la mano de piedra sellase la mínima parte que a él le correspondía. Su parte de promesa escrita pertenecía a un simple y rutinario contrato de confidencialidad, por lo que no sería estrictamente necesaria la marca. Si rompía la promesa y lo largaba… El dios lo sabría.

La serpiente que hasta entonces reposaba sobre el regazo del guardián, alzó la vista, ojos sangre a dúo con su fiel humano y clavó su mirada fija en el demonio, humedeciéndose los ojos con la lengua.

El demonio apretó la mandíbula. Casi se podía escuchar la fricción de sus dientes y cómo las gotas de sudor de entre sus cuernos llegaban a su fin. -Mi tiempo vale más que algunas vidas, Rojo- dijo el dios con sencillez.
Finalmente, la pluma terminó la firma del demonio, reposada en la piel roja y se desvaneció sin más sentido. -Caballeros… - dijo tendiendo la mano a ambos, primero a ella, mientras el pergamino se enrollaba sobre sí mismo y con un brillo dorado se desvanecía en arena llevando un camino por el viento que se perdió entre el hueco de dos huesos. Parecía que cada partícula del papel sabía dónde debía ir. -Ha sido un placer hacer negocios con ustedes-

_________________
Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Firma-Legba-A
Volver arriba Ir abajo
Contenido patrocinado





Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Empty
MensajeTema: Re: Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba)   Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba) Icon_minitime

Volver arriba Ir abajo
 
Un pacto entre caballeros [15 de septiembre](Hellboy, Papa Legba)
Volver arriba 
Página 1 de 1.
 Temas similares
-
» The touch of appetite...(Papa Legba)[4 de Septiembre]
» Un dios entre dioses (Papa Legba) 11 de Junio de 2018.
» La resistencia (Papá Legba, Loki, Edward Johns) [19-04-2020]
» Ficha de Papa Legba
» Hecho a Medida (Papa Legba)

Permisos de este foro:No puedes responder a temas en este foro.
Omega Universe - Foro de Rol de Marvel y DC :: OMEGA UNIVERSE :: África-
Cambiar a: