108KarenStarr
DC Universe
Insignia de Fidelidad : 
Mensajes : 245
Fecha de inscripción : 13/09/2016
Localización : Metropolis
Empleo /Ocio : No tienes una empresa que necesite CEO, ¿Verdad?
Humor : Poderoso
 |  Tema: Prueba de Rol de Power Girl  15th Septiembre 2016, 02:43 | |
| - ¡Ya callate! - Boom, con todas las letras. En este mundo tienes cosas buenas, cosas malas, y luego vienen los Parademons tratando de morderte la cara y dando chillidos. El golpe resonó como si hubiesen detonado una bomba, y la cosa salió disparada contra un edificio. En el fondo, no sé si debería preocuparme por las personas que hay en él o no, ¿Estarán vivas a estas alturas? ¿Quedará algo del mundo más o menos en un estado normal? No, Karen, deja de pensar. Salgo volando a toda la velocidad que puedo hacia el centro de New York, paso por casas que se caen a pedazos, por peleas callejeras entre parademons y Novjy Soviets, quien lo hubiera dicho, necesitabamos el fin del mundo para que los chicos malos empezaran a darse porrazos entre ellos. Acelero, las imagenes se vuelven algo mas borrosas, recortadas contra el cielo del color de la sangre, esto es un desastre, tanto que ya ni me duele ver el edificio de Starrware Industries ser golpeado por un meteorito. Si, un meteorito, de lleno, así de hasta el cuello estamos. Mis pendientes comienzan a hacer un sonido de estática, suspiro, alguien está vivo en medio de todo este desastre, llevo horas separada de mi equipo.
- SHHHFghhhhh...- - ¿Courtney? - - KaFffghhh...estamos en...fghhh...es...fghh...Central fghhh...- - ¡Resistan! ¡Estaré alli en un instante! - No, llevo la misma cantidad de horas sin escuchar una sola voz en estos pendientes, no voy a dejar que Stargirl muera, ya vi morir a Magog hace un rato. Era un tarado, pero no se merecía morir sepultado debajo de zombies. Eran millones, no tenía chances de rescatarlo, aparecieron de la nada, como todo hace casi veinticuatro horas. Llego a Central Park y alli veo como de uno de estos enormes portales surge una criatura enorme, mas alla de lo que hayamos visto antes, algo que podría darle al Rey de las Lágrimas un dolor de ojos. Y en medio de todo aquello, unos rayitos de luz tratando de hacerlo retroceder, aunque sin mucho éxito. Volé en picado, no me importaba nada, y tomé velocidad todo lo que pude hasta estrellar mi puño cerrado sobre la cabeza de esa cosa, obligandola a bajar la mirada al suelo y a removerse en los bordes de su portal. Eso la va a dejar fuera de combate unos momentos, de mientras, veo a la rubia volar hacia mi con su vara cósmica, y por primera vez desde que comenzó toda esta locura, respiro aliviada.
- ¡Kara...! - llegó volando hasta mi y se lanzo a mis brazos, y yo la tomé en ellos, estabamos abrazándonos en pleno combate, así de mal estaban las cosas. - ¿Estás bien, Court? - Su expresión bajó un degradé de tonos en ese mismo instante. - Sí, pero los demás no, llevan horas sin comunicarse...- - ¿Alguien sabe por qué está sucediendo esto? - Ella negó con la cabeza. - Lo último que oí fue en los canales de la Liga de la Justicia, Batman creía que tenía algo que ver con las dimensiones chocando, o algo así, pero...- Le di un beso en la frente para que ya no dijese nada más, no tiene sentido, solamente dejé que las lágrimas me humedecieran los ojos y limpié las de ella. - Kara... ¿Este es el final? - Me quedé en silencio, sus palabras me golpearon como un camión de kryptonita, y me quedé mirándola con ojos como platos. Lo había procesado emocionalmente, pero no me había detenido a pensar en ello, en cómo estos podían ser mis últimos momentos de vida, lejos de mis amigos, de mi vida, de mi empresa, de todo lo que había llamado mi vida. La miré y sequé algunas mas de sus lágrimas, sonriendole de lado. - No puedes ganarlas todas...¿A que no? - Ella asintió, sonriendome, y la dejé subirse a su vara cósmica para salir volando de alli, lejos de ese bicho raro de otra galaxia que no pensaba moler a golpes, no si no va a hacer ninguna diferencia. - ¿Dimensiones chocando, dijiste? - Ella asintió con energía, y si alguien tiene media idea de dimensiones chocando y cambiando, esa soy definitivamente yo. - No sé si esto sea como lo que me ocurrió a mí, pero si tiene medio de parecido, es mucho más grande que nosotros, tenemos que pensar en salir del planeta...- - ¡¿Qué?! Pero...Kara...- Detuve mi vuelo repentinamente, y esperé a que ella se acercase. puse mis manos en sus hombros con suavidad pero le clavé la mirada como si fuesen puñales, hace rato que pasamos el momento apropiado para estar siendo diplomáticas.
- Court, son mis muchachos, y sé lo que estas pensando, y me duele, me duele en lo más profundo del corazón, pero si no se han comunicado, tenemos que asumir lo peor y actuar en consecuencia...- No estaba recibiendo mucho apoyo en esto, pero es que la entiendo, preferiría morir buscándolos, y ahi está el problema de ser un lider: Mientras quede alguien vivo o la misión siga sin cumplir, tienes que mantenerte con vida, y eso, muchas veces, significa huir. - Buscaremos unos minutos más y luego volaremos a alguna base aérea para conseguir algo que...¡Cuidado! - La aparté de un tirón justo a tiempo para que pudiera salvarse de que Atom Smasher la aplastara al irse de lleno contra un edificio. ¿Algo ha podido arrojar a Albert de esa manera? Joder, tiene que ser alguien muy...-...Tiene que ser una broma...- Llegó volando lentamente, los puños cerrados, el pecho subiendo y bajando de la adrenalina de estarle dando una paliza a un verdadero gigante, y como siempre, esa cara de perra que siempre llevaba. Giro en el aire para vernos, y cuando nuestras miradas se cruzaron, su sonrisa se fue hasta sus orejas.
- Hola Karen...- - Divine...- Cerré los puños con fuerza. Max Lord había sido un bastardo por todo lo que había hecho, pero cuando fabricó a un clon mío y lo mandó a matarme, se saltó la valla por completo. A partir de ese momento, tengo que soportar a esta loca apareciéndose en cada momento malo de mi vida como si pudiese sentir que voy a odiarla más aun por ello. - ¿Me extrañaste? - - Que raro, pensé que Max te había deshecho antes de que le arruináramos sus planes...- Frunció el ceño, y me conozco muy bien cuando hago ese gesto. - Court, llevate a Al, los portales son la clave, busca alguno con cielo azul y entren por allí, quizás caigan en una dimensión estable...- Abrió la boca un instante. - Sin peros, me reuniré con ustedes apenas plante a esta loca en el suelo como un superárbol...- Asintió, aunque en el instante que pude mirarla, se le notaba la mirada llena de dudas. Lamento mucho no poder ayudarte con esas, Court, yo tampoco sé que pensar, y me cociné lo que acabo de decirte en minutos a partir de retazos de lo que me sucedió a mi cuando recuperé la memoria. - Confio en tí, mucha suerte, estrellas...- Desaparecí de su vista, acelerada a una velocidad enorme, de súbito, chocando de lleno con Divine, que había copiado mi movimiento a la perfección. El choque fue intenso, la onda rompió todos los cristales en por lo menos una manzana, y pude aprovechar el momento para tomar del cabello a mi clon y darle un rodillazo directo a la cara, estampándola contra una viga que sobresalía de un edificio. - Para que aprendas tu lugar de una vez, ¡Zorraaaah! - No tengo idea de cuando encontró la apertura, pero me tomó por la cintura y salió volando en linea recta, nada más, haciendome chocar contra cada edificio que pudo antes de que le mordiera la oreja para distraerla y pudiese dar vuelta la maniobra, haciendola chocar a ella a una velocidad aun mayor, todo hasta detenerme y comenzar a descargar puño tras puño sobre su cara de "Karen de segunda", ella bloqueó uno de mis golpes y trató de darme un cabezazo, pero la intercepté y ambas chocamos frentes al mismo tiempo, dejando salir otra bonita onda de choque antes de caer ambas al suelo desde esa altura.
- Ugh...- Me llevé una mano a la frente, esta va a ser una superjaqueca para los libros de records. Ella no estaba mucho mejor, pero se puso de pie apenas pudo y caminó hacia mí con determinación. Tengo que decirlo: Es igual de cabezotas que yo.
- ¿Te gustaron...ugh...esos movimientos? - - Peleas como si tuvieras un collar de kryptonita...- Je, esa fue buena. - No me falta nada ahora que puedo pelear como tú...- -...Solo conseguirte una camiseta y dejar de imitar mi peinado...- - ¿Crees que tus amigos van a salvarse? - - Ahora estoy más preocupada de que tú no lo hagas...¿Vamos a seguir o ya te cansaste? - Eso si que tocó una fibra sensible. Gritó, grité, y corrimos a toda velocidad para golpearnos las caras al mismo tiempo, trastabillando hacia atrás y lanzándonos de nuevo para trabar manos. - ¿No se te ha ocurrido que de verdad necesitas cubrirte esas? Créeme, nadie va a tomarte en serio...- - Callate...- Sopló hielo a mi cara justo cuando yo le apliqué su dosis recomendada de visión de calor. Otra vez hacernos hacia atrás, otra vez lanzarnos, y así durante dos minutos, hasta que ella remontó vuelo y yo la seguí a toda velocidad. ¿Huye? Eso no es muy como ella que digamos. Zigzagueamos por edificios hasta que alcanzamos Times Square. - Rao...- Parecía salido de una peli de ciencia ficción: un portal enorme estaba tragándose los edificios desde sus cimientos, y a nuestra altitud, decenas de pequeños portales se abrían y cerraban, mostrándonos ciudades doradas, pueblos agrarios, infinidad de realidades que tuve que dejar de contemplar para esquivar un rayo de calor y lanzarme de nuevo a intercambiar puños y patadas con mi clon de pelo azabache. - Deja...de...pelear...- -No...- - No...puedes...¡Unf!...vencerme...- - Ahi...¡Ngh!...está la diferencia...- Se detuvo por completo, justo para que mi rodilla aterrizara con fuerza en su estómago. Contrajo su expresión, me abrazó con fuerza por la cintura, pegándose a mí. Me quedé helada. - ¿Que estás...? - Aceleró con toda su fuerza, línea recta, sin importarle ni una mierda de lo que ocurriera.
- ¡Suéltame! - Se reía, y yo seguía vapuleando su espalda a golpes, pero nada, cero, sigue acelerando, me aferra con todas sus fuerzas. - ¡Esta es la diferencia! ¡Yo estoy dispuesta a darlo todo! ¡Haría cualquier cosa Karen, cualquiera por vencerte! - Oh no, Rao, no...ya sé lo que piensa hacer...- No sabemos si hay oxigeno del otro lado, Divine, suéltame, estás loca...¡Suelt...! - De repente, el calor de New York se extinguió, y todo a nuestro alrededor se volvieron luces de colores, viajando a velocidades imposibles, mientras una fuerza espantosa me hacía vibrar a mí y a ella hasta separarnos. Extendió su mano hacia mí, tratando de aferrarse, gritándome cosas que yo no escuchaba. No había ya sonido.
Ni calor...
Ni oxigeno...
Solo mi cuerpo disparado a toda velocidad en un limbo...
Tengo frio...
Tengo...frio... | |
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