Mi primera noche en Gotham (11 de mayo de 2018) (Dick Grayson)

Muchas cosas cambiaron desde que se produjo la denominada "Fusión de Universos". Llegaron nuevos "héroes" al juego; la "justicia organizada" como yo la llamaba, se hizo mas latente en el mundo. La Liga de la Justicia, los Jóvenes Titanes, la JLA Oscura, los lacayos de Batman, los Linternas verdes, etc;  todos grandes equipos de héroes que llevaba tiempo investigando, entre cuyos miembros se encontraban seres de impresionantes habilidades, alienigenas, dioses, entes mágicos, fantasmas y todo tipo de criatura imaginable. El problema es que la unión de realidad también trajo como consecuencia un gran aumento del crimen. Al parecer el otro universo no solo tenia muchos héroes, sino también muchos villanos, supervillanos y por consiguiente, ligas de supervillanos como la Liga de la Sombras y la de la Injusticia. Muchos nombres, muchos potenciales enemigos, muchos blancos, muchas debilidades a tener en cuenta. Era prácticamente iniciar de cero, como cuando me libere de mis esclavistas pero peor puesto que tenia que aprenderme las caras y características de todo un nuevo universo de héroes y villanos. Ambos bandos, justicia y crimen, habían cambiado para siempre. Como si con los Vengadores y toda su amplia galería de enemigos no fuese mas que suficiente.

Por ejemplo, la capital del crimen se traslado de New York a Gotham. Esta ultima, según los rumores que había escuchado de gente del otro mundo que había estado allí, era lo mas cercano a un Infierno en la tierra. El nivel de crimen organizado y desorganizado que había en ese lugar superaba por mucho el de New York. La ciudad de las luces había sido opacada en mi lista de prioridades por la "ciudad de la oscuridad". Sin embargo, esta ciudad parecía contar no solo con su propio vigilante, sino con todo un equipo o "familia" de vigilantes con Batman, el hombre murciélago, como su líder. Eso ultimo le daba sentido al hecho de que gran cantidad de ellos tuviesen temática de murciélago y vistiesen atuendos oscuros. Todas personas normales que no utilizaban mas que su habilidad en el combate, la cual según escuche es increíble; y muchos artefactos de alta tecnología. Eran un grupo con mucho potencial, tristemente su líder se guiaba por un triste y anticuado sentido de moralidad; valores que no eran respetados por aquellos que capturaba pero que aun así el insistía en respetar. No importaba quien fuese capturado por Batman, bien podía ser un ladrón, un violador de mujeres y niños, un mafioso o el Joker (Top 5 de mi lista negra). El concepto de justicia del murciélago era lago deplorable, al menos a mi gusto; el meter a los criminales a la cárcel no compensaba a la victimas inocentes, ni siquiera impedía que volviesen a cometer crímenes pues con la corrupción de la policía y todos los tecnicismos legales estos volverían a las calles en poco tiempo. Desde luego, el matar no traía satisfacción ni compensación a las victimas, pero al menos impedía que los criminales volviesen a dañar inocentes ¿Que como me creía mejor que los que mataba? Simple: ellos mataban por beneficio propio, por dinero, objetos materiales o satisface algún extraño y oscuro deseo; yo lo hacia para que ellos dejaran de lastimar gente. Igual no importaba si nadie compartía mi visión; no buscaba agradarle a nadie.

Tanto por el crimen que azotaba la ciudad, como por la incapacidad del murciélago para evitar que cualquiera que no le tuviese el suficiente miedo como para no salir por las noches cometiese un crimen, me dirigí hacia esa ciudad. Mi objetivo inicial era simplemente el buscar un lugar ideal para establecer una casa segura, la ubicación de los departamentos de policía y bomberos así como farmacias, tiendas de armas, el sanatorio de Arkham (al cual otro día le haría una visita) y demás puntos de utilidad. Desgraciadamente el crimen nunca duerme, por lo cual mientras me encontraba vigilante la ciudad desde el tejado de un edificio cuando algo capto mi atención: un robo a un banco; clásico. Aun seguía sin entender por que la gente se empeñaba en realizar robos a gran escala de noche, cuando el condenado murciélago salia a patrullar. No estaba preparado como siempre; no era una operación planificada pero llevaba mis armas de siempre: dos pistolas Beretta 92FS Inox, dos pistolas Beretta 93R convertidas al modo automático en sus respectivas fundas del chaleco, una Micro Uzi con balas oculta en su bolsillo interno de mi traje y la pistola de gancho en el otro; mi cuchillo militar en la pierna derecha, la Destructora en la izquierda y mi cinturón; nunca salia de casa sin mi clásica parafernalia y esperaba no necesitar mas. Usualmente no iba tan armado para una simple misión de reconocimiento, pero acorde a lo que me habían contado de la ciudad, por no mencionar en lecho de que el murciélago o sus mascotas podían presentarse de repente para intentar arrestarme; basándome en el hecho de que eran miembros de la JLA y por lo tanto sabían de mi enfrentamiento con Wonder Woman.

Si Gotham era el infierno, Blüdhaven estaba en la séptima capa. Ahí es hacía a dónde me dirigía, a mi antigua ciudad, a uno de mis antiguos hogares (si eso se consideraba hogar, claro), a mi antigua vida de mierda. Con mi casa de mierda y mi trabajo de mierda. Blüdhaven había quedado echa un asco, era el legado de Blockbuster, pero había que tratar de levantarla, ¿no? algo había que hacer, y los criminales no se arrestaban solos en una ciudad dónde la policía está más corrupta que los delincuentes de la calle. Tendría mucha suerte si al menos el siguiente comisario de la policía no era otro Dudley Soames.

Aterricé en una de las callejuelas de Gotham dónde se encontraba la típica cabina azul telefónica. Parecía una cabina normal y corriente, pero si activabas un código y reconocía tu voz te llevaba directo a otra cabina igualita en cualquier parte de Estados Unidos. La liga de la Justicia y sus redes de comunicación, pero ey, estaba bastante bien, sobretodo ahora que se habían dignado a ponerme una en Blüdhaven, así me ahorraría llegar tarde al trabajo.

Pero antes de que pudiera pronunciar palabra escuché una alarma no muy lejos de dónde me encontraba. Maldita sea, ¿es que no pensaban dejarme dormir hoy? Empezaba a estar un poco harto de ser el chico de los recaditos de Gotham ahora que papá murciélago estaba bastante ocupado con la liga de la Justicia y la colisión de los mundos. 

Mi vida ahora solo era trabajar y más trabajar. Por las mañanas de policía en Blüdhaven, por las noches como líder de los Young Titans, y los fines de semana ayudando a esos críos nuevos, los Defenders. Quiero vacaciones.

No perdí más tiempo y volví a lanzar la Wingarra al tejado más cercano para llegar a tiempo a lo que sea que estaba pasando. Desde uno de los tejados cerca del banco de Gotham, veía todo el panorama. Un atraco, para variar.

Salté al edificio y me colé por una de las ventanas, escondiéndome automáticamente detrás de unas mesas que me cubrían de los atracadores. Había siete tíos con unas Walther P99, ningún problema. Mis manos buscaron la cornisa de una de las mesas y mis pies cazaron el cuello de uno de los tiradores, que acabó con la cabeza contra el suelo y varias horas de inconsciencia.

El resto se giraron a mirarme, asustados y con pistolas en mano, a punto de dispararme. Había atraido su atención peligrosamente, ya me había convertido en una amenaza para ellos. Perfecto, los rehenes estarían a salvo.

- ¿Quién es el graciosillo que no me deja plegar por hoy? - comenté con una sonrisa divertida, mientras me abalanzaba sobre mi siguiente víctima.

Empieza la fiesta.

Baje del edificio rápidamente por las escaleras de emergencia y rodee la cuadra. Por cuestiones de discreción no iba a entrar por la puerta; estaba seguro de que hacerlo me lloverían las balas y, si bien podía no ser alguien fácil de matar, no era inmortal precisamente. A decir verdad, lo que estaba a punto de hacer ni siquiera debía ser llamado una operación, pues no había nada planificado, ninguna estrategia a seguir; era pura improvisación, esperar que los ladrones no fuesen muy habilidosos ni estuviesen muy armados, entrar a los tiros, matarlos a todos y salir por donde entre antes de que sonara la alarma y llegase la policía. Nadie sabría que yo estuve ahí, pero era una buena forma de enviar un mensaje. El simple hecho de que aparecieran criminales muertos en Gothan en medio de un robo era sospechoso. Si bien alguien podía culpar a la "Batfamily", como algunos llamaban al grupo conformado por Batman y sus chicos, seria cuestión de tiempo para que alguien descubriese que el murciélago no estaba detrás de nada, dejando el hueco abierto para que la gente se pregunte ¿Quien fue? y a mi el espacio para responder "Yo".

Utilice mi pistola de gancho para treparme por una de las ventanas del banco. Desde allí pude ver a un grupo: 7 hombres armados con pistolas Walther P99; no tenían nada excepcionalmente peligroso en cuanto a poder de fuego y si esperaba tal vez podría acribillarles a todos solo con mi Uzi. Me solté con cuidado y caí suavemente al suelo sin hacer ruido, detrás de un escritorio. Desafortunadamente algo paso, o mejor dicho alguien se entrometió. Tal y como había temido en un principio, uno de los aspirantes a caballero oscuro se presento en el edificio. No era otro que el alumno estrella; Nightwing según tenia entendido. Por otra parte, su intromisión resulto ser no solo molesta sino también conveniente. Ciertamente su presencia significaba que venia a encargarse de los criminales y por ende yo no tenia nada que hacer ahí; pude haberme retirado si se me hubiese dado la gana y posiblemente él hubiese estado muy ocupado con los ladrones como para llevarme el apunte. De todos modos no lo hice.

Siendo quien soy yo, no estaba dispuesto a dejar escapar a los criminales y dejárselos al "hombre del pájaro azul en el pecho" hubiese sido lo mismo que dejarlos escapar Él los golpearía un poco, irían de pasada a la cárcel con algunos moretones y en poco tiempo volverían a las calles a seguir haciendo lo que quieren. No iba a permitir eso. Segundos después del inicio del combate emergí de mi escondite con una de las pistolas en mano. Ellos eran siete, Nightwing había acabado con dos y planeaba darle un tercero para entretenerlo, dejándome con los otros cuatro cuya atención no estaba enfocada en mi. Si bien no era una noche de lo mas productiva era mejor que nada. Al estar a sus espaldas y con sus ojos centrados en aquel blanco móvil a quien intentaban atinarle, nadie se percato de mi presencia hasta que fue muy tarde. Desenfunde una de mis Berettas92FS, pues no me eran necesarias las dos para matar a cuatro personas. Sostuve el arma con ambas manos y sin mucho retraso dispare. La primer bala impacto en la nuca de uno de los tiradores. Recién con el segundo hombre caído los otros dos se dieron vuelta para ver que les había pasado a sus compañeros, solo para que uno de ellos tuviese una bala atravesada en medio de su cara. El otro decidí dejárselo también a Nightwing; ya estaba muy cerca y no quería arriesgarme a herirlo de forma innecesaria.

Con dos en el suelo y cinco de pie tenía bastante para mí solo. El tercero en discordia quiso darme un puñetazo después de que se le acabara la munición. Mala decisión, no hay que usar el combate cuerpo a cuerpo contra un acróbata circense, todo el mundo lo sabe. Menos él, claro.

Esquivé como si nada su puñetazo, se lo agarré con las dos manos y le doblé el brazo hasta que se escuchó un intenso "creck". El hombre cayó al suelo dolorido, agarrándose con fuerza el codo desencajado con el otro brazo. Los cuatro que quedaban empezaron a gastar todos sus cartuchos en mí, pero algo desvió su atención en medio del espectáculo. Escuché tres disparos más que no habían salido de sus pistolas y tampoco iban dirigidos a mí. Cuando me di la vuelta para buscar de dónde provenía el sonido, vi a un hombre de aspecto corpulento con una Beretta92FS que usaba una de las mesas del local como cobertura.

La primera bala impactó en la nuca del que estaba a punto de volver a dispararme. El siguiente hombre acabó casi igual que el anterior, pero cuando el penúltimo ladrón quedó en pie dispuesto a disparar al que acababa de matar a sus compañeros de botín, recibió la bala de lleno en medio de la cara. Lancé una exclamación de sorpresa, alarmado de que aquel hombre hubiera matado de aquella manera tan fría a los atracadores y a la vez fascinado de su precisión y puntería.

Esto ya había dejado de ser un atraco normal para convertirse en una masacre.

Enfurecido, hice una voltereta en el suelo y con el impulso de mis brazos lancé una patada voladora al último ladrón que quedaba en pie, que cayó inconsciente al suelo por el duro golpe. 

En cuanto mis pies tocaron de nuevo el suelo, me propulsé hacia dónde se encontraba el hombre de la Beretta para quitarle el arma de las manos. No era mi enemigo, podía haberme disparado si lo hubiera querido... pero acababa de matar a sangre fría a tres hombres delante de mis narices. ¿En qué se diferenciaba de ellos?

Cuando estuviera cerca de la cobertura pegaría un acrobático salto para esquivar las balas por si el hombre decidiera atacarme en el último momento. Si conseguía llegar hasta él, pensaba quitarle el arma con una patada en la muñeca.

Fue muy ingenuo de mi parte el esperar que la mascota numero uno de Batman me dejaría escapar del banco después de haber asesinado a tres personas, por mas que se lo merecieran. Asimismo sobrestime la capacidad de los ladrones de vencer a Nightwing; eran unos novatos. Al menos el chico del antifaz me pudo servir de distracción para apuntar a los ladrones sin mucha necesidad de movimiento; como practicar tiro al blanco con botellas. Su estilo de combate es muy diferente al mio; el no busca matar a los criminales ni inducirles un coma duradero, solo inmovilizarlos hasta que llegue su amigo Gordon y los lleve a prisión. Dentro de todo resultaba interesante ver a un chico de su edad derrotando con tanta facilidad a esos hombres, por mas que fueran simples novatos. Si algo tenia que reconocerle al murciélago es que sabia como entrenar a sus mascotas eficientemente; los movimientos de chico eran naturales, estaba preparado para enfrentar ese tipo de personas, no saben luchar solo tiran golpes esperando acertarle a algo. Eso es lo que pasa en una ciudad inundada de crimen como Gothan: en una sociedad donde todo el mundo se aprovecha los inocentes y las fallas del sistema legal para sacar provecho y cumplir sus fines egoístas, las personas normales se cansan de ser victimas, sucumben ante la tentación del crimen y quieren su trozo del pastel. Es el tipo de lugares que lleva a un grupo de aficionados como los que tenia enfrente a asaltar un banco de noche y sin las armas ni el equipo apropiado; no quería ni pensar en como harían para para abrir la bóveda. Dentro de todo resultaba interesante ver a un chico de su edad derrotando con tanta facilidad a esos hombres, por mas que fueran simples novatos. SI algo tenia que reconocerle al murciélago es que sabia como entrenar a sus mascotas eficientemente.

Desgraciadamente eso también involucro un adoctrinamiento del chico en el cual le fueron inculcados los erróneos valores morales de su maestro; una pena que desperdicie así su potencial. Debido a eso, supongo que el chico no pudo evitar lanzarse contra mi una vez que vio como había matado a los criminales ¿Por que? Simple, no le gustaban mis métodos, por mas que fuesen mas sencillos y mas eficientes; su amo lo había educado para pensar eso. El chico era ágil y muy rápido; tenia esa ventaja, ademas de un traje de combate que seguro era aprueba de balas y venia equipado con una linda cantidad de gadgets tecnológicos. No iba a matar a uno de los lacayos de Batman, necesitaba dejarlo fuera de combate. Primero intente dispararle a las piernas mientras corría contra mi, pero era muy rápido, muy ágil; pocas personas pueden llegar a correr tan rápido como para que yo no alcance a dispararles. Hice todo lo posible por no caer en la desesperación de sacar la Uzi y llenarlo de agujeros, o no apuntar al pecho para conseguir un mejor tiro; desgraciadamente una pequeña voz en mi cabeza continuaba diciéndome que no podía matarlo; lo ultimo que quería era convertirme en el mas buscado por la Batfamily y la Liga de la Justicia. Mas que miedo, es simple cuestión de sentido común. La Liga estaba repleta de dioses y alienigenas con superpoderes para los cuales aun estaba desarrollando planes de contingencia y si a eso le sumamos el apoyo que de seguro tendrían de parte de equipos como los Vengadores y los X-Men y prácticamente todas las fuerzas de seguridad de América (ya que el asesinar a su superheroe no te coloca precisamente en la lista de ciudadanos ejemplares de la ley) el resultado siempre seria el mismo: yo envuelto en una batalla que no podía ganar.

El chico logro llegar hasta mi sin recibir un solo tiro, lo cual me hizo enojar mucho. Me sentía incompetente al no poder acertar una sola bala y mas aun después de haber acertado tres tiros en la cabeza a unos ladrones. Era frustrante. El joven pego un salto acrobático cual circense de primera y logro arrebatarme la pistola de la mano con una patada en la muñeca. El ligero dolor fue ignorado rápidamente mientras con la mano contraria desenfunde mi otra Beretta. Sin perder tiempo, di un salto hacia atrás y dispare al muslo de Nightwing. Necesitaba probar la resistencia de ese traje.

FDI: Perdón perdón perdón por el retrasooo!!! >o<

Corrí hacia mi objetivo y pude leer claramente sus intenciones. Había tenido una buena oportunidad para dispararme mientras estaba luchando contra los atracadores, pero en cambio solo mató a tres de ellos a pesar de que me tenía a tiro. Podría haberme acertado si hubiera querido, pero aquel hombre no quiso dispararme en ningún punto vital, todos sus tiros habían sido superficiales y fáciles de esquivar. Su intención no eran matarme y eso eran buenas noticias para mí, no quería tener que enfrentarme a otro tío con las mismas habilidades armamentísticas que Deathstroke o Deadshot.

Hice que tirara la pistola con una patada en la muñeca y cuando me abalancé sobre él me di de bruces contra el suelo. Por suerte me erguí tan rápido que con una voltereta volví a colocarme de pie. Me había esquivado con una velocidad increíble y había sacado otra arma de su chaqueta.

No vi el tiro, y dio de lleno en uno de mis muslos. Vacilé un instante y me apoyé de nuevo en el suelo para deslizarme debajo de una mesa y cubrirme del fuego.

Vale, creo que había ejercido demasiada presión para él y ahora tenía una de las piernas tocada. Podía resistir el dolor, pero no debía alargar la lucha mucho más.

Me asomé ligeramente para ver la posición de mi adversario a tiempo de esquivar de nuevo una bala que iba directa hacia mi posición. El tío era muy rápido, pero aún así no había ido a matar, seguía siendo una buena noticia. Quizás algo verbal funcionara en este caso.

- ¡Eh, tío! ¿Porqué no dejas de dispararme por un rato y me explicas porqué has disparado a esos tíos?

Si aquel hombre detenía el fuego y me contaba sus intenciones podría saber cómo actuar al respecto, a demás de ganar una buena oportunidad para pillarlo desprevenido si se daba el caso.

La bala impacto de lleno en el muslo; al parecer esos trajes no son tan resistentes como esperaba. Ciertamente el material del que estaban hecho, que deduje debía ser algo similar al Kevlar, había impedido la penetración del plomo; pero aun así pude notar que el efecto fue el esperado: provocar daño. Esos trajes no eran invulnerables completamente al plomo y aunque lo fueran estaba seguro de que el simple impacto de un proyectil metálico a una gran velocidad debió bastar para probocarle al menos un dolor casi similar al de ser alcanzado por una bala de goma. Aun así preferí no estaba totalmente seguro de que nivel de resistencia tenia aquel traje por lo que decidí que no seria buena idea probar un disparo al pecho o a alguna zona vital; en el peor de los casos intentaría meterle una bala en el estomago de modo que aun si la bala atravesaba el traje solo se alojaría en el estomago, daño que si bien puede llegar a ser grave, no es necesariamente letal siempre y cuando la persona recibiese ayuda medica inmediata; solo tenia que llamar al 911 y decirles que Nightwing había sido herido, ellos llegarían en cuestión de minutos. Si el traje no era penetrado, aun el dolor de una bala impactando en el área del estomago sigue siendo algo desagradable. A decir verdad lo mio no es precisamente la "reducción no letal" del enemigo, por lo cual podía decirse que Nightwing tenia ventaja en ese aspecto puesto que el llevaba toda la vida jugando al justiciero bueno que no mata a nadie; pero a pesar de todo seguía siendo un maestro en varias artes marciales y defensa persona, por no mencionar mis reflejos sobrehumanos. En todo caso esa seria una batalla mas difícil de lo que me gustaría admitir. Yo logre vencer a Wonder Woman y ahora iba a tener problemas con una de las mascotas de Batman, que humillante. Casi podía sentir el dolor que aquello le provocaba a mi orgullo.

El chico de seguro podía ser muy rápido y ágil, pero la herida provocada en el muslo de seguro lo relentizaria un poco y sino, un par mas en el otro muslo de seguro haría el trabajo. Esperaba no tener que llegar al extremo de romperle las piernas para que se quedara quieto. Después de que la bala le diera, el joven se lanzo al suelo y se cubrió tras una mesa- ¿Una mesa? ¿En serio? ¿Crees que eso te protegerá de las balas?- Eso era desesperación; Nightwing no estaba preparado para mi ataque, por lo que tuvo que improvisar una protección, aunque en lo personal hubiese optado por una columna; cualquier cosa mas solida que una mesa. Lo vi asomar levemente la cabeza, por lo que levante el arma en su dirección y dispare. Moví la mano con la lentitud suficiente para que agachara la cabeza, al fin y al cabo no lo quería matar.

Después de eso el joven pareció usar las neuronas y opto por una charla en lugar de continuar la pelea; aun así no baje la guardia y continué apuntando a la mesa. Estaba desesperado y sabia que tenia las de perder por haberse alejado tanto de mi por lo cual opto por la negociación pacifica. En serio no podía creer que le molestara la muerte de aquellos criminales que intentaron asesinarlo hace menos de cinco minutos.- Ellos intentaron robar un banco y te iban a asesinar ¿Que otro motivo necesitaría?- Realmente no necesitaba nada mas, era la motivación suficiente. Sin embargo quise aprovechar el leve cese al fuego para dejar claras un par de cosas y establecer mis condiciones -Desde detrás de la mesa te puedo asesinar de un tiro limpio en la cabeza y sabes que soy capaz. No quiero pelear contigo, así que si me dejas ir por donde vine y te das la vuelta para volver con tu amo el murciélago, no habrá mas heridos y dejare que lleves a los criminales faltantes con Gordon.- Me había estudiado a los nombres de las autoridades mas importantes de Gotham y el nombre Jim Gordon fue el que mas vi aparecer. Mas haya de cualquier opinión personal que pudiese tener sobre los metodos de la policía nunca estaba de mas un hombre con el valor suficiente como para encerrar criminales sin aceptar sobornos; el historial de ese hombre era intachable, todo un policía ejemplar; un Batman sin traje de murcielago.

¿Quién era ese tío? ¿Era un justiciero? ¿Un mercenario? ¿Estaba en el banco por casualidad? No podía negar que me había ayudado contra aquellos tipos, pero tenía una moralidad que me recordaba al sentido de la justicia de Red Hood. Me sacaban de mis casillas los tíos así. En el fondo tenían buenas intenciones y luchaban contra el crimen, pero lo hacían con más sangra y violencia. Luego eran ellos acababan consumiéndose en el odio y la corrupción, la muerte traía más muerte y se creaban su propio agujero negro del que nunca podría salir. 

El tío tenía los huevos bien puestos, no tardó en amenazarme de muerte si me movía. Lo que quería era salir por patas sin responder por el crimen que acababa de cometer, y decir lo de "volver con tu amo murciélago" no arreglaba las cosas. Le iba a enseñar quien era Nightwing.

-¿Sabes que esos tíos también tenían familia y amigos cómo tu y yo? ¿Quién te crees que eres para dictar tus propias leyes y decidir quien vive y quien muere? - dije, medio agachado detrás de la mesa. Había un motivo por el que estaba detrás de aquella mesa.

- ¿Sabes cuántos años de cárcel son por matar a alguien? - la pregunta era solo para distraer. Empujé la mesa con todas mis fuerzas y la levanté de golpe, lanzándola en dirección hacia dónde se encontraba el hombre. Esperaba que aquello fuera lo suficientemente sorprendente para que el pistolero no tuviera tiempo de reaccionar. 

Mientras la mesa volaba, me deslicé por el suelo para llegar a dónde se encontraba aquel hombre y lanzarme sobre él para desarmarle de nuevo. Con mucha suerte no recibiría ningún tiro, o al menos ninguno en puntos vitales. 

No estaba dispuesto a tener a otro Jason Todd campando a sus anchas por Gotham.

FDI: Como Dick no va a permitir que te escapes y Jonthan no va ir a la cárcel xD así que lo mejor es que uses algún rehén para poder escapar. ¿Pegaría con tu personaje?

off: sory, no se me ocurrio una mejor manera de terminar la batalla.

-Yo no tengo familia ni amigos, idiota.- dije elevando un poco mi tono de voz, mostrando una clara señal de molesta. Mi rostro tenia una expresión que decía a mi contrincante "No creas que me conoces"

- Odiaba que la gente cometiera el error de creer que me conocía; no era así, nadie me conoce. El chico debía creer que estaba lidiando con el típico vigilante desquiciado o enojado con el mundo que comenzó a matar criminales por que asesinaron a algún familiar y la ley no hizo nada, o un policía fracasado y frustrado de que la ley no haga mas que poner trabas para el verdadero cumplimiento de la justicia. Pero la verdad estaba seguro de que Nightwing jamas había lidiado con nadie como yo. Todos tienen sus motivos para asesinar; incluso aquellos que parecen matar sin motivo alguno pueden excusarse con algún trauma de la niñez, venganza pasada de mano o problema psicológico. Yo, por mi parte, la desconocía. Así de simple; aunque mas de uno podría haberme considerado un loco y no habría tenido forma de rebatirlo. Toda mi vida había matado gente para cumplir con las ordenes de mis superiores, sin preocuparme por quienes eran o que clase de vida llevaban, ni siquiera que demonios habían hecho para merecer morir. Irónicamente todo era mas simple en esos tiempos, por mas que arrebatara vida a gente inocente; era recibir un objetivo, buscarlo, asesinarlo y luego volver para una felicitación y otra misión. No tenia que preocuparme por que hacia con mi tiempo libre ni por no herir civiles (a menos que me lo pidieran) y no tenia que tomarme el trabajo de investigar por mi cuenta si mi siguiente victima era un malvado o un simple civil. Tal vez si las cosas hubiesen sido diferentes, si no hubiese estado en medio de un atraco frustrado con ladrones heridos a un lado y el justiciero oscuro de turno al otro, hubiese pensado mas seriamente sobre el verdadero significado de la libertad; sobre si realmente era libre o aun era un esclavo de mis impulsos y mis hábitos pasados. Una pena que la pelea con Nightwing hubiese ocupado toda mi atención en ese momento.

El chico era inteligente; una vez mas felicite mentalmente a Batman por su buena elección de aprendices. Casi me daban ganas de buscarme uno, casi; encontrar a la persona indicada seria demasiado complicado para mi. Nightwing había demostrado ser rápido y lo suficientemente ágil como para esquivar mis balas; si a eso le sumamos una gran habilidad en el combate ya podía entender por que mas de uno lo llamaban el discípulo numero uno del murciélago. Me entretuvo con la charla, me distrajo y yo caí como un estúpido. Tarde descubrí que el chico no se había oculto detrás de una mesa de madera con la esperanza de que lo protegiera de las balas; ya decía yo que nadie de su edad, al menos de la edad que aparentaba, podía ser tan estúpido y menos aun siendo aprendiz del afamado vigilante de Gotham. Sus intenciones jamas habían sido el protegerse. Fue muy arriesgado pero debí reconocerle que fue un buen plan. Incluso funciono. Me lanzo la mesa a la cara mientras me preparaba para volver a repetirle mi advertencia. Ni siquiera llegue a articular una palabra antes de que el mueble de madera saliera volando en mi dirección

Sin soltar la pistola utilice mis ante brazos para protegerme y detener el vuelvo el objeto. Pero al hacer eso no pude evitar que el chico se deslizara por el suelo y me tacleara de un salto. Logre evitar soltar la pistola cuando caí al suelo, pero no tuve tiempo caer adecuadamente dado que concentre mis esfuerzos en lograr lo primero. Como resultado cuando mi espalda choco contra el asfalto sentí un leve dolor en mi hombre; por suerte el chaleco blindado amortiguo la mayor parte del daño. Sin perder el tiempo estire mi mano libre y la lleve directo a la cara de Nightwing; iba por el antifaz. Podía ser una táctica sucia pero tampoco es como si lo nuestro fuese un "duelo de honor" y no estaba desacostumbrado a usar ese tipo de trucos. Quizás si lograba despojarlo de su "mascara" conseguiría la distracción necesaria para escapar. Me estaba arriesgando demasiado en esa posición; el chico podía romperme la mano y el brazo juntos en mas de una forma; si el factor sorpresa de mi ataque no lo desconcertaba al menos un poco estaría en aprietos graves; necesitaba poder mover los dedos para disparar y si me privaba de eso ya me podía dar por atrapado.

Pero entonces algo robo mi atención. Era un hombre, se encontraba detrás de Nightwing. Lo reconocí como uno del os que habia tenido la fortuna de solo ser golpeado por Nightwing. Me observaba, y al justiciero. Llevaba un arma en las manos, la cual no tardo en levantar hacia la nuca de aquel que le había "pateado el trasero". No llegue ni a gritar "Cuidado". Solo reaccione para levantar la mano en la que tenia el arma y disparar. Todo ocurrió en cámara lenta; el hombre estaba a punto de jalar el gatillo cuando dos potentes explosiones lo interrumpieron. Fue el sonido de mi arma disparándose. Dos balas se alojaron en el estomago del ladrón. Retrocedió lentamente, cubriéndose la herida con una mano mientras soltaba el alma. Su piel se puso blanca como la de un fantasma y me dedico una ultima mirada de espanto antes de caer al suelo de rodillas. Al principio no supe como reaccionar, pero me tomo unos pocos segundos darme cuenta de l oque había pasado; me había dado una salida.- Morirá en minutos- dije tan rápido como pude, con obvia desesperación en mi voz; no podía desaprovechar mi única oportunidad y no podía seguir luchando contra alguien a quien no podía herir.

-Tienes dos opciones,..- esta vez estaba mas calmado, por lo cual conseguí hablar mejor y con mas claridad. En esta ocasión lo mire a los ojos para que fuese consciente de la seriedad en mis palabras.- Si quieres salvar su vida, deberás dejarme ir y llevarlo al hospital. He visto heridas así, no le queda mucho.- Estaba sonriendo en mi interior por mas que por fuera mantuviese la compostura. Lo tenia justo donde lo quería. Aun así mentiría si dijera que no estaba un poco nervioso pues sin importar su adoctrinamiento, el chico podía hacer algo inesperado ¿Dejaria morir al ladrón para atrapar al asesino?

off: Dick, para hacer las cosas mas interesantes, te doy permiso de llevarme a la cárcel XD Si decidís que voy a la cárcel, el ladron muere, sino, pues ya sabes. Lo de la cárcel en serio, no tengo problema con visitarla si tu decides.

FDI: yo me acabo de dar cuenta de que Dick y Jonathan deberían concerse puesto que van a ir juntos a lo de Atlantis, xD pero bueno no pasa nada. Me ha gustado mucho tu post, ha sido muy interesante y has puesto a Dick al límite!! Genial!!
Cuando me contestas a este post cerramos el tema


Vaya por dios, este era de los tíos a los que no se les podía convencer hablando. Si no tenía ni familia ni amigos estaba claro que era una persona que no le importaba llegar a los extremos para conseguir lo que se había propuesto. Si mi charla de "puedo entenderte" no funcionaba, tenía que pensar en otra cosa para detenerle...

Para cuando la mesa estaba volando, yo ya me deslizaba por debajo de ella, cubriéndome el frente y a la vez convirtiéndome en el factor sorpresa. El tipo no se esperó tener una mesa en la cara, así que hizo lo obvio; cubrírsela con los brazos pero sin soltar la pistola. Eso me dio una oportunidad.

Conseguí llevarlo al suelo para empezar a forcejear. Mi principal movimientos sería quitarle el arma de las manos. Sin la pistola, el mercenario no tendría poder y quedaría bajo mi presión. Tenía tan solo un segundo para partirle la muñeca, y no dudo en admitir que estaba acojonado cuando apuntó la pistola cerca de mi cara, para reventarme la cabeza o partirme la máscara. Una de dos. Sin la máscara dejaría de ser Nightwing, y si me exponía a que supiera mi identidad pondría a toda la Batfamilia en peligro. Si Nightwing era Dick Grayson, por simple deducción sabría quien es Batman. Y no podía poner en peligro ni a Bruce, ni a Barbara... era todo o nada.

No me arriesgué, y me tiré para atrás. Quizás fue un acto de cobardía, pero no solo tenía que pensar en mi seguridad, sino también en la de mis familiares y amigos. Esta vez el mercenario me había ganado.

Escuché entonces el tiro, pero me di cuenta a los pocos segundos de que no iba dirigido a mí. A mis espaldas estaba uno de los secuestradores con pistola en mano, que acababa de tambalearse en dirección al suelo. Las intenciones del ladrón eran dispararme aprovechando que estaba forcejeando con el mercenario, y éste acababa de salvarme de una herida de bala. 

El hombre aprovechó la confusión y se levantó a tiempo para alejarse de mí y señalar al tío que se estaba desangrando en el suelo.

- Tienes dos opciones...- si, estaba claro lo que iba a decir. - Si quieres salvar su vida, deberás dejarme ir y llevarlo al hospital. He visto heridas así, no le queda mucho.

Conocía tan bien cómo él este tipo de heridas, así que no mentía. Sin pensarlo dos veces me dirigí corriendo hacia el herido, dispuesto a realizarle los primeros auxilios. 

Podía haberme disparado en la cara, podía haber dejado que el secuestrador de bancos me hiriera, pero la cosa no fue así. No mataba por matar, y si lo hacía al menos no era contra justicieros. Pero eso no quería decir que aprobara esa actitud. Por muy buenas intenciones que tuviera, seguía siendo un asesino y pagaría por ello tarde o temprano.

- Esta bien, como te llames. Te dejaré marchar esta vez, pero no te escaparás de mí tan fácilmente para la próxima vez que nos veamos - sonreí divertido mientras miraba al mercenario - Ah, y gracias por ayudarme...

Cuando terminé de detener la hemorragia al herido, el mercenario ya no estaba allí.

-Llámame...Mass Murderer. Y de nada- Ni siquiera yo disfrutaba mucho de pronunciar el nombre que me había escogido; era funcional pero carecía de "encanto" por así decirlo, aunque supongo que es mejor que ser llamado simplemente "Smith".

El héroe había escogido la opción mas ajustada a su sistema de morales, tal y como supuse que lo haría; sin embargo no lo podía entender. Claro, siempre critique la visión moralista del mundo de los héroes y modus operandi para con los criminales, pero aun así. Desde luego tal vez mi opinión se viese muy influenciada por mi experiencia militar y un pasado no muy brillante. Pero este era un caso aparte. Nightwing eligió salvarle la vida a un hombre que había intentado matarlo antes de aprenderme a mi. Eso me desconcertó; no era simple estupidez ni "falta de visión" sino algo mas. Hay un refrán que dice "Puedes determinar el carácter de una persona por como trata a las personas que no debería tratar bien". Me recordaba a los hombres de "Médicos sin Fronteras" o la ayuda humanitaria en general que tenían las pelotas para meterse en una zona de guerra, entre terroristas fanáticos y "Terroristas legales" AKA soldados de la OTAN. Siempre los considere ayuda innecesaria por que nunca me había interesado demasiado la vida del civil común. Y sin embargo, en esos momentos, al verlo tan calmado en una situación de peligro, dándome la espalda para ayudar a un criminal, arriesgando su propia vida para salvar al hombre que pudo haberlo asesinado, no pude hacer mas que sentir respeto. Respeto y curiosidad.

Pero no tenia tiempo para ponerme a charlar sobre moralidades o el "que se siente ser tu", tenia que escaparme antes de que llegara la policía. Me hubiese gustado preguntarle el por que de su actuar. La verdad es que jamas me había planteado seriamente el hacer eso. Nunca entendí lo que es ser un héroe como "ellos" y jamas tuve oportunidad ni genuino interés de hacerlo; tal vez algún día lo intentaría pero ese no era el momento.Afortunadamente Batman y sus discípulos no son los únicos que conocen el truco del escape silencioso y en poco tiempo ya estaba fuera del banco. Trepe por una ventana abierta y salí escapando del lugar.

Tenia otros lugares que visitar antes de que llegara el amanecer. Esa había sido mi primera noche en la ciudad...la verdad no había estado tan mal, pero dudaba enormemente pasarme por ahí muy seguido. Para ser honesto, con vigilantes como ese las 24 horas ¿Quien necesita de mi?


off: Se que me quedo muy corto y en particular no estoy muy feliz con el final de este rol (me refiero a mi ultimo post claro, no al tuyo). Sory.

Mass Murderer. Me hubiera esperado un nombre más guay viniendo de un tipo tan letal como él, pero... ¿qué esperaba? Era bueno disparando, no poniendo apodos.

Sin entretenerme mucho más, le arranqué la camiseta al criminal y le realicé un torniquete en la pierna antes de que brotara más sangre de la herida. Las sirenas de policía se sentían cada vez más cerca y el mercenario había tenido tiempo suficiente para largarse de la escena del crimen. Genial, si Batman se enteraba de esto me caería una buena... ¿pero no tiene porqué enterarse, verdad? No le molestaría nunca con este tipo de cosas...

Es hora de largarse. Cuando terminé de aplicar los primeros auxilios, lancé el gancho de la Wingarra al techo a la vez que se abrieron las puertas del banco con un estruendoso golpe. Para cuando la policía entró al edificio yo ya estaba saliendo por el tejado. Un par de disparos más con la Wingarra y ya estaba a dos manzanas del edificio. Bien lejos de allí.

- Menuda nochecita... - susurré para mi mismo, y después me lleve la mano a la boca para bostezar. Estaba muy cansado y ya era hora de volver a la mansión para descansar. ¿Qué objetivos tendría Mass Murderer en Gotham? ¿Volveríamos a encontrarnos? Estos días tendré que estar más atento...