Fiesta de disfraces (Libre)

En este post quien quiera entrar es obligatorio que lleve disfraz, se que algunos con la cara que tienen pueden pasar por máscara, pero eso no vale. Gracias c:

Después de la colisión de los mundos, Astrid estuvo presionándome para que organizara un gala o algo para que la gente de los dos mundos se conociera y esas mierdas. Ya podría hacerla el tal Bruce Wayne o el otro, Oliver Queen; pero no se como lo hago que siempre acabo pringando yo.

En realidad, también prefería organizarla yo, porque se me había ocurrido una buenísima idea para que en vez de tener una aburrida gala; que con la cara de aburrido que tenía era lo que seguramente organizaría el rico de Gotham, tuviéramos una amena y divertida fiesta: Disfraces. Si, puede que suene infantil, ¿pero qué hay más divertido que disfrazarse?

La fiesta sería en la mansión, mucho mejor que en la torre. Mientras yo acababa de coger los últimos accesorios de mi disfraz; el cual no era muy complicado, como un puro. Salí del cuarto y me dirigí al cuarto donde Astrid estaba poniéndose su disfraz. Llamé a la puerta y en cuanto abrió me lleve el puro a la boca y me apoye en el marco de esta.

-"¿Quiere casarse conmigo? ¿A cuánto asciende su patrimonio? Responda primero a la segunda pregunta."

Ya dije que mi disfraz no era muy complicado: Un traje negro con una corbata, un puro, unas gafas redondas, un bigote y una cejas de pega y se tiene un disfraz perfecto de Groucho Marx.

Estaba terminando de subirme las medias cuando llamaron a la puerta, todo estaba listo, bueno, todo menos el colgante, una bonita pieza de bisutería que me había costado lo mío encontrar, pero que tras mucho buscar y que Pepper me chivara los sitios perfectos donde encontrarlo, ahí estaba, muy recargado, muy victoriano, pero esa era la intención. Abrí la puerta con el collar de la mano y se lo ofrecí a Tony mientras me miraba sonriente con un puro en la mano y me preguntaba si era una joven adinerada.

- ¿Mi patrimonio? Es altísimo, tengo un coche que mi novio despieza cada dos por tres, un gato y mi familia una casa de campo en Europa. ¿Le parece suficiente para que nos casemos? Si no siempre puedo darle el palo a mi jefe, tengo entendido que tiene una casa enorme.

Le tendí el collar para que me lo colocara, mientras pensaba que no tenía muy claro que fuera a aguantar sobre aquellos tacones de aguja demasiado tiempo, y que quizás enseñaba demasiada carne, desde luego enseñaba mucha más de lo que habitualmente me gustaba hacer, pero un día es un día. Y hoy era un día especial, para animarse y conocernos y entablar buenas relaciones vecinales, y a Tony le vendría bien conocer a la competencia.

- ¿Bajamos? Por una vez estaría bien llegar antes que tus invitados, tengo entendido que Wayne es bastante estricto en ese tema, seguro que me cae bien.

Esperé a que terminara de cerrar el broche para engancharme a su brazo y bajar las escaleras sin bajarlas rodando, no era plan de que nuestros vecinos de otras ciudades me conocieran como "la chica que bajó rodando las escaleras de su casa"

(OFF: Disfraz de Astrid http://img3.etsystatic.com/000/0/5530464/il_fullxfull.324942375.jpg )

Me habia llegado una invitacion de un tal Tony Stark para una... fiesta, una fiesta importante, de disfraces. ¿Que clase de fiesta podia ser esa? No importa, supongo que podia ir. De vez en cuando, todos podemos tomar un respiro y ser una persona normal en este Nuevo mundo tan complicado.

Me encontraba en mi Jet invisible, estacionado en un helipuerto de un edificio cerca de la mansion de Tony, pensando en que ponerme. ¿Que clase de disfrazar podria llevar? Supongo que para los humanos, mi armadura de combate es un disfraz... Asi que, cualquier cosa que me pusiera seria buena. Decidi ir disfrazada de una de las  personas mas queridas en el mundo para mi, Atenea.

Comence a engalanarme, acomodando todos y cada uno de mis rasgos, tanto de mi rostro como de mi cabello y de mi persona, quedando esplendorosa. Tarde un poco en acomodarme, quizas porque, no estaba acostumbrada mucho a esto. Tras ponerme el vestido blanco, y ponerme un collar de plata con el buho de Atenea,  me fui volando directo a la mansion de Tony, y estacione mi jet invisible (que tuvo que volverse parcialmente visible para que nadie lo chocara) en un lugar cercano. Termine de acomodar mi lazo en mi cintura, y con la mejor de mis sonrisas, abri la puerta del Jet para bajar paso a paso, hasta llegar a la entrada de la mansion.

Parecia ser de las primeras en llegar, y mostre mi invitacion, junto con una botella de vino hecho en Themyscira como presente para el anfitrion. Una vez se me permitiera entrar, fui a la mesa donde se dejan los regalos y me puse a buscar la zona de los bocadillos para servirme un vaso de ponche, o agua, o cualquier bebida que hubiese disponible.

Disfraz de Diana:

¡No podía perdérmelo! Tony Stark había anunciado en todos los periódicos que esta noche daría una fiesta de disfraces para todos los héroes y villanos que habían aparecido tras la "Colisión de los Mundos" (así lo llamaban los expertos en el tema). Era la ocasión perfecta para conocer gente y documentarme para mi nuevo webcomic.

Lo único que no me hacía gracia era lo de llevar disfraz, eso no iba mucho conmigo. Antes solía disfrazarme más que ahora, sobretodo cuando era pequeña, pero bueno, había que sacrificar mi dignidad para poder alcanzar mis objetivos.

Rebusqué en el fondo del armario, lanzando la ropa por los aires y tirándola al suelo. El traje de la Sirenita de cuando tenía cinco años. Pequeño. El traje de Cleopatra de cuando iba al instituto, enorme. Traje de Romana, enorme. Traje de Pirata, la falda demasiad corta. ¿Es que no guardaba ni un puñetero disfraz que me fuera bien?  

Entonces recordé aquella vez. Unos amigos de la universidad quisieron hacer un vídeo para la clase de Audiovisuales, uno de ellos era muy fan de la saga de videojuegos de lucha llamada "Tekken", así que cómo sabían que hacía artes marciales me dejaron formar parte del vídeo si me disfrazaba de uno de los personajes. Al final todos acabamos haciendo el memo en aquella historia, pero la profesora nos puso un siete.

Quité el traje de la bolsa y abrí la cremallera de los pantalones para empezar a enfundarme en ellos.

-Vamos..entra...-dije casi desesperada al ver que a los pantalones les costaba ceder. Pero al final conseguí cerrar bien el botón y subí la cremallera casi hasta el pecho. De ahí ya no podía subir más, pero al menos no iría con la tripa al aire.

Me coloqué los guantes y las botas y cogí la bici para salir corriendo al lugar de la fiesta. Con la tontería llegué casi de las primeras. Allí estaban Tony Stark con un disfraz graciosísimo de Groucho Marx. La verdad es que jamás me hubiera imaginado verle así. Su acompañante era una rubia muy delgada disfrazada de... ni idea. El caso es que llevaba un vestido verde bastante bonito.

Después había un hombre de cabellos blancos disfrazado de preso y no muy lejos de allí una mujer despampanante con un elegante y escotado disfraz de griega. Madre mía, de momento todas las mujeres de la fiesta eran despampanantes. 

Me dio algo de corte entrar, mi disfraz no era ni el más elegante, ni el más bonito, más bien era friki. Casi me daba vergüenza entrar a saludar, pero bueno, como he dicho antes, estaba allí para perder mi dignidad.

Saludé al gigantón de la puerta y me acerqué a la hermosa diosa griega, que tanto había atraído mi atención. Después iría a interrogar al del pelo blanco.

-Vaya, somos los primeros en llegar- le dije de entrada. No es que tuviera mucha imaginación para entablar conversaciones. -Me llamo Elysia Stavridis, encantada- 

El famoso disfraz xD: