Entrevista a Coral B. Hiddleston

No sabía ni cómo había llegado a aceptar el estar ahí, rodeada de gente y con un entrevistador que le daba más mala espina que un cadáver muerto con una gran sonrisa en el rosto. De primeras: ¿Cómo se había dejado enredar?

Oh, sí, espera. Accedió aquel día en el que estaba tan aburrida que si le hubiesen dicho de ir a saludar al Joker, al Espantapájaros o a cualquiera de estos, hubiese accedido.  

La castaña asentía a lo que le explicaba Sloan, para al menos enterarse de cómo iban a funcionar las cosas y demás. Al menos así fue hasta que el presentador empezó a hablar a los oyentes.En ese momento se puso rápidamente los enormes cascos que insonorizaban casi todo para así poder escuchar todo lo que estaba pasando, aunque no pudo evitar quedarse mirando al bicho de la pecera. Joder, nunca había visto nada así, y eso que había visto muchas cosas. Que tampoco se iba a quejar de que seres distintos trabajasen en público...al contrario, precisamente le parecía genial.

Arqueó una ceja ante todo lo que dijo, pero una sonrisilla apareció en sus labios cuando hizo aquel comentario sobre Dick.

-Por dios, si estuviese loca vería a hombres de barro, payasos asesinos, espantapájaros vivos, mujeres que se creen gatitas y...bueno, vale. Puedes decir que estoy loca, pero entonces los de mi alrededor también. -y no puedo evitar el soltar una breve risa.

-¿Qué puedo deciros de mi? Pues supongo que lo que queráis saber, la verdad...-alzó un poco la vista, pensativa- Es una pregunta demasiado abierta y que podría empezar a responder de mil maneras, así que...¿podrías concretar un poco más?

La castaña no pudo evitar el arquear una ceja ante la primera petición. ¿Sus medidas? ¿Para qué narices querían saber sus medidas?

-Tengo algún modista que quiere hacerme la ropa y no lo se? Porque espero que sea eso. -y miró directamente a Sloan. No, mucha cara de modista no tenía...

- Sinceramente no las se...de hecho, creo que las única persona en el mundo que la sabe es el que me hizo el traje. -volvió a reír, ahora no estaba segura de quien fue, ya que Nightwing se lo trajo, aunque el diseño sí lo hizo ella.

- Solo recuerdo que tengo una 95 de pecho, no me preguntes qué copa, no tengo ni santa idea. -y se encogió ligeramente de hombros.

Estaba diciendo la verdad.

-En cuanto edad, tengo 20 años. 20. Ni 15, ni 16, ni unos jodidos 17 o 18. Y eso va por todos los que han sido Robins y aún lo son! -por dios, que les quedase claro de una vez, solo les pedía eso.

-Vale...a ver, empecé a estudiar criminología porque me pareció interesante, y...no se, se me da bien, supongo. Así he llegado a ser quien soy (?)-rió ligeramente- Gustos y aficiones? Las palomitas dulces, pasármelo bien, hacer algo que me entretenga...vaguear de vez en cuando. Bueno, cada día se puede descubrir un gusto nuevo, no? -y miró hacia el cielo, pensativa, pensando precisamente en...en fin. En "algo". -Defectos? mi desorden. Creo que eso me delata. Antaño también te podría haber dicho que impulsiva y algo infantil, pero acabé abriendo los ojos, y esas cosas han cambiado un poco...aunque admito que sigo siendo una temeraria. -sonrió a Sloan, una sonrisilla fina, divertida.

El recuerdo de aquel día en la mansión le hizo sonreír, y el día acabó de una forma bastante inesperado.

-Puedo decirte cómo me parecieron al principio: Bigby, el Lobo Feroz, me pareció un tío que imponía, algo seco, pero muy majo. Me cayó bastante bien, me entraban ganas de darle un abrazo. Además, era como un niño adulto que preguntaba por todo. Dianne...bueno, a parte de lo obvio, también era una chica legal, y luego estaba Xun, tan callada, tímida y distraída...cuando miré en sus ojos me pareció que tenía una mirada perdida, como si viese más allá de las personas que miraba. Lo que me impuso a ir fue conocer a Charles Xavier. Verás, cuando estoy en un lugar con mucha gente empiezo a oír todas sus puñeteras voces, y no es precisamente agradable...así que en cuanto el Capi me habló de él, decidí ir a verle para ver si podía ayudarme un poco con ese problemilla.

Cuando preguntó por la batpiruleta, instintivamente ella no pudo evitar el cambiar aquella sonrisa que había llevado por el lado humorístico y divertido a por una más pícara, casi provocativa, colocando su codo en la mesa y apoyando su mejilla en su mano.  

-Nada fuera de lo normal, es una piruleta como cualquier otra, no crees? Creo que Plana es un malpensado, a saber qué pasa por su mente...¿Quieres que se la lea? ~

-Coño, será por esa carita dulce y esa mirada que tienes, que por lo visto, para nada inocente, ¿eh, picarona?

Coral volvió a arquear una ceja, tocándose entonces la cara con la mano que tenía libre. ¿Carita dulce? Eso que se lo dijesen a Xun. Al menos en lo de la mirada acertó, haciéndola sonreír ligeramente.

-Pues será de primeras, porque cuando abro la boca, luego pocos piensan lo mismo. -"bromeó".

-¿Sabes que eso sería quitarle el trabajo a Lilith? Lleva varios sesiones y cada día le sale un trauma más al pobre. Solo le faltaba lo de la batpiruleta y tus comentarios sobre bollos rellenos y flautas. Eres la reina de los comentarios subidos de tono, e incluso cuando algo no iba con segundas, le encuentras un tercer sentido en lo que Superman se cambia de ropa.

-Oh, vamos, Celsit es una pastelera, es normal que se hable de pastelería, no crees? -preguntó encogiéndose ligeramente de hombros, mientras que la comisura de sus labios se iba ensanchando aún más por siguiente que dijo.- Es que Planaria me lo deja a huevo! Y algunas personas también, hasta tú a veces, señor Pulpo-Kun, dios del hentai. -y le lanzó una mirada cómplice. Poco podía decir de lo que decía ella cuando él era directamente el dueño de los tentáculos.

Fue entonces cuando Sloan prosiguió a empezar a hacerle más preguntas, esta vez sobre su otra vida, la que más tenía latente dentro de ella. Curiosamente cuando dijo la palabra "Robins", Coral empezó a buscar algo en el bolsillo de su tejano corto, hasta sacar una batpiruleta, desenvolviéndola mientras escuchaba el resto y empezando a lamerla.

-Bueno, siendo Gotham, lo raro sería que no me los encontrara...-y miró fijamente a Sloan cuando dijo que Batman tenía complejo de padre, empezando a reír con cierta fuerza, golpeando la mesa.

-Por supuesto! Batman los adoptó a prácticamente todos! Aunque no me acuerdo si Tim llegó a aceptar...por no hablar de Damian. El pobre puede quejarse, es el único hijo verdadero!-y fue calmándose, cogiendo aire y soltándolo para intentar no volver a reír. -Gracias a dios que tiene a Alfred, que los ayudó con todos...

-¿Cómo es pelear contra el mal? ¿Cómo te sientes?

-Bueno, lucho contra el mal según algunos, yo soy el mal según otros. Pero, sinceramente? Patear a la mayoría de creídos hace que una se sienta bastante bien. Es gratificante. ¿Te responde eso? -preguntó lo último mientras dibujaba una sonrisilla pícara.

-¿Qué tal es trabajar con Spoiler, ser la "pequeña" de Dick...?

-¿Con Spoiler? Bueno, me cae bastante bien, así que podría decir que para mi no es ningún problema si me envían a hacer más misiones con ella...y...Dick? Pobre, la verdad es que a veces le pongo de los nervios, pero es mi misión con él, ¿no? -rió ligeramente- Aunque si fuese su hija, te puedo asegurar de que sería el peor ejemplo de padre en el mundo. Ya sabes, es un mujeriego...y su nombre no ayuda. -se metió la batpiruleta en la boca, saboreándola un poco.

Y entre tú y Red Hood hay tema, ¿no?

Repentinamente Coral empezó a atragantarse, teniendo que sacarse la piruleta de la boca y tosiendo un poco.

-¿Tema? ¿De qué clase de tema estamos hablando? Porque podría decirte que sí si consideramos que nuestro tema es liarnos a insultos verbalmente...