[Minievento] El tiempo en sus manos - Prólogo (Thunderbolts) [15-03-2019]

Aquí estamos, en la base de operaciones del grandioso y poderoso equipo de los Thunderbolts, esperando a que el coronel nos de información sobre nuestra próxima misión de equipo; todo el equipo reunido en torno a la mesa rectangular de la base. Ross nos muestra una diapositiva a través de la gigantesca pantalla del lugar; en ella se muestra una imagen en la que aparecen un hombre de larga melena y otro que parecía ser Superman.

- Ese tipo... - digo para mi mismo, en un leve murmullo, observando al hombre de cabellos extensos; por cuya apariencia, y el efecto de colores de la fotografía, se puede deducir de que se trata de algún tipo de hechicero

Entonces, como si sobre mi mente cayese un rayo de iluminación, recuerdo súbitamente de que me suena ese característico rostro; se trata del mismo tipo que me contrató hace menos de una semana.

Voz de la mente de Wade Nº 2 escribió:

Es el vizconde de Oréo

Voz de la mente de Wade Nº 1 escribió:

¿Eso no eran unas galletas?

Voz de la mente de Wade Nº 2 escribió:

Lo mismo, aparte de mago, es empresario

Voz de la mente de Wade Nº 1 escribió:

Me parece a mi que te estás equivocando...Creo que era Joan-Sanson Wiscas De Oreón

Voz de la mente de Wade Nº 2 escribió:

Pues no tiene las orejas tan grandes...

En ese momento, las palabras del viejo interrumpen mis pensamientos; mientras habla, Red nos muestra un pequeño fragmento de un vídeo de seguridad de una tienda. En él, puede verse un atraco interrumpido por el aludido; quien, sin miramientos, asesina tanto a atracador como a atracada.

- Eso fue impactante, incluso para mi - comento en voz alta, al observar como se parte el cuello de la dependienta debido a los conjuros del mago

Tras esto, el general nos cuenta sobre la muerte de un tal Aquaman a manos de este y del consiguiente contrato por parte de su mujer hacia nosotros para que nos encarguemos de vengarle; preocupada porque, si lo encuentran antes los héroes, le encarcelen en lugar de acabar con su vida.
Para mi sorpresa, Elektra es la primera no solo en poner pegas sino en negarse a participar; lo que hace que Ross pida su opinión al resto.

- A pesar de que mi familia política sean de origen divino, no tengo ninguna clase de problema en encargarme de un Dios - contesto, ante la pregunta del anciano, mientras jugueteo con una de mis armas entre mis dedos; haciéndola girar levemente, como en las pelis del viejo oeste - Además, tengo cierta información que quizás podría interesarnos; viendo el panorama de la situación - continúo con una sorprendente tranquilidad en mis palabras - Hace exactamente 5 días, estuve en su casa...

Por algún motivo tenía un muy mal presentimiento de la situación, y, a mi parecer, la cosa no estaba para menos: era el turno de Ross de escoger la misión del equipo. Algunos me dirían paranoico debido a mi reacción, pero cuando has vivido en el ejército tanto tiempo como yo, aprendes a distinguir entre paranoia sin fundamentos y una muy bien fundada corazonada. Al fin y al cabo todos en ese salón conocíamos la historia de Ross. Un general de “prestigio” que se hiso famoso por dedicar gran parte de su vida a cazar al gigante esmeralda conocido como Hulk, por cualquier método que fuera necesario. No es como si me preocupase que el tipo nos mandara contra Hulk, pues ya desde el día que me “recluto” me aseguro que no iríamos tras él. Y no es que pensara que el buen Ross era incapaz de mentir o romper una promesa (sino todo lo contrario), pero me había asegurado desde el primer día de hacerle entender que renunciaría al primer segundo que nos mandase a cazar a ese monstruo ¿Entonces por qué sentía escalofríos solo de estar allí? Pues como dije antes, el pasado militar de Ross no es precisamente el más limpio que podríamos encontrar. Se de buena fuente que el tipo tuvo su buena dosis de operaciones clandestinas y se metió en líos muy grandes en su tiempo. Basta con ver lo que pasa cuando alguien lo hace enojar y muestra su otra cara. Cuando Ross te envía a una misión lo suficientemente peligrosa como para necesitar a los Thunderbolts, sabes que pasaras un mal rato.

Y al final resulto que tenía razón. Ya desde el vamos empezamos mal: mostrándonos la foto de un hombre de pelo castaño que estaba prácticamente parado sobre el cuerpo inconsciente de Superman. La misión que nos encomendaría a partir de esa imagen era tan obvia que ni siquiera tuve que esperar a que diera los detalles como para saber lo que tendríamos que hacer. Ross quería que fuésemos a atrapar a un hombre capaz de vencer al Hombre de Acero. Nos hemos visto cara a cara una vez, y tuve que fingir un paro cardiaco para evitar luchar contra él ¿Ahora quería que fuésemos por uno aúnmás poderoso? Y las noticias solo fueron de mal en peor. Al parecer el tipo era un hechicero (yo no tengo ni puta idea de magia), y Sumo Sacerdote de nada más ni nada que menos que la propia Atlantis, ciudad a la cual solo había ido una vez y no planeaba volver a visitar. Y como cereza del pastel era miembro de la Liga de la Justicia…un miembro de la Liga que hace menos de dos años había barrido el piso con Superman, otro miembro…A veces me pregunto si solo son idiotas o realmente tienen alguna clase de tendencia suicida colectiva, como para aceptar a alguien así entre sus miembros.

Entonces Ross nos mostró un video reciente de un robo en una tienda y…todo se fue a la mierda. Al principio la escena era una bastante común a decir verdad: adolecente asustadizo con revolver en la mano amenazando a una pobre señora para robarle el dinero. Al menos hasta que el Sumo Mago llego al rescate de la señora. Lo esperado hubiese sido que simplemente usara un hechizo para atraparlo o dejarlo fuera de combate, como tantas veces le había visto hacer en sus batallas pasadas por televisión e Internet. Sin embargo esta vez las cosas eran diferentes, y eso fue algo que pude discernir con el solo mirar los ojos del mago: supe que algo iba a salir mal. Y así fue. El niño fue asesinado sin más ni menos por el justiciero; hasta ahí todo bien. Luego la propia dueña de la tienda fue desnucada por el mago, quien no mostro ni un ápice de emoción al respecto. Ahora las palabras de Ross comenzaban a tener sentido, pero las cosas no acababan allí. No, al parecer, la persona que nos había encargado el asesinado del Mago no había sido otra que la esposa de Aquaman, el mismo tipo que ya me había encontrado en la Guerra de Atlantis; mismo que Arion había asesinado aparentemente. Yo estuve ahí, vi su poder en acción, y pensar que ese tal Arion lo acabo, no lo voy a negar, me preocupo. No por que tuviese miedo de mí mismo, sino porque ese tipo andaba suelto en la ciudad, con obvias tendencias asesinas, y aun no había visto a ninguno de sus compañeros héroes venir a hacer nada al respecto, ni siquiera después de que hubiese asesinado a otro de la propia Liga. Por cosas como esta no puedo evitar cuestionarme su utilidad de tanto en tanto.-Permíteme saber cómo es que la esposa de un miembro de la Liga de la Justicia entro en contacto con un grupo de asesinos y mercenarios de elite…- Quizás no fuera momento para eso, pero incluso a mí me sorprendían las conexiones de Ross de vez en cuando.

Y en realidad lo que decía el general tenía mucho sentido. La esposa del difunto quería que acabásemos con él porque sabría, igual que todos los allí presentes, que los héroes no tendrían las agallas para manejar apropiadamente la situación, y si lo que Ross decía era verdad, los poderes del tipo eran demasiado grandes como para permitirle continuar haciendo lo que se le diera la gana. Ya había demostrado que la vida de los humanos le daba igual, y tenía los medios como para llevar las cosas a otro nivel si se lo proponía; definitivamente era alguien que no se podía tomar a la ligera, o manejarse como alguna clase de supervillano menor. Sabíamos que los héroes preferirían dejarlo fuera de combate, tomarlo prisionero e intentar dialogar con él en vez de tomarlo como la amenaza que en realidad era. Lo que si me sorprendió fue la reacción de Elektra, quien se mostró bastante renuente a matar a un miembro de la Liga; bastante curioso viniendo de la asesina ninja. Deadpool por otra parte no demostró tener ninguna complicación en asesinar al Dios, aunque el hecho de que hubiese estado en su casa siquiera por más de un minuto me hiso arquear una ceja en señal de duda. Al menos eso les daría una ventaja. Solo quedábamos entonces yo, y el miembro más nuevo del equipo, Johnny Blaze AKA el Ghost Rider.

-Yo no puedo ir en esta misión.- Dije finalmente, para evidente desagrado de Ross.- Usualmente no tendría problemas en matar a un miembro de la Liga si hace eso, pero en este caso es demasiado sospechoso.- Si, bien podíamos decir, basado en la primera imagen, el tipo siempre había sido un villano, que solo había fingido todo este tiempo mientras sus realizaba sus planes en secreto, o que simplemente había vuelto a sus viejos malos hábitos. Pero eso no bastaba para mí. Yo sé por experiencia personal lo que es cargar con la sangre de inocentes que en realidad jamás hubieses querido asesinar.- He visto a este tipo luchando en Internet y en las noticias, salvando civiles, protegiendo inocentes y en general actuando del mismo modo que esperaríamos que actuase cualquier miembro de la Liga. El que haga esto ahora, tan de repente…me parece muy sospechoso. Sabes que te ayudaría en cualquier misión que nos pidieses, pero esta vez, tengo que decir que no; al menos hasta que sepamos con total seguridad que no se trata de un caso de control mental.- Y entonces me voltee hacia Johnny, el ultimo del grupo, solo para encontrarme con algo que me sorprendiómás que todo lo que había visto hasta el momento: su rostro.

Usualmente el motorista siempre se encontraba alegre y despreocupado, pero esta vez su gesto era diferente. No había dicho nada desde que Ross había mostrado la imagen de Arion venciendo a Supermany parecía que su gesto se encontraba congelado en una expresión constante de preocupación, no por sí mismo, sino más bien por el mago.- Arion…¿Qué has hecho?...- Finalmente dijo, casi como un susurro para sí mismo, pero que pudo escucharse en toda la habitación.- ¿Lo conoces?- Le pregunte, pues estaba claro para todo que nadie reaccione así ante las malas acciones de un desconocido.- Si.- dijo después de una pausa.- Él y yo nos conocemos, luchamos juntos en un par de ocasiones, junto a otros magos también. Yo personalmente analice su alma sin encontrar rastro de maldad, másallá de ciertas presencias mágicas interesantes. Y ahora…lo veo haciendo esto…- Se notaba por el modo en que su voz se quebraba que él era el que más estaba sufriendo por las acciones del mago, y más aun sabiendo la decisión que tendría que tomar.

-Yo voy.- Dijo mientras se ponía de pie con firmeza, y un fuego en sus ojos ardiendo como las llamas del Infierno.- Tengo que detener a Arion antes de que sea demasiado tarde.- - Blaze, sabes que tendremos que…- -Lo sé. Soy el Espíritu de la Venganza y él asesino a una inocente; ahora debo vengarla. El Arion que conocí nunca habría hecho eso; ya sea este un impostor, o un mago corrompido, lo voy a mandar al Infierno.- La fuerza de su voz era evidente, incluso para los estándares del Ghost Rider. – Pero deben saber una cosa. He visto a este tipo en acción, es un mago muy poderoso. Si sus poderes rebasan los míos, no lo sé, y no quiero comprobarlo. Lo que quiero decir es que, incluso para un Hulk, es alguien de cuidado.- Si quería marcar de forma eficiente el nivel de peligrosidad del mago, compararlo con el Hulk Rojo definitivamente fue una buena idea.- SI vamos a ir contra él, necesitaremos armas…armas diferentes…armas mágicas.

-Nada forjado en el Cielo, para no correr el riesgo de que Arion las utilice para matar a Johnny.- dije mientras salía de la habitación, ganándome una mirada sorprendida el motorista.- Tengo acceso a datos de SHIELD y ARGUS; ellos te llevan el apunte mucho más de lo que crees…- comente mientras salía del cuarto, listo para volver a mi habitación. Necesitaba acceder a una computadora lo más pronto posible. Un lugar así de grande debería tener cámaras de seguridad, y si podía acceder a ellas, podría seguir la pelea de cerca y brindar apoyo táctico.

Continúa aquí.