FICHA DE ZOEY WILLS
Nombre: Zoey Wills
Alias: Ninguno
Edad: Entre 18 y 21 años, si no recuerda mal
Universo de Origen: DC Comics
Organización: Ninguna
Nacionalidad: Ninguna
Raza: Mutante (pero sin gen-X)
Mentor: La vida
Bando: Neutral
Ocupación: Chatarrera, superviviente
Descripción Física: Lo primero que llama la atención de ésta desgarbada y peculiar chica son sus ojos, casi como si estuviera ciega pero todo lo contrario, ya que esos ojos mutaron para adaptarse a su extraña habilidad, al igual que sus orejas, puntiagudas y... raras. Su pelo hace mucho tiempo que perdió su pigmentación, siendo canoso, y el tono de su piel es aceitunado casi enfermizo. A parte no es gran cosa: su cuerpo es fibroso, trabajado y flaco. Tiene varias cicatrices por su cuerpo, y la más llamativa es la que tiene al lado izquierdo de su cabeza con forma de zarpazo.
[Imagen próximamente. ¡Lo prometo!]
Descripción Psicológica: Lo primero que hay que tener en cuenta es que ha sobrevivido a un infierno que se extendía día a día. Ha sufrido y ha triunfado, y todos los acontecimientos que le pasaron formaron su personalidad.
Su forma de ser es bastante... salvaje, por así decirlo. Coge una niña alegre y un oso de las montañas y tendrás a Zoey. Su percepción de la vida suele ser positiva debido a los consejos que le dejó su madre, pero a la vez es realista y directa: los seres humanos pueden ser más salvajes que las propias bestias; la muerte es parte de la vida; sufrir es un problema, pero no sin solución; uno hace lo que tiene que hacer para sobrevivir; el cuerpo humano es carne y huesos. Nada más.
Historia:Existe el multiverso y está más que probado. Miles y miles de mundos paralelos al que vivimos, cada uno con su propia historia. Y de todos los universos y todos los mundos, Zoey tuvo que nacer en, posiblemente, el peor de todos.
Hubo una guerra, por así decirlo, porque otro término para lo que sucedió podría ser "masacre" o "devastación". El mundo mundano estaba harto de aquellos que se hacían llamar héroes y de su contrapartida, los villanos. Cada vez que los villanos atacaban, los héroes frustraban sus planes, y siempre había consecuencias, pérdidas y odio. Dicho odio llegó a tal extremo por parte de los humanos normales y corrientes que en secreto, se fue gestando un contra-ataque masivo contra todos aquellos héroes y villanos que llevaban el caos a sus vidas. La 3era Guerra Mundial estalló y sólo había dos bandos: el mundo contra los héroes y los villanos.
No quedó nada para recordar. Las ciudades se convirtieron en ruinas. Los bosques en páramos. No se supo qué bando ganó, pero qué más daba, pues aquella guerra se les fue de las manos, e incluso llegaron seres más allá de las estrellas, dioses y extraños entes llamados por semejante destrucción. Magia, tecnología y poderes sin igual se cruzaron, y crearon el mundo que Zoey vio al nacer: un mundo muerto.
Zoey nació del vientre de una mujer sin vida, y de bien pequeña tuvo que salir como pudo y llorar por si misma cuando su madre dejó de respirar a mitad del parto. De no ser por el hombre que había pagado por la vida de aquella mujer, el esfuerzo de la recién nacida por venir a éste mundo habría sido en vano.
Aquel hombre tenía un bebé en sus manos, y sabía de buena mano que pagaban bien por un retoño sano. Sin embargo al examinarlo descubrió que, como todos los que nacían en aquella era, estaban afectados por las altas cantidades de radiación en todo el mundo (una radiación que se estableció permanentemente tras las aportaciones de grandes entes con poderes descomunales, dejando su huella al pasar). Por tanto, no podía venderlo ni tenía forma de alimentar al bebé, así que lo dejó con su madre muerta para que siguiera su mismo camino.
La suerte estuvo del lado de Zoey cuando una chica, con no más de quince años, escuchó los llantos del bebé y encontró tanto a la madre como a la recién nacida. Se llevó tanto al bebé como a las pertenencias de la madre que pertenecían al hombre que las abandonó, y volvió con su grupo de nómadas chatarreros.
Durante los siguientes años Zoey pudo crecer, descubriendo el mundo en el que le tocó vivir: un mundo donde los humanos eran salvajes y despiadados, las bestias que cazaban para tener carne para comer eran enormes y peligrosas y el tiempo era su mayor enemigo, así como el hambre.
La chica que la acogió, a quien llamó mamá por ser quien la estuvo cuidando durante toda su niñez, le enseñó su pequeña colección de recuerdos de los tiempos pasados. Zoey aprendió sobre los héroes y los villanos que llevaron al mundo a la ruina, aprendió a cazar y a ser positiva día a día, aunque te levantaras en un charco asqueroso o no tuvieras dónde cubrirte del tiempo. Aprendió a ser autosuficiente y a reparar artilugios mecánicos, así como montarlos. Aprendió a defenderse y, al final, aprendió que la muerte no perdona a nadie cuando su madre fue devorada por una bestia cuando la estaban cazando. La misma que le dejó la cicatriz en la cabeza a Zoey.
La chica siguió con el grupo de chatarreros, a pesar de todo lo que tuvo que soportar para seguir viva el día siguiente, incluyendo vender su propio cuerpo para pagar comida y agua. No era una vida feliz, pero al menos seguía viva, y eso es lo que hubiera querido su "madre".
Durante una cacería de chatarra donde su grupo de chatarreros se enfrentaba a otra familia por los restos de una avioneta que habían encontrado, el cielo se cubrió de nubes negras, relámpagos y extraños sonidos que captaron las orejas de Zoey. Cuando levantó la vista hacia arriba, el mundo que conocía y en el que había resistido durante todos sus años de vida, llegó a su fin, y cuando volvió a abrir los ojos estaba en medio de una ciudad, desorientada y aterrada.
¿Qué demonios había pasado? El efecto Omega le quiso dar otra oportunidad.
Poderes: ·
Manipulación material: Zoey tiene una habilidad especial originaria de los restos de radiación que impregnaron la placenta y mutaron su cuerpo, con la cual puede ver, escuchar y tocar las micro-partículas de materia que hay a su alrededor. Por ello sus ojos y sus orejas, e incluso su piel tiene el aspecto que tiene.
La función principal de dicha habilidad es agrupar la suficiente materia en una misma zona para crear un estallido impulsor en milésimas de segundo, creando lo que vulgarmente se denominaría como un "golpe de viento". A efectos prácticas es un impulsor o un golpe sin llegar a tocar ningún cuerpo. Zoey usa dicha habilidad para impulsarse y llegar más lejos, para parar golpes, objetos e incluso para golpear. Durante las peleas usa un bastón impregnado con su propia radiación para transmitir dicha habilidad hasta la punta de éste y poder crear los estallidos.
Hay otra forma de utilizar ésta manipulación material, y resulta ser la favorita de Zoey y la razón por la cual nunca se sintió sola: Zoey acumula materia y la impregna con la radiación de su cuerpo. Ésta se vuelve algo así como un pegamento radiactivo, y lo transmite hasta objetos inorgánicos que tenga cerca (especialmente chatarra), montando figuras que parecen tener vida propia, pero en realidad es Zoey que los usa como si fueran marionetas y dan ese pego.
La cantidad de chatarra que puede montar viene limitada por el tamaño del cuerpo de Zoey multiplicado por tres. Además, si llega a ese límite Zoey es incapaz de usar su habilidad para crear los estallidos. La duración del montaje si éste llega al límite del tamaño es de media hora. Después el ser de chatarra se desparrama volviendo a ser simple chatarra. Ésta media hora puede extenderse según el tamaño de la marioneta: cuanto más pequeña, más tiempo, y cuantas menos marionetas, más tiempo aguantará también.
Las marionetas pueden ser: 7 pequeñas, 4 medianas y una grande. Entre el número de medianas y pequeñas se pueden combinar siendo que una mediana equivale a 2 pequeñas y viceversa.
Habilidades:
- Manitas de la mecánica.
- Ágil y con buen equilibrio. Al pelear parece un mono.
- Sentido común y del peligro.
- Su cuerpo soporta las temperaturas extremas debido a su mutación.
Debilidades:
- Síndrome de autodestilación: El cuerpo de Zoey es incapaz de digerir el azúcar, siendo el 30% de éste llevado a su organismo y el 70% restante destilado, embriagando a la muchacha. Éste síndrome le provoca fatiga crónica, dolores musculares y de cabeza, deterioro mental y alteración de su estado anímico. Una piruleta para Zoey puede ser como un lingotazo de los fuertes.
- Afenfosfobia: Zoey padece fobia a que la toquen debido a los abusos que sufrió. Si una persona la toca sin su consentimiento, su carácter cambia de repente y se vuelve feroz y salvaje. Para que ésto no suceda ella tiene que dar su consentimiento. Tocar a otras personas no le afecta, pero no suele acercarse mucho a nadie.
- Enoclofobia: Sufre de fobia a las multitudes, pues en su universo, encontrarse con un gran número de personas suponía un desenlace funesto para uno de los dos grupos, y muchas veces para ambos.
- Analfabeta: Zoey no sabe ni escribir ni leer, y su conocimiento de la lengua hablada tampoco es muy bueno que digamos.
Equipo y recursos:
- Un bastón hecho de metal.
- Una bolsa de viaje donde guarda la comida y las cosas que se encuentra.