La difícil vida escolar... (Gwen Stacy)

Marzo 12, 2014
Midtown Highschool
Pre-Spider Bite

Un bonito día en la escuela preparatoria Midtown; a pesar de que los rayos del sol se encontraban en su hora pico, las pocas brisas hacían que el ambiente fuera uno agradable y no caluroso, como era normal en días como aquellos. Eran aproximadamente las doce del medio día y todos los estudiantes se encontraban ya sea en el patio de la escuela o en sus alrededores, disfrutando del tiempo que la escuela otorgaba para que los jóvenes almorzaran, jugaran, estudiaran o socializaran entre ellos hasta el momento en que sonara la campana y tengan que volver nuevamente al salón de clases. Todos, a excepción de algunos, parecían tener un grupo con el cual pasarse y hablar durante el poco rato que tenían de receso.


Todos exceptuando a uno, Peter Benjamin Parker, que no tenia a nadie con quien pasarse y cuando trataba de hacerlo -con el grupo de Flash Thompson, un compañero que usualmente le molestaba- era cruelmente rechazado y echado a un lado. Como sea: su timidez, su gusto por los estudios y su poca capacidad para encajar con sus compañeros no le ayudaban para nada. Ni siquiera su forma de vestir le ayudaba mucho, puesto que en ese momento estaba vestido con unos pantalones negros, una camisa blanca manga larga y una pequeña corbata, un estilo de ropa que parecía que se lo había escogido su anciana tía.  

Es por eso que caminaba cabizbajo por el patio, con semblante algo triste, inmerso en lo suyo, prefiriendo pasar su tiempo en la biblioteca -de donde acababa de salir- para completar unas fórmulas que posteriormente se dirigiría a corroborar en el laboratorio de la escuela. Esperaba llegar a tiempo antes de que se acabara el tiempo y tuviese que entrar al salón.

El joven estudiante estaba tan pendiente a lo suyo, observando las fórmulas y sosteniendo dos libros de química, que no se dio cuenta de que caminaba muy cerca de la cancha al aire libre de la escuela, en donde se encontraba Flash Thompson y su grupo de amigos. Contando a Flash, habían cinco chicos altos y atléticos, los cuales estaban hablando sobre formar un equipo de tres contra tres para jugar baloncesto.
—Flash, falta uno para hacer el tres contra tres.
—¿Quienes hay que quieran jugar? James siempre estaba dispuesto, pero últimamente se la pasa con su novia.
Tras eso el chico, uno de los lideres del grupo de tres, se dispuso a observar a sus alrededores en búsqueda de algún candidato para invitar a jugar y completar el equipo de baloncesto. Vio a un obeso, a uno con yeso, a otros comiendo y luego vio caminar a Peter.
—¿Que tal Peter? No es el mejor candidato disponible, pero Hey, podemos jugar sin estar disparejos.—dijo mientras le señalaba.
—¿Parker? Debes estar bromeando, ese ratón de biblioteca lo único que conoce son libros. Tendríamos suerte si apenas pudiera soportar un empujón. Observa esto—posteriormente comenzó a mirar maliciosamente a Peter, el cual no se había percatado todavía de lo que estaba a punto de sucederle.
—¡Hey! ¡Patético Parker!—le llamó. Peter escuchó el llamado y lo que hizo fue voltearse, pero antes de que hiciera eso completamente, Flash ya le había lanzado la pelota de baloncesto a la cara. —¡Piensa rápido!—¿cuál fue el resultado? Peter no reaccionó a tiempo y la bola le dio en la cara, haciendo que sus lentes cayeran al suelo junto a todo lo que Peter llevaba en las manos.

—¿Qué rayos te pasa Flash? No estaba viendo—dijo el aún sorprendido Peter mientras se colocaba en el suelo tratando de encontrar sus lentes.—¡Mis lentes! ¡Mis apuntes!—se preocupó un poco, puesto que si sus lentes se rompían, sus tíos tendrían que pagar la reparación. Y Peter no quería darle mas carga a tio Ben, ya suficiente tenia con haberle comprando un microscopio nuevo la semana pasada.

—Lo siento Peter, tan solo te estaba probando. Fallaste la prueba. Eso es lo que pasa cuando te la pasas todo el tiempo metido en la biblioteca y todo lo que conoces son libros y mas libros. Pierdes reflejos—luego miró al otro chico líder de equipo. —¿Ves lo que te dije? ¿Cómo esperabas incluirlo en el equipo?—luego miro nuevamente a Peter, el cual mostraba dificultad para encontrar sus lentes y ubicar sus cosas. En realidad lo veía todo borroso. —Sigue con tus libros, cerebrito. Al menos en eso eres bueno.—Flash soltó una carcajada, junto a su grupo de amigos. Ninguno de ellos se dignó de ayudar a Parker, que tampoco dijo una contestación adecuada.

OOC: Si crees que he escrito demasiada acción en un turno sólo dime, edito cualquier cosa sin problema vale?


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Miércoles, uno de mis días preferidos. Las clases eran geniales, la gente no sé muy bien por qué estaba de mejor humor y por lo general se me hacían más cortos los días. Después de la clase de gimnasia me cambié de ropa, poniéndome unas mallas blancas y un jersey ancho de punto a rayas negras y rojas. Me coloqué la diadema negra en la cabeza y salí al patio con la mochila cargada de un solo hombro. Respiré el aire puro del patio mientras caminaba a una mesa donde estaban mis compañeras del trabajo de física. Me senté en el sitio más cercano a la cancha, sabía que si había una mesa libre las chicas cogerían esa porque a Lucy y a mí nos inspiraba ver los movimientos deportivos para trabajar. Apoyé mi mochila contra el suelo y empecé a sacar cuaderno y bolígrafo. Nos tocaba repartir el trabajo y empezamos a hablar entre nosotras para pensar cómo estructurarlo y quién se quedaba con qué parte. Mientras repartíamos los puntos la vista se me fue a la mano, pensaba en la picadura que quedaba cubierta por un guante negro al que le corté los dedos. Todo era una locura... Yo me encontraba mejor, más capaz de todo y más segura de mí misma. Pero lo de la tela de araña, la descompensación corporal... Hacía casi tres semanas desde ese incidente y seguía sin comprender qué había pasado del todo. Sin darme cuenta me quedé en trance pensando en todo lo que me había ocurrido respecto a la araña y olvidé el tema que tenía que tratar con mis amigas.

Pero los gritos de Flash me sacaron del limbo en el que me había metido, haciendo que girase el rostro para ver justo cómo Peter Parker recibía el balonazo en la cara y caía al suelo con todas sus cosas desparramándose por el suelo. Fruncí el ceño absorbiendo un enfado increíble en cuestión de pocos minutos y sacando las piernas de debajo de la mesa para ponerme en pie avancé firme hacia ellos. -¡EH! FLASH, ¿¡QUÉ MIERDA HACES!?- si quedaba alguien por girar la cabeza y contemplar la situación, acababa de hacerlo en ese momento.

Llegué hasta donde se encontraba Peter, me agaché para ayudarle y lo primero que hice fue recoger sus lentes, limpiarlas con mi jersey y dárselas. - ¿Estás bien?- pregunté cambiando el tono totalmente, adquiriendo cierto deje de ternura y preocupación. Por suerte las gafas estaban intactas y después de ofrecérselas empecé a recoger sus libros, contemplando un ejemplar sacado de la biblioteca que sólo había extraído yo según el historial. Me detuve en el título de mi materia favorita, intercalando mi mirada entre las pupilas de Parker y el libro. Se lo devolví pensando que tal vez luego tendríamos tiempo de hablar de ello. Me enderecé ofreciéndole la mano para ayudarle a levantarse, con una sonrisa más confiada. -No te preocupes, Peter... Acabará barriendo los laboratorios en los que tú trabajarás- le dije con sinceridad. Se me hizo raro llamarle por su nombre de pila, aunque me hizo sonreír pensar que se me había escapado. Pero la sonrisa me duró poco tiempo, Flash volvió a abrir su bocaza.

-En serio, ¿nena? Vamos, ¡no es más que un idiota, mírale! - dijo señalando todo el físico de Peter con la palma de su mano desde la distancia. - Ahg... Cállate ya. Eres mucho más idiota que él. Y no me llames "nena".- dije haciendo el gesto de las comillas con los dedos de ambas manos. Giré el rostro para volver al de Peter de nuevo con expresión amable. Pero el imbécil insistió. -Vamos, no te enfades nena... ¡Cualquiera hubiera podido reaccionar a esto! - dijo mientras noté cómo agarraba el balón de nuevo y me lo tiraba. En aquel momento no comprendí cómo llegué a saber lo que estaba haciendo sin mirarle y sin esperarlo... Ahora todo encaja. Todo pasó demasiado rápido. Estaba mirando a Peter de frente y en segundos estaba dada la vuelta, recibiendo en las palmas de mis manos el balón. - Eh, Flash... Piénsa rápido- dije devolviendo con esa fuerza que aun no controlaba la pelota, haciendo que el matón la parase de pecho y cayese contra el suelo de una manera tan patética que haría que la gente se olvidase de la caída de Peter, llenando el patio de una carcajada común.

Me giré con gesto cansado y aun ligeramente furioso aunque sonriente a Peter. No quería presionarle, bastante había pasado como para obligarle a nada, pero quería charlar con él. - ¿Qué tal si nos vamos a un sitio más tranquilo?- dije recogiéndome un mechón de pelo que se había escapado tras la oreja.

Observó, mientras buscaba sus lentes, como la figura borrosa de una chica se colocaba frente a él en el suelo y recogía los lentes que inicialmente nunca logró ubicar. Ella los cogió y Peter se dio cuenta porque llegó a ver la mano borrosa. ¿De quien se trataba? Y lo mas importante, ¿qué quería hacer con los lentes? Pero para su sorpresa, esa persona lo que hizo fue devolvérselos totalmente limpios. Ahí fue cuando se dio cuenta de que se trataba de Gwen Stacy, una compañera de clases que veía casi todo el tiempo pero con la cual nunca se había atrevido a hablar. Si acaso conocía su nombre gracias a que por las mañanas se tomaba la asistencia a la clase.

Como sea, no estaba preparado para encontrarla de frente y menos en aquellas circunstancias. Ella era la única persona hasta el momento que se había dignado a ayudarle en una de aquellas situaciones cuando Flash se pasaba de la raya, sin duda ella parecía ser alguien diferente a todos los demás que conocía allí en la escuela. —Eh, yo... Sí. Estoy bien—mucho mejor ahora que contaba con su ayuda, pero sin embargo contestó nervioso estando aún en el suelo e intentando sonreír.

Todo pasó muy rápido y Gwen ya le estaba recogiendo sus libros. Tomó su mano para levantarse y al tiempo en que tomaba los libros que le ofrecía Gwen, procedió a sacudirse todo el polvo que tenia en las rodillas. A tía May no le iba a gustar que llegara sucio a casa. Luego pudo escuchar algo que le sorprendería bastante: aquello que le dijo Gwen acerca de que Flash trabajaría barriendo en los laboratorios en los cuales trabajaría Peter. El joven estudiante, en ocasiones, tenia un poco de rencor porque todos le echaban a un lado y le rechazaban por tener unos gustos particulares por la ciencia y el estudio. Pero Gwen sabia de lo que era capaz, sabia que todos se arrepentirían algún día de haberse reído de él. Eso le sorprendió.

—Se arrepentirá de todo esto—dijo un poco serio, pero mostrándose siempre amigable con Gwen, que también se mostraba amigable con él. Poco después Flash volvió a hablar. El atleta tenia una mayor facilidad para tener a las chicas de su lado, para volverlas locas por el, pero no a Gwen. Ella no se mostraba como la típica chica que cae ante sus encantos. Flash le lanzó el balón y ella, quien sabe como -puesto que no estaba ni pendiente-detuvo el balón y se lo devolvió con tal fuerza que el abusador cayo al suelo.

El golpe en la cabeza debió afectarle de algún modo, ¿acaso estaba soñando? ¡De seguro ahora mismo estaba de camino al hospital! Ahora toda la atención ahora se centraba en Flash Thompson y no en Peter Parker, lo cual era una gran fuente de alivio para el ultimo. —¡Qué buen tiro, Gwen!

Definitivamente el golpe le había afectado... o quizás alucinaba... El caso es que ahora Gwen le decía que se fueran otro sitio, uno donde no los molestaran. Peter ya tenia los planes de ir a corroborar las fórmulas, pero no estaba seguro acerca de si eso le gustaría a la chica—Justo me dirigía al laboratorio de química para corroborar unos apuntes—mostró el papel que tenia en sus manos—¿Te gustaría venir conmigo?—oh no, la última vez que preguntó algo como eso no salió bien. Pero la rubia se comportaba de una manera mas distinta a como usualmente se comportaban sus otras compañeras de clase, Gwen era mas amigable y por lo visto, también preocupada.

OOC: Siento la tardanza, trabajos de universidad, las fechas... Una locura. ¡Sorry!

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Guiñarle un ojo como gesto confidente fue suficiente como para recuperar el buen ambiente, o al menos eso sentí. Me moví de un paso hasta la mesa donde estaban mis compañeras, agachándome para recoger la mochila abierta, donde arrastré mi cuaderno y boli desde la mesa para guardarlo de nuevo y mientras cerraba la cremallera miré a mis amigas. - Repartidlo como queráis, ¿vale? Me quedo con lo que no quiera nadie, voy a pasar un rato con Parker- Noté las miradas hacia él y hacia mí de manera intermitente. Las preguntas de por qué iría con él. Los prejuicios sobre cómo eso sería perder el tiempo para mí. Pero me encogí de hombros y me cargué la mochila de un hombro.

Me volví hacia él, y viendo que cargaba todas sus cosas con una sola mano, le cogí de la otra con mi diestra, sin entrelazar los dedos y tiré de su cálida mano hacia el laboratorio. Estoy segura de que pudo detectar cómo se me iluminaron los ojos cuando dijo "química". Sin duda mi asignatura favorita. Poco a poco nos fuimos alejando del patio, yo en cabeza tirando de él. Cuando entramos en el edificio relajé el ritmo de los pasos y le solté la mano, mirándole a los ojos. - ¿Qué vas a corroborar? ¿Es sobre el artículo de ayer del profesor Grant?- le pregunté sin dejar de mirarle mientras iniciaba marcha al laboratorio de químicas. - Me pareció muy interesante aunque sí me parece que hubiese sido necesaria una práctica para comprobarlo... ¿Te importa si lo hago contigo?- Un par de giros de pasillo y ya estábamos.

Llamé un par de veces antes de abrir la puerta, pero nadie contestó. Al abrir estaba vacío, el profesor parecía no estar. Sabía que no supondría un problema que Peter o yo utilizásemos el laboratorio, de hecho a veces solicitaba el aula y me dejaban trabajar sola. Lo que me pareció extraño fue que no hubiese nadie, cualquiera podría haber entrado -Supongo que Grant no está...- dije mirando de lado a lado el laboratorio, comprobando que no echaba de menos nada - No importa, normalmente si lo pides te lo dejan... Supongo que no pasará nada si lo usamos tú y yo.- Pasé decidida, dejando mi mochila en una de las banquetas, sacando mi cuaderno de laboratorio, un bolígrafo y un portaminas, esperando a ver qué quería hacer Peter. Carraspeé un poco, intentando sacarle alguna sonrisa y hacer que se olvidase del incidente del patio. Cogí el bolígrafo y me lo puse a modo de micrófono, sujetándolo con una mano y el puño cerrado - Y en el experimento de hoy tenemos como director, denle un fuerte aplauso, por favor a... ¡Peteeeer Parkeeeer!- empecé a aplaudir y a simular vítores de un público invisible. - Gracias por estar conmigo hoy, Peter, es todo un honor- dije rompiendo la broma con una carcajada enorme mientras apoyaba la punta del boli en el cuaderno y empezaba a escribir la leyenda del experimento. "Fecha, Título, Descripción, Método, Materiales..." Lo básico. Lo escribí prestando atención a la letra, ya que en laboratorio si no luego era imposible distinguir si escribías demasiado rápido y al terminar levanté la vista con una sonrisa, esperando a que me dijese si necesitaba ponerme gafas, bata, guantes... O si era algo más sencillo.

Quedo un poco perdido por lo que estaba pasando, pero una chica actualmente había aceptado acompañarle a realizar sus tareas y experimentos aburridos en el -según los comentarios de sus campaneros- lugar mas aburrido de la escuela.  Así también observaba como las chicas amigas de Gwen los miraban a ambos, preguntándole a ella sobre el por que acompañaba a un chico tan callado como lo era Peter. Le sorprendió un poco cuando Gwen le agarró de la mano. No lo esperaba.
—''Cielos, hoy debe ser mi día de suerte. Por fín Flash hace algo bueno por mí, aunque sea de forma indirecta''—siguió pensando mientras Gwen le llevaba de la mano—''Si no hubiera hecho aquello, jamás la hubiera conocido. Creo que me perdía de mucho. ¿Por qué rayos no le hablé antes?''—luego recordó que la había visto un par de veces, pero que nunca se atrevió a hablarle. No sabía siquiera como iniciar una conversación con una de las chicas más lindas de la escuela -o al menos eso era lo que comentaban los otros muchachos-, pero que ahora podía comprobar. Por fortuna Flash facilitó todo, por fin fue útil en algo más que complicar la existencia.

Contestó con unos pocos segundos de retraso, ya que Gwen le puso un poco nervioso al mirarle a los ojos—Ajá, ese mismo—dijo asintiendo con la cabeza. Anteriormente pudo notar el hecho de que la chica parecía tener algún tipo de interés con respecto a la química y aquella conversación no hizo mas que constatarlo. Finalmente se topaba con una compañera que conociera y tuviera su propia opinión sobre lo relacionado a química. Aquello no era algo que se diera muy a menudo, pues sus compañeros fijaban mayormente su atención en otras cosas e ignoraban aquello que si le gustaba a Parker—A mi también me pareció interesante el tema de los catalizadores. Será genial que probemos como funcionan—sonrió.

Luego de ello entraron al laboratorio, el cual tenia cinco filas de mesas rectangulares y sillas a cada lado de las mismas. Estaba equipado con todo lo necesario para realizar experimentos de nivel escuela secundaria, lo cual estaba muy bien ordenado encima de cada mesa y constaba de: mecheros, probetas, microscopios, balanzas, tubos de ensayo, embudos y muchas otras cosas más.  En una de las paredes, al lado de la pizarra que contenía la información sobre enlaces covalentes de la clase pasada, había un gran cartel que contenía a la tabla periódica. Al entrar al laboratorio, Peter dejó sus libros en la mesa mas próxima y se quedó solo con el papel de los apuntes. —Escuché que está dando una charla en la Universidad Empire State. No creo que lo veamos en todo el día, mejor así... Creo.

La pequeña broma de Gwen le hizo sonreír y sentir bien, le hizo sentir que de verdad había conocido a alguien amigable y con quien podría al parecer compartía gustos similares por la química. —Eh, gracias a tí, Gwen. Jamás vi a alguien poner en su sitio al tonto de Flash como lo hiciste tú hoy—soltó una risa momentánea. —Bueno, vamos a descomponer el peróxido de hidrógeno, es decir, agua oxigenada. Esto ocurre de acuerdo con la siguiente ecuación—dijo mientras se acercaba un poco y le mostraba el papel con la ecuación 2H2O2(ac)→2H2O(l)+O2(g) escrita y con algunos borrones. —Necesitamos guantes, batas, un vaso, una cuchara, agua oxigenada y el catalizador, que vendría siendo dióxido de manganeso—luego de ello procedió a buscar dos pares de guantes y dos batas del escritorio donde se guardan estos.

Me quedé mirando su sonrisa cuando habló de los catalizadores. Era la primera vez que veía sonreír a Parker así. Tenía una sonrisa muy bonita, ¿por qué no sonreía más a menudo? Y después de cuestionarme ciertas cosas me invadió ese calor agradable que me recorría el cuerpo después de haber ayudado a alguien a estar mejor o por lo menos algo más contento.

- ¿Mejor así? ¿Te ocurre algo con Grant? Sé que no es el mejor profesor del mundo, pero... -me encogí de hombros- No sé, a mí me parece agradable, y como te he dicho suele dejarme el laboratorio de vez en cuando- dije sonriéndole.

De nuevo después de la broma sonrió con sinceridad, o eso me pareció. - Eh vamos, no me lo agradezcas. Tenía ganas de dejar a Flash en ridículo desde hace mucho. Es un matón estúpido y sin cerebro que cree que puede conseguir cualquier cosa por estar en buena forma. Es absurdo y ridículo, y no puede vivir sin controlar sus inseguridades a base de humillar a los demás. Un simple idiota.- dije acompañado de un rolling eyes de justicia para luego agitar la cabeza y centrarnos en el trabajo. - Perdona, es.... Me da rabia esa gente.- carraspeé y empecé a apuntar lo que me decía.

Esperé a que Peter me diese la bata, ya que no había que manejar nada del laboratorio sin la indumentaria adecuada. Agarré la bata y al ir a ponérmela me dio un dolor en el costado izquierdo de un golpetazo que me había dado la noche anterior intentando aprender a manejar el cambio de la picadura de la araña. Fruncí el ceño y sorbí aire entre dientes como gesto de dolor -AH! Au...- terminé de ponerme la bata y me llevé la mano derecha al costado izquierdo, rozando por encima para no fomentar el dolor. -Voy- dije sin darle importancia al dolor, caminando directa a la estantería de sustancias, dando por hecho que yo iba a por el agua oxigenada y el dióxido de manganeso y él iría a por los instrumentos, el vaso y la cuchara. Volví a la mesa donde estábamos haciendo el experimento y lo solté todo con cuidado, aun con un deje de dolor en el rostro. Después apunté las cosas en mi cuaderno y volví a levantar la vista a Peter. - Vale, procedimiento?- y me quedé pensando en el dolor del costado y en el moratón que me había hecho. Pensando lo estúpida que había sido por la mañana al olvidarme echarme la crema. Me quedé mirando los ojos de Peter pensando en que quizá no preguntase demasiado, o no le diese importancia. Tenía todo el costado de un color rosado y morado intensos, si me pedía verlo iba a ser algo incómodo y no sabría qué contestarle. Pero era Parker... Él era mucho más cortado como para hacer eso. Así que continuamos con el experimento y empecé a echar el agua oxigenada en el vaso.

—''La primera chica que no cae ante Flash, vaya''—pensaba, al tiempo en que Gwen le decía sobre el por qué le ayudó. Sonrió brevemente al escuchar las razones, pero tenían continuar con el experimento y no distraerse, que para eso habían entrado al laboratorio.

Consiguió las batas y los guantes, procediendo luego a pasárselos a Gwen y colocárselos al tiempo en que ella también lo hacia. Fue en ese momento, cuando Gwen se colocaba la bata, que vio como esta hacia un gesto de dolor sin razón aparente—¿Te encuentras bien?—le dijo y esta fue a buscar las sustancias. Peter hizo lo mismo y fue a buscar los otros materiales restantes y los llevaría a la mesa donde estaban reuniendo todo. Pero aun quería saber que le había pasado, estaba de lo mas bien hasta el momento, ¿qué fue lo que le dio?.

Se acomodó un momento los lentes y miró también a Gwen.—Creo que lo próximo seria verter el agua oxigenada en el vaso y luego echar el dióxido de manganeso—esperó un momento hasta que ella lograra anotar el procedimiento y luego cogía el frasco con el agua oxigenada y lo vertería en el vaso, regulándolo hasta la mitad del mismo—¿Te gustaría hacer los honores?—le señaló la cuchara para que pudiera tomar el dióxido de manganeso, una especie de polvo que por cierto estaba presente en las baterías—Puedes usar la cuchara

Luego de ello sacaría un lápiz de su bolsillo y buscaría un papel que había en un cajón. Necesitaba anotar la reacción que obtendrían al mezclar aquel catalizador con el agua oxigenada. ¿Explotaría? ¿El agua oxigenada se evaporaría? Estaba a punto de averiguarlo. Estaba muy pendiente al experimento, pero sin duda quería saber acerca de Gwen Stacy, puesto que no conocía nada acerca de ella. Solo sabia que era muy inteligente y bueno, mejor oportunidad no iba a tener para conocerla.
—¿Y qué? es... ¿cierto que tu padre es policía?—definitivamente no era un buen primer tema de conversación con alguien que hasta hace unos minutos era un total desconocido, pero no se le ocurrió otra cosa.

OOC: Disculpa mi tardanza... Como posteé en la ausencia, entre los exámenes y entre que no tengo PC estoy intentando cumplir lo mejor posible pero me cuesta muchísimo... Espero no te haya molestado o importado.
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Fruncí el ceño por el dolor, levantándome la camiseta sólo hasta el costado para ver el morado sobre mi piel, bajando la camiseta de nuevo. El equilibrio y sus malas pasadas....
-Sí, estoy bien. No te preocupes- le sonreí lo mejor que pude, notando el dolor, y seguí con el experimento. Su preocupación me dio algo de ternura y me hizo sonreír algo más sinceramente. -Sigamos- Copié rápido lo que quedaba del experimento y con la cuchara, trabajando rápido sin perder eficacia, vertí la cantidad exacta. - Y.....?- me quedé mirando espectante. Ahi estaba toda la espumareda negra que significaba que el oxígeno estaba separándose del agua. -¡FUNCIONA!- di una palmada al aire y lo apunté. Para comprobar que el experimento había salido bien, cogí una cerilla, la prendi y la acerqué sobre el recipiente, para comprobar que efectivamente la llama aumentaba al entrar en contacto con el oxígeno que se estaba desprendiendo del experimento y que había salido bien. -Sí, es lo que dijo el profesor. El oxígeno se está separando del agua al utilizar el dióxido de manganeso. Un completo éxito, doctor. Un placer haber trabajado con usted- hice una reverencia entre risas de forma exagerada y retiré la muestra al contenedor de restos y empezaba a limpiar el material, sin quitarme los guantes.

-Sí, es el comisario de una de las comisarías más importantes de Nueva York... Trabaja mucho y como estamos solos, paso tiempo sola.- me encogí de hombros, pensando en mamá con algo de tristeza... Aunque es algo que había quedado muy atrás en el tiempo y apenas tenía recuerdo. Sólo las fotos que papá me enseñó - Pero está bien. Es muy cariñoso y me enseña muchas cosas. Lenguaje sordomudo, autodefensa, leyes, tácticas... Es más divertido de lo que parece jajajajaja- me eché a reír perdiéndome en el recuerdo de cuando me dejó su sombrero de policía y dijo que de mayor sería una gran y leal servidora al cuerpo.

Coloqué las cosas para secar y me quité los guantes lo primero, tirándolos al cubo de basura. Luego me quité las gafas, que me descolocaron un poco la diadema negra, así que me la quité, me recoloqué el pelo un poco, intentando poner algo de orden, y me la volví a poner sonriendo a Peter por haber sido tan torpe de haberme descolocado el pelo yo sola. Luego me quité la bata y volví a notar ese pinchazo que me hizo fruncir el ceño y sorber aire entre dientes. -Oye, te... ¿importaría acompañarme a la enfermería? Me duele bastante y... - me volví a levantar la camiseta, esta vez enseñándole parte del moratón que me ocupaba también parte de la espalda, que yo no había visto- ¿Tiene muy mala pinta...?- supuse que cn una pomada bastaría, pero necesitaba calmarlo antes de que terminasen las clases.

Poco después cogí mi mochila con el hombro opuesto al lado dolorido, le sonreí con un pequeño deje de disculpa y le pregunté de camino - Y.. ¿Tú vives con tus tíos no? ¿Cómo es?-le dije sonriendo. Era una buena persona, de eso estaba segura. Y estaba empezando a creer que las mejores personas eran las que peor lo pasaban.

OCC: Yo soy quien debe disculparse, pues me he tardado demasiado. Nada, cerraremos esto y si aun quieres continuar, puedes abrir tu siguiente tema como habíamos acordado. Es posible que haya perdido un poco el hilo, pero podemos hablarlo rápidamente.

Algo le estaba molestando a Gwen, algo que debía ser bastante serio. Logro ver algo morado sobre su piel. ¿La habrán golpeado? ¿Como podía seguir como si nada ante tanta incomodidad? Ella le decía que estaba bien, así que era probable que fuera otra cosa y que no fuera serio. Decidió hacerle caso y prosiguieron.

El experimento funcionaba tal y como lo esperaba. La reacción era impactante y el efecto producido por esta, el calor, podía fácilmente comprobarse por medio de la combustión de la cerilla que Gwen había colocado en el recipiente. Aun así, también puso la palma de su mano algo por encima del recipiente y pudo comprobar el calor que esta desprendía.
Todo había salido a la completa perfección y como se esperaba, que mal que no habían grabado todo el procedimiento para así ganar puntos con el profesor. —¡Perfecto!—dijo emocionado al mismo tiempo en que la chica rubia celebraba. —Somos buen equipo— dijo sonriendo contestando a sus reverencias.

Y ahora comenzaba la otra parte del experimento, la parte de limpiar. Procedió entonces a ayudar a la chica a limpiar todo y a colocar las cosas en su sitio. Como el experimento había terminado, cogió el recipiente con un pañuelo y vertió la mezcla química en el lugar para desechos peligrosos.

—¿El comisario? Eso es genial. ¿Autodefensa dices? Ojalá yo pudiera aprender—probablemente los demás no lo molestarían si supiera defenderse.

Quizás era un poco lento, torpe o distraído, pero aun no se había quitado los guantes y bata. Gwen si lo había hecho y parecía mostrarse un poco incómoda por aquello del moratón.
—Seguro que si, vamos, rápido. ¿Que te pasó? Debiste haberlo dicho antes...—dijo al ver el moratón. La prioridad principal era ir a la enfermería para que Gwen recibiera tratamiento para lo que fuera que le hubiese pasado en esa área.

—Si, tía May y tío Ben. Los quiero mucho, ellos me criaron desde muy pequeño. Se preocupan mucho por mi. Los amo. —

Y siguieron hasta la enfermería. Se podría decir que aquel fue el inicio de una muy linda amistad.