JOKER
Nombre: Una rosa con otro nombre no sería menos olo-rosa. HAHAHAHAHAHAHA
Alias: Joker, payaso del crimen, Dandy púrpura, la gran sonrisa. En depende qué circunstancias, Señor J, “pastelito” y “pudin”.
Edad: ¿No sabes que está feo preguntar esas cosas a las señoras?
Universo de Origen: DC Cómics
Nacionalidad: No gracias, ya tengo.
Raza: Humana, aunque hay quien dirá que no.
Mentor: ¿Porqué? ¿Me huele el aliento?
Bando: DO-BLE-GA-DOR.
Ocupación: Comediante, artista, genio y figura del crimen.
Descripción Física: Soy un 1.82 de pura belleza. Carne blanca, además, muy buena para el colesterol y cero por ciento de grasa. Tengo un maravilloso pelo ensortijado color verde, pero no cualquier verde, verde primavera, el que se usa en los billetes. El color de mis ojos no lo sabe nadie con exactitud, porque mi cautivadora sonrisa no les deja fijarse en esas nimiedades. Mi gusto en el vestir es propio de todo Dandy que se precie, chaqué color lavanda, con raya diplomática. ¡Para que luego digan que conmigo no se puede hablar! Una camisa color mostaza, un chaleco verde, a juego con la lazada y el pelo, y unos brillantes zapatos negros con polainas, para que no se me ensucien cuando pateo el negro culo de batman. Me gusta llevar una flor con sorpresa en la solapa. Pero lo que destaca de mí, sin duda es mi sonrisa perfecta, enmarcada en rojo. Todo el mundo conoce mi sonrisa. Todos adoran mi sonrisa. Pero cuidado, puede llegar a ser contagiosa… HAHAHAHAHAHAHA.
Descripción Psicológica: Soy un artista. Un espíritu libre. Me gusta vivir la vida al máximo, la sensación del vértigo antes de entrar a escena, cuando sabes que lo tienes todo en tus manos, que el mundo entero está a tus pies. Soy un visionario, con mi propia manera de ver la vida. Una en la que las preocupaciones no existen. En las que los tejemanejes de los más grandes no afectan a los más pequeños. Una en la que no importan los planes, si no el momento. En la que lo importante no es lo que te pasa, si no tomarte la vida con humor. Vivir sufriendo no tiene sentido, así que ¿Por qué no sonreír? ¿No es mejor darse cuenta de que hay un modo diferente de hacer las cosas? En el que no hay que pensar tanto, ni asfixiarse en papeles, ni esperar que otros decidan por uno mismo qué hacer, cómo y cuándo. Uno en el que el cambio proceda de las cosas pequeñas, hasta hacerlas tan grandes que ya no se puedan parar. ¿Queréis veniros a vivir en la utopía? Porque allí es donde yo vivo...
Historia: Esta historia comienza como la de todos. Un tipo normal, con una vida normal. Días de lo más normales, uno detrás de otro, levantándote para ir a currar, esperando el autobús a la ida, oliendo los sobacos en el metro a la vuelta. Comprar el periódico todos los días. De lo más normal. De pronto un día, pierdes algo, o a alguien. ¡Qué duro es vivir! Pero no importa, porque piensas ¡Es igual, seguro que la situación mejorara! Pero al día siguiente, te echan, por algo que ni siquiera es culpa tuya. Tu mujer te deja, tus hijos no te hablan. ¿Qué demonios le ha pasado a tu maravillosa vida? ¡Pero, eh, aún te queda espíritu para emprender! ¡Puedes salir del pozo, claro que sí! Así que trabajas duro y continuas levantándote todos los días, sólo para que un hombre con pintas se lleve por la cara algo en lo que tu llevas invertido años y años. Quizá eres científico, o médico. A lo mejor solo eres un diseñador de tapas de wáter al que le han robado la idea de acolcharlas para que a los tíos que tienen estreñimiento no se les claven en el culo cuando pasan horas y horas allí. ¡Tanto trabajo! ¡Tanto esfuerzo! ¿Y para qué? Para nada. Tu vida no es mejor. ¡Alguien habrá dispuesto a ayudarte! ¿Verdad? Hay miles de personas buenas por el mundo. Pero da la casualidad de que todas están ocupadas o fuera de cobertura. A todo esto ya no eres el que eras. Te duele la espalda, tienes achaques y levantarse con la gota cada día es un suplicio.
Te levantas en un suburbio, con bronquitis, oliendo a vómito y con los calzoncillos meados, en busca de una explicación. Esto no es lo que tu esperabas. No es la fantástica vida que tu habías planeado. Esa que tu habías pensado y planificado al milímetro. ¡Y te has esforzado para conseguirlo! ¿Entonces qué ha pasado? ¿Es culpa tuya? ¡No! ¿De quién entonces? Entre las sirenas de la policía y el de las ratas mordiendo las cañerías, tienes una revelación. ¡¿Cómo has sido tan estúpido?! ¿Cómo has creído que tú tenías capacidad para salir de todo este postureo, de esta obra monótona y reciclada que es la vida día a día? Menudo engaño te han colado. Creyendo que tienes algún tipo de poder de decisión sobre ese ensayo que se repite un día, y otro día, y otro día. ¿Y qué haces entonces? ¿Llorar? ¿vengarte? ¿Te das a las drogas? Suicidarte parece una buena opción, aunque no la única. La vida puede ser más. Mucho, mucho más de lo que ellos quieren que sea. Yo encontré una manera de vivirla. Una en la que siempre soy feliz. Una en la que decidí sonreír…
Perdona si me pierdo, pero tengo que preguntar, ¿Entonces el final, esta es tu historia, o la mía?...
Poderes:¡Soy un paladín, con ciento cincuenta de carisma y yelmo desintegrador! HAHAHAHAHA ¿¡Pero qué dices, hombre?!
Poderes…
Habilidades: ¡Esto sí! ¡Esto sí es lo mío! Soy un genio. Un visionario. Tengo un intelecto muy superior al de… al de cualquiera. Soy un Showman, así que tengo que conseguir un buen golpe de efecto, y si para eso tengo que usar fuegos artificiales, vaya si los uso. Armas de fuego, blancas, mis propios puños. ¡Aquí todo vale! Por no decir que soy un alarde de originalidad que no se ha visto desde… nunca. Me gusta llevar todo tipo de aparatejos, cachivaches y bromas. Pero no como hace Batman. Lo mío es cien por cien calidad. En cuanto a lo de hacer trampas, ¿tengo que conformarme con no ser el más rápido, si puedo compensarlo de algún modo? Por ejemplo cortándole al otro las piernas… ¡Pues claro que no! Preguntad a Bárbara.
Defectos: Ser humano. (HAHAHAHAHAHAHAHAHAHA ¿NO OS HA HECHO NI UN POQUITO DE GRACIA, MODS?)Mi único y principal defecto es que tengo un acosador nocturno que no me deja tranquilo. La poli tiene la mala costumbre de ponerme vigilancia en cuanto piso la calle, siempre intentando sacar alguna exclusiva en primicia de mi próxima actuación. A la gente le cuesta confiar en mí, quizá porque soy muy abierto y eso les amedrenta. Por cierto, no olvidéis que yo soy la estrella. No me gusta compartir los focos, ni tampoco que me hagan sombra, y mucho menos que me lleven la contraria. En cuanto a los que trabajan para mí, me gusta mantenerlos a salvoHaHAHAHA y que no se hagan dañHAHAHAHAHAHA ¡NI SIQUIERA PUEDO ACABAR LA FRAHAHAHAHAHAHA HAHAHAHAHA HAHAHAHA…
Equipo y recursos: Tengo una colosal guarida en un parque de atracciones abandonado en un muelle. Harley me la preparó cuando salí la última vez, e hizo algo medio decente. Allí guardamos una colección enorme de atrezo de circo, y un sinfín de bártulos de actuaciones antiguas. Sé que en alguna sala dejamos unos cuantos millones de dólares, pero ahora mismo no recuerdo en cual.
En cuanto a mis accesorios habituales, me decanto por los clásicos, mi pistola de pega, con su banderín de Bang, las cajas sorpresa con guantes de boxeo, la flor que salpica ácido o gas de la risa, el cojín pedorro explosivo y las cartas cuchilla. Me gusta afeitarme con el as de picas. También me gusta el lanzamiento de cuchillos, así que siempre llevo encima alguna navaja o estilete.
Tengo toda una banda a mi disposición, y cuando mis chicos se acaban, me consigo otros. Eso sí, para ciertos números, es necesario llevar la indumentaria adecuada, e imprescindible, esgrimir siempre una GRAAAAAAN SONRISAAAAAA.