Thank you for coming (Promethea) [26/04/2018]

Señor, son las 11:30, debe despertarse ya o llegará tarde a su cita, Señor, la voz de Jarvis sonó a todo volumen a pesar de la suavidad del tono, despertando al millonario  de manera inmediata, ¿Pero que?, gritó Tony sujetándose los oídos, Señor, le recuerdo que tiene una cita ineludible dentro de una hora, tiene el tiempo justo para prepararse, Señor, que vaya Pepper joder, déjame dormir, Señor, tiene el desayuno y la ducha preparados, este evento no puede ser atendido por la señorita Potts, Señor, le recuerdo que hoy es veintiséis de Abril, Señor, su cita ineludible, Señor, el millonario por fin reaccionó, Dios mío, ¿es hoy?, si, Señor, hoy es hoy, Señor, joder, ve preparando la armadura y que me suban algo de comer mientras me ducho.

Tony saltó de la cama y corrió al cuarto de baño, tras una ducha relámpago, un copazo de whisky, un zumo de naranja y una tostada con bacon se puso su traje más caro, activó los sistemas de la armadura y despegó a máxima potencia hacia el centro de Nueva York, si llegaba tarde nunca se lo perdonaría, solo de imaginar todas esas caras de decepción si no llegaba a tiempo..., Jarvis, vamos a probar el nuevo incremento de potencia de los repulsores, Señor, lo ideal sería probarlo en un entorno no urbano, si algo falla puede causar cuantiosas perdidas, no puedo llegar tarde Jarvis, no es una opción, actívalos en 3, 2, 1, ¡ahora!, la potencia de los repulsores casi se duplicó, aunque las lecturas indicaban que el aumento no era constante ni totalmente estable, ya puliría los detalles, pero por el momento le ahorraría unos minutos preciosos.


Iron Man aterrizo frente al Jacob K. Javits Convention Center tan solo unos minutos antes de su intervención, nadie le detuvo en la puerta porque aunque había muchos allí con trajes similares al suyo ninguno había llegado volando, por una vez no se paró a firmar autógrafos de la infinidad de chavales que se los pedían, solo se señalaba la muñeca en un gesto que esperaba les hiciera comprender que llegaba tarde, subió al escenario justo después de que le anunciaran, quitándose la armadura, que subió justo después de él, este año Tony Stark tenía el orgullo de ser quien diera la primera conferencia de las New York Comic Con del 2018.


Habían pasado varias horas, pero a petición de los organizadores, de los fans y del jefe de marketing de Stark Internacional, había decidido quedarse a promocionar la última linea de figuras de acción de Iron Man y el resto de los Vengadores, la verdad es que esto le encantaba, ver a todos esos jóvenes entusiasmados por los ideales que él mismo representaba le hacía sentirse bien por dentro, ni siquiera había necesitado una copa en toda la mañana.

Una chiquilla que no tendría mas de quince o dieciséis años se acercó a él con una armadura bastante bien diseñada, incluso parecía que los servos eran auténticos, Señor Stark, por favor, me firma la armadura, dijo con lo que debía pretender fuese una voz y una pose sexy, ofreciendo la zona del pecho para el autógrafo, claro preciosa, ¿como te llamas?, le preguntó el millonario sonriendo pero ignorando su coqueteo, Rose, pero puedes llamarme como prefieras, Tony la miró sin modificar su semblante, Rose, tu trabajo con la armadura es espectacular, impresionante para alguien que aún no ha acabado la secundaria, pero tengo edad para ser tu padre preciosa, la chica le devolvió la mirada como un cachorrito herido y eso enterneció aún más al millonario.

Mira, te diré lo que haremos, dijo sacando una de las tarjetas de la Fundación María Stark, llama a este número, te atenderá un amigo mío, Walter, le dices que yo te he dado esta tarjeta y que te he dicho que quiero que vea tu armadura, si cuando te licencies sigues interesada te prometo una cita ¿que te parece?, la joven lo miro ilusionada, cogió la tarjeta y trato de darle un beso en los labios antes de salir corriendo, pero el Vengador reaccionó a tiempo y solo pudo besarlo en la mejilla, se armó algo de revuelo en la cola cuando se extendió el rumor de que Stark estaba escogiendo a gente para su fundación entre los asistentes, algunos incluso habían colgado ya el vídeo en Internet.

Desde que había acabado en aquel nuevo universo, que ya no solo era un sitio diferente, si no un tiempo diferente, para ser exactos un futuro alterno; había observado maravillado todo tipo de avances y cambios no solo en las tecnologías, si no en los gobiernos, religiones y en la sociedad. Lo cierto es que los comics eran cosa muy popular y más cuando los superhéroes que poblaban sus páginas eran reales. Bill era dibujante en su mundo en concreto de su propia heroína, a quién representaba, Promethea; pero los conocidos en aquel nuevo universo él nos los conocía. Por eso se sorprendió al averiguar que allí también habían llegado sus comics. Supuso que parte de su mundo, no solo él y algunos demonios llegaron allí.

Así que gracia sal destino y la buenaventura consiguió recuperar su puesto de trabajo como dibujante. Fue algo extraño porque en teoría el debería ser un vejestorio o estar muerto en las fechas actuales pero con todo el caos que supuso la fusión de mundos (así lo llamaron en las noticias) había mucha gente que aparecía no solo de universos alternos si no también del pasado como del futuro, lo cual era bastante caótico pero a él le vino genial porque no tenía que ocultar quien era. Aunque aún no había salido del armario pese a lo muy aceptada que estaba la homosexualidad. Cosas de su timidez.

Y como todo buen dibujante en aquel mundo que se preciara tenía que acudir a uno de esos eventos tan chulos en los que se reunían fans de los comics y se disfrazaban. Se llamaba Comic Con y le habían invitado a ir con su editorial a firmar ejemplares. Estuvo a punto de rehusarse por la vergüenza pero Promethea se pasó días lloriqueándole en la cabeza porque se moría por ir. Así que a regañadientes aceptó.

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Así que allí estaba, sentado en una mesa firmando ejemplares de Promethea a una cola de fans que para su sorpresa era bastante gente. Se sintió alabado y sorprendido por la aceptación, lo cierto es que empezaba a creer que hizo bien en hacer caso a su compañera de aventuras.

“Bill, me encanta como me has dibujado en ese ejemplar. ¡Uy mira ese de ahí! ¿No le encuentras atractivo? ¡Me encanta esto! Van todos disfrazados de sus comics y series favoritas. ¡¡¡A ESA LA CONOZCO!!! Es de esa serie japonesa tan molona llamada Sailor Moon.”

Bill sonreía mientras escuchaba a la morena parlotear feliz en su cabeza y el firmaba ejemplares. Una vez terminó su sesión de firmas se dispuso a dar una vuelta por el recinto disfrutando del evento.

“¡Oh venga déjame salir porfa porfa porfa! Si incluso traen a superhéroes, un tal Iron man, de visita al evento. Conmigo fliparían. Venga Bill…vengaaa”

-Vale calla pesada…pero no seas muy escandalosa, ¿vale?

“Prometo que solo haré cosas para conseguir fans.”

-¿Por qué eso suena tan mal viniendo de ti?

Se metió en los aseos de caballero y, tras asegurarse que no había nade, se encerró y dibujo en su libretita personal a Promethea, dejando que la magia inundara su cuerpo. En lo que canta un gallo ya estaba Promethea en el mundo Material.

Allí los que iban disfrazados destacaban y llamaban la atención. ¿Pero sabéis que llamaba la atención? Ella flotando por los aires dejando un rastro de estrellitas tras de sí. No tardó en atraer una multitud a su alrededor que le sacaban fotos y pedían firmas. Ellas les lanzaba besos coqueta y se dejaba fotografiar disfrutando como si se tratara de una modelo. Muchos la reconocieron, quienes no igualmente se acercaban llamados por lo llamativo de la mujer. Incluso empezaban a desviarse muchos del grupo de fans que estaban alrededor del héroe invitado del que ella y Bill hablaron antes, hasta que se quedó solo con una chica que quería firmarse el, ¿pecho? Bueno, el caso es que Promethea estaba regalando estrellitas con la marca de su carmín en ellas a sus fans, presentándose, sacándose fotos y haciendo truquitos de magia sencillos pero vistosos.

Jarvis, ¿quien es esa preciosidad?, preguntó en cuanto la chica se alejo de allí, Señor, por lo que parece es Promethea, Señor, y salvo que hayan conseguido unos efectos especiales espectaculares creo que realmente es la heroína, Señor, una entidad divina al parecer, una diosa de la magia, Señor, discúlpeme por ser tan difuso en mi explicación, Señor, pero actualmente la mayor fuente de datos sobre ella son los cómics de un tal William Woolcott, compra todos los cómics Jarvis, ¿todos, Señor? Eso es un poco excesivo incluso para usted, con un ejemplar de cada numero publicado será bastante Jarvis, gracias, claro, Señor, ha rectificado bien, Señor, había veces que le daban ganas de desconectar a Jarvis y revisar su programa, siempre intentando chincharle con cualquier tontería, pero ahora tenia trabajo que hacer.

Tony se acercó a la preciosa mujer y cogió una de las estrellas que ella estaba repartiendo, Promethea ¿verdad?, tengo todos tus cómics, bueno en realidad solo un ejemplar de cada uno, seguro que todos estos chavales tienen algunos propios también, dijo con una sonrisa, iba a hacer un descanso y comer algo ¿te apetecería acompañarme y contarme todo lo que no aparece en tus cómics, los fans de ambos se arremolinaban alrededor, casi sin atreverse a intervenir, aunque algún lanzado aun se acercaba a coger una estrella de Promethea o pedirle un autógrafo a Tony.

No todos los días conozco a diosas, menos aún a diosas tan hermosas como tú, y si añadimos que ya he conseguido un beso tuyo, dijo alzando la estrella con los labios de Promethea, esta claro que este ha sido un gran día, dijo con una de sus mas cautivadoras sonrisas que incluso arrancó algunos suspiros entre los fans, claro, que según las ultimas previsiones no se descarta que aún pueda mejorar.

Acababa de sacarse una foto con un niño encantador de 5 años disfrazado de una cosa verde llena de músculos que a saber que héroe era y de que universo, cuando escuchó la voz de un caballero tratando de captar su atención, voz que silenció a todas las demás. Dejó al chavalín en brazos de su padre tras depositarle un beso en la frente (ahora era todo verde con unos labios rojos encima de sus cejas) y se giró, flotando en el aire para reparar que el caballero de la voz era el hombre de la armadura robótica, el tal Iron Man.

-¿Un número de cada uno de mis comics? Que halagador. Es el primer héroe de otra dimensión que muestra tal interés en mi como para querer informarse.- comentó melosa mientras flotaba a su alrededor, observando con curiosidad aquella extraña armadura. En su época la robótica apenas estaba avanzada y tenía que admitir que le despertaba gran interés.-Usted imagino que es el tal Iron Man invitado. Tengo que admitir que yo me he colado.- se rio risueña.- Pero me emocionaba venir a un evento como este, ¡en mi mundo no los había! AL menos no aún.

Dejó de flotar para posar sus pies finalmente en el suelo y quedar al mismo nivel que todos a su alrededor. Entregó un par de estrellitas más y se hizo un par más de fotos con algunos rezagados que esperaban el momento y volvió a dejar que sus ojos blancos se posaran sobre el héroe.

-¿Tienes nombre de pila por el que pueda tratarte o debo llamarte como tú apodo heroico? Y por supuesto que acepto su invitación, esa armadura me interesa muchísimo.

Tony sonrió de nuevo ante el comentario de la Diosa, Pues yo no me pierdo ninguno desde hace años, venía incluso antes ser parte de la fiesta, cuando era un chaval me encantaban, dijo recordando aquellos años, un mundo más fácil sin duda, estoy seguro de que a los organizadores no les importará que te hayas colado y a tus fans mucho menos, de hecho como ves están encantados.

Pero ¿dónde están mis modales?, dijo teatralmente, por supuesto que tengo nombre mi hermosa dama, Anthony Edward Stark, para servirla en lo que necesite, continuó haciendo una pequeña reverencia y depositando un suave beso en el dorso de la mano de Promethea, pero mis amigos me llaman Tony, dijo levantándose con una sonrisa, ¿y tu? ¿prefieres Prome? ¿Thea? ¿o simplemente preciosa?.

Tony estaba pensando donde podían ir a comer, dando un vistazo para ver si recibía algún tipo de inspiración cuando vio algo que le llamó la atención, Acabo de ver una cosa que te encantará, mira allí, le dijo señalando a una chica no demasiado lejos de ellos, esta claro que tu disfraz es bastante mejor, mucho más realista, pero hay que reconocerle que se ha esforzado bastante ¿no crees?, preguntó sonriendo de nuevo.


Bueno y ¿que prefieres comer?, le preguntó después, si te gusta el picante, conozco un sitio justo a la vuelta de la esquina, donde sirven los mejores Tacos de Nueva York y tienen cervezas de importación para bajarlos, estará lleno a reventar pero seguro que nos hacen un sitio, lo descubrí una de las primeras veces que vine y suele haber muy buen ambiente ¿te parece bien?.

Así que en aquellos eventos era normal invitar súper héroes por tanto ella no estaba fuera de lugar. Un punto a favor más para sopesar la idea de empezar a acudir con más asiduidad a dichos eventos. Y más teniendo en cuenta que a ella le encantaba ser el centro de atención.

-Pero que nombre más hermoso que tiene querido. Le llamaré Tony aunque Anthony suena demasiado bien.–Disfrutó encantada de aquel gesto caballeresco que era el beso sobre el dorso de su mano.-Cualquier forma en la que me llamen tus labios suena tan encantadora que puedes hacerlo como te plazca. Aunque preciosa me gusta.

Entonces aquí el amigo ligón le mostro algo que la llenó de gozo y satisfacción: una chica vistiendo como ella. En la convención los llamaban cosplayers y lo cierto es que era la parte más divertida de todo aquello. Descubrir que ella, como personaje de ficción había calado lo suficiente para que una jovenzuela quisiera emularla era el mayor alago que pudieran hacerle en su vida como heroína.

-¡¡¡COSITA LINDA!!!

La diosa no tardó en ir y estrechar entre sus brazos a la chica que al principio no la vio venir y tardó en reaccionar. Pero cuando supo quién era el que le daba tal abrazo se lo devolvió emocionada-

-Estás divina, eres espectacular querida. Haces fenomenal de yo.

La muchacha se ruborizó y la diosa le regaló una de sus estrellas firmadas. Además se sacaron una foto en la cual Prome se encargó que saliera un escrito que pusiera “best Friends forever” y luego, para sorpresa de todos, le estampó un beso en los labios casi de tornillo.

-Me haces feliz, sigue así.

Luego volvió junto a Tony dejando a la pobre muchacha algo mareada como si acabara de salir de una montaña rusa en pleno movimiento.

-Picante…me encanta el picante. Me siento picante ahora. ¡Si! Es ideal, llévame a comer comida rica querido.- Se abrazó a su duro brazo (si, duro por la armadura amigos no penséis mal) y dejó que la guiara.

El momento del beso fue captado por la cámara de más de uno de los frikis del lugar, seguro que mas de uno (y mas de una) tendría sus fantasías húmedas con esos pocos segundos de grabación, al propio Tony le había pillado un poco por sorpresa y no podía decir que le hubiera desagradado ser él el afortunado, Vamos pues, espero que la comida te guste tanto que yo también me gane uno de esos, le dijo el millonario en tono bastante picante tomándola del brazo.

Salieron del local pasando bastante más desapercibidos de lo que hubiera parecido creíble, pero teniendo en cuenta que la mayoría de gente iba disfrazada la pareja llamaba poco la atención, muchos de los que se cruzaron no los tomaron por Tony Stark y Promethea, sino por alguien que se había currado mucho su disfraz, Ya casi estamos, le dijo señalando un pequeño local que hacía esquina a unos metros de allí, está a rebosar pero no te preocupes, pediré que nos lo sirvan para llevar y podemos tomárnoslo sentados frente al río ¿te parece bien?, le preguntó antes de desaparecer entre la multitud.

Un par de minutos después salió de allí con una bandeja bien cargada, varios burritos, un par de refrescos, tres o cuatro cervezas y algo que amenazaba con ser un postre envuelto en papel de aluminio, en realidad no había llegado a pedir nada, cuando llegó a la barra le compro el pedido al tipo que lo estaba recogiendo por doscientos pavos y un autógrafo, el dinero no podía comprarlo todo, pero si una verdadera comida rápida, No sabía que querrías, así que he traído un menú variado, para que puedas elegir lo que más te guste, el millonario le dio a elegir entre un refresco o una cerveza antes de ponerse en marcha y caminar hacia el río a solo un minuto de allí.

No tardaron en llegar y pudieron sentarse en el césped a la sombra de un raquítico arbolillo que más que sombra daba pena, pero el lugar era bonito y la temperatura suficientemente agradable para que eso no fuera un problema, Y dime Preciosa, dijo utilizando el piropo como nombre, ya que ella le había dicho que le gustaba, ¿que te ha parecido tu primera Comic Con? La verdad, a mi se me hace extraño comprobar que en otras realidades antes de la colisión yo existía en algunos de esos mundos solo como un personaje de cómic, pero no puedo negar que eso solo le da más gracia al asunto, Tony se quedó un momento admirando la belleza de la diosa, era guapa, divertida y maravillosa ¿como podía alguien no interesarse por ella?

Se notaba que comer burritos no era la especialidad de Promethea que a punto estuvo de derramarse todo el contenido del primero encima, riéndose ella misma de la situación, por fin consiguió sujetarlo correctamente y consiguió probarlo, manchándose la comisura del labio, Un momento, le dijo Tony, y con un suave roce del índice recogió toda la salsa junto al labio de la diosa y se chupó el dedo, la verdad es que así está mucho más rico, dijo saboreándolo.