Prueba Rol Big Barda

Me desperté a media noche con dudas en mi cabeza. A mí lado dormía mi marido Scott y para no despertarle salí de la cama. No era fácil aclimatarse a la tierra. Hacía mi mejor esfuerzo pero nada salía como debía de ser. La vida en la tierra era muy diferente a la de mi mundo de origen, Apokolips. Había sido entrenada y criada para ser guerrera. Para servir a Darkseid y entregar mi vida si hiciera falta para su protección. Estaba adormecida en un planeta tiránico y brutal en el mi vida se iba sin poder ser yo. Pero la tierra no era tan fácil ser una misma. Tenían una cultura que no entendía y todos las labores de la casa eran inexplicablemente difíciles. Limpiar, fregar, cocinar … ¿Cómo se hacían tales acciones? ¿Por qué las cosas eran tan frágiles y se rompían o quemaban con tanta facilidad?Todo eso me llenaba de ira y enfado. Salí al jardín a mirar el cielo y en lo alto del manto estrellado, la luna.  Al poco sentí una cálida mano en mi hombro. Al girarme vi a mi marido Scott. Su rostro siempre con aquella paz. Una tranquilidad que equilibrada mi iracundo ser

- Barda, ¿estás bien?- dijo con ese tono apacible.

- Sí … - respondí pero mis gestos distaban de mis palabras. Estaba apretando fuertemente los puños.

- Bueno … -dijo Scott habiendo notado la incongruencia. - … mañana me levanto temprano para preparar un Show con Oberon. No rompas nada.

-Hombrecito, no dudes de mí. No voy a romper nada.-

Mi amado se ríe y luego me contesta:

- Eso me dijiste la última vez y me encontré con un hoyo en el jardín.-

Scott volvió a la cama y me puse a mirar al infinito. Las viejas costumbres eran difíciles de cambiar. Dejar todo lo que conocía atrás era duro. Pero al ver la cara de Scott sabía que aunque fuera difícil había valido la pena. Él era mi esperanza y mi luz. Cuando no tenía más que una vida basada en lo que otros esperaban de mí, el hijo de Hightfather me había mostrado un camino en el que podía ser yo.

Un poco breve, pero muy interesante.

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