Ficha del Pingüino

Nombre: Oswald Chesterfield Cobblepot

Alias: Pingüino

Edad: 40

Universo de origen: Ciudad de Gotham, DC

Nacionalidad: Americano

Raza: Humano

Mentor: Sensei desconocido para las artes marciales, ingenieros diversos para sus conocimientos tecnológicos.

Bando: Villano

Ocupación: Genio del crimen organizado, asesino y ladrón.

Descripción Física: Oswald toma su apodo de las constantes burlas que le comparaban con los pingüinos debido a su complexión rechoncha, su baja estatura y una nariz anormalmente larga y puntiaguda, además de una deformidad de nacimiento en sus manos que parecen más bien garras de 3 dedos enormes. Es pelirrojo, de ojos verdes y ojerosos, y posee una dentadura aserrada como parte de su lote de deformidades.

Descripción Psicológica: Pese a lo grotesco de su aspecto, Oswald es un caballero, aunque tiene brotes algo discrepantes con esta faceta de su ser, como causa de su traumática infancia, y en ocasiones se muestra violento y grosero. Es un hombre culto, sumamente inteligente, amante de las aves, y profundamente acomplejado físicamente, aunque trate de no flaquear por ello. A diferencia de la mayoría de villanos de Gotham, aunque se le encarcele en el asilo Arkham, Penguin no es un transtornado, y aunque prefiere liderar en la sombra peones para cometer sus crímenes, en ocasiones considera más profesional mancharse las manos en pos de un trabajo bien hecho. No tiene reparos a la hora de traicionar a sus aliados para salvar el pellejo, o de deshacerse de quien se interponga en sus planes. También es un mujeriego empedernido, que siempre va buscando la compañía de hermosas damas, sean de la calaña que sean.

Historia: Los Cobblepot eran una apoderada familia inglesa que había amasado su fortuna a base de robos de guante blanco, hasta que tuvieron que trasladarse a Estados unidos. Allí se establecieron en Gotham, una ciudad donde el crimen gozaba de cierta discreción, y tuvieron a sus hijos Jason, William, Robert, y al pequeño Oswald, que nació con atroces deformidades que le hicieron detestable incluso a su padre y hermanos. Tan sólo refugiado en el cariño incondicional de su madre, quién le inculcó su amor por las aves, ya que las criaba en un gran aviario en su mansión, Oswald fue cruelmente apodado “Pingüino” por sus compañeros de escuela, y sufrió acoso escolar en especial de un chico al que llamaban Sharky. Harto de las palizas y las burlas, decidió entrenarse en artes marciales y su madre contrató un sensei que le entrenó en judo y boxeo. En contra de todo pronóstico, el chico aprendió ambas disciplinas con eficiencia, y al fin pudo vengarse de sus acosadores. Sin embargo, Sharky y su pandilla lograron colarse en el patio de la mansión por la noche y mataron a todos los pájaros del aviario de la señora Cobblepot. Este fue un duro golpe para la mujer y para Oswald, que se sintió culpable por ello. Pero la tragedia familiar continuó, ya que poco después moría el patriarca de la familia de una grave neumonía que contrajo regresando de una reunión en un día lluvioso. Esto agravó la depresión que su esposa arrastraba desde el incidente con el aviario, y ésta empezó a adoptar costumbres excéntricas, como obligar a su hijo menor a llevar siempre un paraguas encima, lloviese o hiciera Sol. La fortuna familiar empezó a mermar, y los herederos Cobblepot empezaron a agobiarse con las excentricidades de su madre, y este estrés repercutía de forma directa sobre Oswald, que hastiado, planeó y llevó a cabo las “accidentales” muertes de sus hermanos, quedándose solo con su madre. Al crecer, se licenció en ornitología, y con el escaso presupuesto familiar, decidió realizar un viaje a oriente donde nutrirse de conocimientos sobre ingeniería. A su regreso, la situación de la familia era extremadamente precaria, y bajo el apodo que siempre odió, empezó a firmar sus primeros crímenes, siempre en lucha contra Batman y sus secuaces. Internó a su madre en un asilo, donde de vez en cuando la visitaba, hasta que tras su última reclusión en Arkham, ésta había fallecido, y Penguin decidió retirarse de la vida criminal activa, pasando a regentar un local nocturno conocido como Sala Iceberg, en la que reúne información y contactos criminales, y urde planes en la sombra. Sin embargo, a veces esa vida sedentaria resulta aburrida y decide enfrentar al murciélago una vez más, saliendo normalmente impune.

Poderes: Fuerza física notoria, nivel intelectual elevado, y diferentes habilidades según las herramientas de sus paragüas (Vuelo, armas de fuego, rayos láser, bombas, etc).

Habilidades: Buen Judoka y boxeador, gran estratega criminal con amplios contactos e información de todos los bajos fondos de Gotham, y conocimientos de ingeniería avanzados que le permiten la construcción y reparación de los innumerables gadgets de sus paraguas trucados. Posee un gran dominio sobre las aves gracias a sus estudios de ornitología. Es frío e insensible a la hora de castigar a quienes le decepcionan o aborrece.

Debilidades: Penguin es consciente de su elevada inteligencia, pero para su desgracia muchas veces esto le lleva a dejarse llevar por su ego, ignorando sus propias limitaciones, y es que aunque sea fuerte e inesperadamente ágil, nunca será rival para alguien de proporciones corrientes. También sus complejos físicos y su orgullo suelen ser motivo de descontrol de sus emociones, suponiendo una forma fácil de desconcentrarlo.

Equipo y recursos: Aparte de su local nocturno, la sala Iceberg, la mafia del Pingüino cuenta con delegaciones en diferentes ciudades, como Metrópolis. También cuenta con sus aves amaestradas para el combate y el robo, así como infinidad de paraguas equipados con ametralladoras, cuchillas, explosivos, cables, propulsores, hélices, etc…