101DianadeThemyscira
Insignia de Fidelidad :
Mensajes : 692 Fecha de inscripción : 23/05/2014 Localización : Trono de Themyscira, Atalaya. Humor : Hey, Amigos.
Ficha de Personaje Alias: Wonder Woman Nombre real: Diana Universo: DC Universe
| Tema: El golpe - [Autoconclusivo] 26th Agosto 2015, 02:26 | |
| 27 de febrero, 2019 Damasco, Siria. Palacio Teeshen. 9:30 pm, hora local
El ejercito estaba casi listo. Los grandes ciclopes estaban cargando sus piedras y catapultas, lo necesario para iniciar un asedio. Los pegasos estaban siendo recubiertos con las armaduras para monturas que Hefesto nos habia proporcionado, y las Hydras estaban siendo llevadas con cuidado a los trirremes. Ya habia diseñado la estrategia lo suficientemente rapido como para pasar de un ataque a otro y poder dar mi mensaje al mundo acerca de todo lo que era capaz. Simplemente, tenia que ultimar todo, para que mi plan resultase perfecto y no hubiese una intervencion innecesaria de gente que no tenia porque morir.
Estaba en mi Jet Invisible, volando a Damasco, cuando me puse a revisar la computadora del Jet. De manera remota, conecte mi usuario al de la Atalaya, justo como los controles necesitaban para activar las armas. Empece a buscar las entradas, para introducir mis codigos uno a uno, con las posiciones geograficas del Planeta que necesitaba para esta "mision". Me pregunte que habria pasado con Oliver, ojala lo hubiesen rescatado y no se hubiese ahogado al caer desde la Atalaya a la Tierra... En fin, no me interesaba ya lo que pasara con ese arquero. Tenia una cruzada que emprender, y esta mision no admitia errores. Cuando termine de marcar el primer punto, marque un codigo de activacion cronologica. En cinco horas, se activaria otro pulso igual sobre mi segundo objetivo, Chipre.
El primer punto marcado: Siria. El pais estaba delimitado por la propia computadora inteligente de la Atalaya que precisaba los calculos necesarios para no afectar nada que no fuese un objetivo: Marque la ciudad de Damasco... Y le di entrar. A lo lejos, desde el cristal de la cubierta del avion invisible, pude ver como se apagaban las luces una a una, hasta que el lugar se sumia en las tinieblas.
Habia soltado un Pulso Electromagnetico sobre Siria. La Atalaya tenia esa arma en caso de ser necesario colapsar un ejercito de robots, arrebatar una ciudad a algun tirano o algun supervillano que la hubiese conquistado, o como proteccion ante naves no identificadas. Sin embargo, la posibilidad de usarlo sobre un pais, gracias a su precision, fue uno de los grandes temores de la Liga. Los daños de un arma como esa eran... millonarios. La infraestructura civil que no contara con la proteccion, las plantas de energia, lineas de alta tension y todo tipo de generadores con aparatos electronicos se fundia. Basicamente, sumergia a la nacion en una oscuridad que tardaria varios meses, millones de millones de dolares en reparaciones... Y un gobierno caotico.
Aumente la velocidad del Jet, hasta llegar a la residencia presidencial. Las luces estaban apagadas, aunque parecia que podian mantener una provisional red de energia. Los sensores del avion marcaban actividad en cuanto a seguridad en torno al edificio, la guardia presidencial sellaba las puertas, mantenia la estructura vigilada... El tipo se tenia que atrincherar ante una emergencia de ese estilo hasta que hayan dado con la causa de lo que paso y dar un mensaje en nombre de su gabinete. Lastima que eso no iba a pasar.
Cuando me encontre a una altura lo suficientemente baja como para entrar quedar cerca del palacio, mantuve el avion en modo piloto automatico para que diese vueltas alrededor, mientras yo me encargaba de lo que hubiese abajo.
Abri la puerta del Jet y salte, para caer volando sobre el tejado de la residencia. No habia camaras, y aunque escuchaba la actividad de la gente moviendose, no sabrian bien contra quien estaban luchando. De una patada, abri un hueco en el tejado para entrar, cayendo sobre una especie de salon con grandes libreros, unos sillones y algunas pinturas de anteriores presidentes. Camine, entre la oscuridad, hacia las puertas, mientras me guiaba por mi oido hacia donde escuchase ruidos de los guardias.
Caminaba por los pasillos con sigilo, cubriendome contra la pared cada que escuchaba a un guardia pasar. Ellos no tenian linternas, ni siquiera celulares para alumbrar el lugar, por lo que andaban a ciegas con sus limitados sentidos. Por mi parte, solamente tenia que ser discreta, mientras seguia andando... Hasta que llegue a mi lugar. Era una especie de escalera tras un librero, a decir verdad, una escalera discreta. Baje por ella, y vi un gran porton de madera, sospechando que tambien tenia una cobertura de metal.
Al tocarlo, comprobe que estaba inclusive mas duro que la madera. Probablemente ahi hubiese un Bunker de emergencia... Cobarde. Los cobardes corren a sus madrigueras, como ratas huyendo de un cazador, porque sabian que eran una presa facil para quien pudiese darles caza. Suspire, mire la puerta, y empece a darle varias patadas. Una, dos, tres. La puerta empezaba a abollarse, hundiendo el metal hacia atras. Empece a golpear con el puño, mientras sentia como cedia poco a poco. Del otro lado se escuchaba muy poco, pero probablemente ya estuviesen alerta para lo que podia venir.
Entre varios golpes y patadas, la puerta cedio. Un ultimo puñetazo avento la puerta contra una gran mesa y pude entrar en una sala iluminada a duras penas con lamparas de emergencia, de esas que mantienes en barras. Ahi estaba, el Presidente sirio, y gran parte de su guardia presidencial. Apenas me vieron entrar empezaron a disparar, pero pude detener las balas con mis brazaletes.
-¡Idiotas! -Mencione en arabe- ¿Creen que van a detener lo que este mundo va a ver? -Mencione mientras avanzaba entre disparos que paraba con mis brazaletes, gracias a mis grandes reflejos. Desenvaine mi espada y se la clave en el pecho a uno de los guardias, mientras el Presidente huia, tratando de pegarse a la pared. Habia seis guardias, y al morir el primero, aumentaron sus disparos... Hasta que tuvieron que recargar. En ese momento, salte hacia uno, derribandolo con una barrida en las piernas. Al caer, clave mi espada en su cuello, atravesandolo como al cerdo machista que era. -¡Mueran, mueran! -Pase de uno en uno, clavando mi espada en sus organos vitales, cortandole la cabeza a otro, hasta que cayo el ultimo. El presidente tomo una pistola, mientras me apuntaba balbuceante. -¡Dejame, maldita loca! ¡Vete de aqui, demonio! ¡No vas a matarme! -Disparo un par de veces, balas que pude detener facilmente. Sonrei, y me puse frente a el, tomandolo del pecho de la camisa. -No te voy a matar. Ahora. Aun tienes un mensaje que dar al mundo.
Le di un golpe con un poco menos de fuerza en la cara para noquearlo y me lo eche al hombro como si fuera un paquete.
Despues de eso, sali de la residencia hacia mi Jet que volaba en el aire para volver a Themyscira y dar la orden final. _________________ Color del dialogo: "blueviolet" | |
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