Casting Tim Drake.

La mañana le sorprendió delante del ordenador. Hombros cargados, vista cansada y la espalda convertida en un nudo imposible. Era uno de esas noches (más bien día a esas alturas) en las que el trabajo le absorbe tanto que hace perder un poco la noción del tiempo. Llevaba unos días siguiéndole la pista a una organización algo sospechosa y hasta ahora no tenía más información que la básica. Un par de chanchullos con drogas, prostitutas y armas. Lo más cercano a lo típico que podía encontrar en ese trabajo. El problema es que estaba seguro que se traían entre manos algo más grande, mucho más grande, pero no sabía exactamente el que. Y le estaba costando más amaneceres en vela de los que le gustaría. Pero no tenía mucha más opción hasta que encontrara esa pieza que hiciera encajar el puzzle por completo.

Esperaba no tardar mucho.

Por ahora la única opción que le quedaba era descansar algo, ya que la vista empezaba a resentírsele por culpa de la pantalla y empezaba desconcentrarse del trabajo. No podía permitirse fallar ahora cuando le quedaba mucho por delante. Uniendo punto a punto se iba a aclarando un poco la historia, pero seguía teniendo demasiados puntos inconexos que no llevaban a ningún lado y le impedían continuar. Por el momento tenía la información sobre una droga con la que estaban experimentando, pero solo eso. No era ninguna conocida y poco había encontrado de los componentes. También desconocía el efecto exacto en las personas. Hasta el momento lo único que se había encontrado eran cadáveres con síntomas muy extraños para ser de alguna droga conocida, claro. Aumento de masa muscular de forma brusca, niveles de testosterona y adrenalina muy altos, y una aparente violencia extrema en intervalos muy cortos desde su consumo que acababan con una muerte repentina.

Era demasiado arriesgar poner una droga así en la calle cuando lo no iban a conseguir drogadictos adictos sino tan solo muertos. No era rentable en el sentido que buscan los traficantes. Por mucho que gran parte de las veces las sustancias que usaban se mezclaban al máximo para conseguir más producto a pesar de la calidad y consecuencias. Para un negocio así era más inteligente tener un mínimo de calidad para mantener una clientela fija y algo de reputación que pusiera su producto por encima de otro.  Una droga para enganchar para de esa forma tener un número de ingresos estables… y a partir de ahí…

Suspiro llevándose la taza a los labios y cuando quiso darse cuenta acababa de darle un trago al café frió que tenía en la encimera de la cocina. Se había perdido un poco entre teorías y pensamientos en otro intento de organizar lo que conocía para ver por donde investigar. Si se ponía a tomar café ahora poco iba a dormir (a pesar de cada vez ser más inmune a la cafeína para su desgracia). Necesitaba un par de horas de sueño para despejarse y volver a la carga.

Sus botas terminaron en un rincón del cuarto junto con parte del traje. Solo se molesto en ponerse una camiseta vieja para dormir, una que Kon le presto para dormir un día y que finalmente nunca había vuelto a su dueño. Su mente seguía trabajando incluso cuando solo quería agonizar un poco en la cama y en momentos así se maldecía un poco por no ser capaz de desconectar.

También maldecía un poco a Gotham y su continua atracción hacia todo lo malo.