Ha llegado el momento [9-5-2019] (autoconclusivo)

- Erik, tenemos que hacer algo ¡ya!.

- Mística, por favor, relajate ¿crees de verdad que he permanecido ocioso todos estos años?

Ella no era la misma mutante que había conocido en su dimensión, para empezar era mucho más joven, para seguir se había criado con su... amigo, por llamarlo de algún modo, Charles, a raíz de eso esta joven era mucho mas confiada y ciertamente mejor persona, pero seguía estando dispuesta a darlo todo por su causa, algo que ya le había demostrado en repetidas ocasiones, muchos en la isla pensaban que había una relación entre ellos pero eso era imposible para Max, él la veía casi como a una hija, a ella y a la mayoría de mutantes de Genosha en realidad.


- No hija mía, no he estado ocioso, sabes que jamás permitiría que nuestro pueblo sufriera sin tratar de impedirlo, sabes que derramare hasta mi última gota de sangre si fuese necesario.

- Entonces ¡¿por qué no estamos haciendo nada padre?!

La primera vez que se vieron en este universo ella le llamó así, padre, ni siquiera sabía si eso era cierto, al principio creyó que era solo una forma de hablar pero con el tiempo le gustó la sensación y ahora... ahora tenía miedo de comprobarlo, realmente sentía que Mística era su hija, igual que lo habían sido Pietro y Wanda, igual que lo había sido Polaris, mucho los había buscado en este universo, a los dos primeros aún los buscaba a Polaris ya no era necesario, la encontró poco después de llegar a este nuevo mundo, e hizo pagar con creces a quienes la habían asesinado... Nazis, la mayoría de gobiernos seguían siéndolo, pero algunos se esforzaban más en ocultarlo que otros.

- Concedeme al menos el beneficio de la duda Raven, querida, desde que supe por primera vez de Lex Luthor empecé a prepararme, esto es solo la consecuencia lógica de sus acciones, su odio a todo lo que es diferente está anclado muy dentro de él, es solo humano pero no le subestimo hija mía, si permito que todo este circo continúe es porque lo necesitamos, Max hizo una pausa y la tomo de los hombros, y estoy seguro de que comprendes por que es así, el contacto físico aunque efímero tuvo el efecto deseado, Mística se relajó un poco y Magneto caminó hacia el ventanal de su despacho.

- Durante estos años he estado preparando Genosha para el éxodo que se avecina, debemos dejar que los países presionen a los mutantes que viven fuera de nuestro hogar, cuando esa presión llegue al límite, cuando esté a punto de estallar, abriremos las puertas de Genosha y les ofreceremos refugio a todas las almas que quieran huir del conflicto, a todos aquellos que estén dispuestos a seguir nuestras normas, nuestra moral, y después descargaremos nuestra ira en todo su esplendor sobre Luthor y sus seguidores.

- Pero Erik, están desarrollando su versión de los centinelas, están reclutando mutantes y otras personas con poderes ¿como vamos a detenerlos?

- Esas alianzas que está forjando son mas superficiales de lo que crees hija mía, muchos de ellos le abandonarán en cuanto empiece la lucha, otros lo harán cuando contraataquemos, cuando Drago sea condenado, y ten por seguro que recibirá una condena ejemplar, cuando nuestro pueblo vea como se manipula la justicia para castigarnos, entonces apareceremos para liberarlo, para dar un mensaje a los humanos, el homo superior no se doblegará.

La última vez que se había encontrado con Eclipse no estaba en su mejor momento, había dado un tiempo a los estudiantes de Xavier para decidir que hacer, pero justo antes de ir hacia allí recibió el aviso de que habían encontrado a Polaris, no sabía como había llegado allí pero al parecer estaba prisionera en un centro de investigación chino, pero cuando llegaron allí era tarde, aún podía sentir el cuerpo de su hija enfriándose en sus brazos, aún podía oír los gritos de los hombres y mujeres que trabajaban allí cuando encontró el cuerpo, aún podía sentir cada molécula de metal que descuartizó todo el lugar, el gobierno chino ni siquiera había averiguado aún que es lo que había pasado allí, no había restos que investigar, el Magneto que vio Drago al día siguiente era un hombre cansado y furioso con el corazón lleno de odio.

- Se que es difícil hija mía, pero debemos esperar aún unos días más, te prometo que muy pronto estaremos listos, de hecho te había llamado para que fueras a Estados Unidos, quiero que hables con el abogado de Drago y le des un mensaje.