Sobre ruedas (Bart Allen y Roxanne Illios)[7/03/2019]

Parecía que la joven dragona se pasaba la vida viajando de un lugar a otro… y así era. Esta vez se había trasladado hasta Washington D.C. lugar de nacimiento de Jeremiah, y básicamente de toda su familia, tenía una hermana mayor y tres hermanos, no tenían mucho contacto pero se reunían siempre que era el cumpleaños de su madre. Ellos no sabían mucho de Jeremiah, solo que ahora trabaja de mayordomo para la familia Illios y que la hija de los “señores” le acompañaría en el viaje. Roxxy siempre pensaba que la familia de Jeremiah era muy interesante, el le contó que su madre de joven había conocido a Marthin Luther King Jr. y que había estado con él en una manifestación, la pobre señora ahora solo asentía para confirmar la historia, sin decir palabra.

Llegaron a la casa familiar, era grande pero porque antes sí que habían tenido más dinero pero que, según le contó Jeremiah, malas decisiones arruinaron a su familia y cada uno se tuvo que poner a trabajar a una muy temprana edad, perdiendo así poco a poco el contacto. Cuando llegaron, sus hermanos se sorprendieron de ver a la joven muchacha cargando con sus propias maletas, pensaban que al ser una niña rica haria cargar a su hermano con todo el equipaje, pero no y se sorprendieron más cuando ya estaba en la casa, se esperaban a una niña que se quejase todo el rato, que no hablase con nadie, que solo estuviera con su móvil y que quisiera irse nada más entrar por la puerta, pero en cambio se encontraron a una jovencita que hablo con todo el mundo, que les sonreía mientras les preguntaba que era de su vida, que ayudó en la cocina y que luego ayudó a limpiar los platos, se quedaron muy sorprendidos y se sintieron mejor sabiendo que su hermano estaba en una casa con gente tan amable y atenta.

Se hizo una pequeña fiesta de cumpleaños, cortaron tarta e incluso cantaron canciones, Roxxy no sabía que Jeremiah se le daba tan bien cantar. Por la noche cuando todo acabó, salió al porche y se sentó en un banco de madera que habia ahi puesto, Jeremiah salió con una cerveza en la mano, se lanzaron una sonrisa, se sentó a su lado y simplemente se quedaron callados mirando el cielo nocturno hasta que volvieron a dentro para irse a dormir.

Se levantó muy temprano, tanto que no había nadie despierto, así que se puso la ropa mas comoda que llevaba; unos pantalones de fitness grises y un sujetador deportivo, o en su caso un “sujetanada” “¡Hey!... jo”, de color negro con unas zapatilla deportivas y salió a correr un poco.

No tardó en llegar al estadio RFK, aunque llegó con un poco de sudor encima, y miró el estadio desde fuera, era muy grande. Pero eso no llamó su atención tanto como lo hizo el skate park que vio desde lejos, pudo ver a unas pocas personas penso que seria por la hora, demasiado temprano para muchas personas. Se acercó lentamente mirando a la poca gente que se encontraban a esa hora, aunque no pudo reconocer a nadie de momento.

Le gustaría coger un skateboard o unos patines y hacer lo que ellos hacían, el problema es que si se montaba en un skate lo rompería al instante y lo mismo en unos patines, las ruedas se doblarian y se caerían. Además si un skater se caía lo único de lo que tendría que preocuparse era de hacerse daño, Roxxy se tenia que preocupar de si hacia un agujero en el suelo con la cabeza. Sería mejor quedarse a mirar en vez de actuar, esperaba no ser una molestia para los skaters, que ella supiera no conocia a nadie de los que ahi se encontraba, tampoco es que hubiese examinado sus caras, pero desde lejos parecian ser simples desconocidos.

Seguía mirando mientras se acercaba un poco mas y mas, le resultaba muy bonito ver a gente haciendo maniobras con un skate, o puede que simplemente fuera por el simple hecho de que ella no puede hacerlo, que le resultase tan “impresionante” ver a alguien hacer una maniobra con un objeto tan pequeño y “frágil”, ella no podía ni montarse en un caballo sin que el pobre tuviera que esforzarse todo lo posible para moverse así que se entendía que ella pensase que los skates son frágiles cuando en realidad no lo son.

Claro que un golpe fuerte podría partirlo, pero las personas que estaban dispuestas a despertarse tan temprano para ir al skatepark eran lo suficientemente buenos como para no darse ningún golpe o romper su skate, así que ella siguió mirando a los skater, aunque ellos estaban demasiado concentrados en hacer sus ejercicios como para ver a la joven.

Pero ella sí que vio a uno, se centró en él porque había dejado de estar con el skate y se había sacado un zumo de la mochila, no podía saber de que era desde tan lejos pero tan solo ver el zumo hizo que su estómago rugiera, no había cogido nada para desayunar y su estómago de dragona le pedía comida. Al igual que con el zumo, no podía ver la cara de Bart por lo que no pudo reconocerle y se acercó con tranquilidad

-¡Hola!- Le saludo con su característica energía, incluso le saludó moviendo la mano con entusiasmo -¿Eres skater?

Seguía mirando hacía el frente, donde estaban los otros skaters haciendo sus cosas y justo entonces le volvió a sonar el estomago, ella lo sintió pero espero que no fuese tan fuerte como para que el chico con el que estaba hablando lo escuchara. Tampoco sabia como reaccionaria a que una extraña le empezase a hablar así de la nada, pero como era tan positiva esperaba que le diese conversación, le miró entonces a la cara al fin

-A mi tambien me gus…taria- se le quedó mirando un momento, su cerebro estaba trabajando -… ¿Te he visto antes? Me suenas de algo

Estaba casi segura de que le había visto antes, ¿A lo mejor dando de comer en el comedor social en San Francisco? No, de eso no era pero entonces de que le resultaba familiar este chico… ¿Era un famoso o algo parecido? No, si no no estaría en un skatepark solo sabiendo que si alguien le reconocería le empezarian a asaltar los fans, o a lo mejor era una simple coincidencia y se parecía a alguien que ella había conocido, pero por ahora no conseguía atar los cables, el chico tenía una cara bonita a lo mejor era un modelo que había visto en una revista, ella no le costaba confesar que tenía revistas de ropa de hombres solo para ver a los modelos, estaba en esa edad en la que no le importaba alguna que otra cara bonita, pero claro está tampoco era el joven tan tan guapo como para trabajar de modelo… Roxxy no sabía ya ni en qué estaba pensando, la falta de comida afectaba a su pensamiento ya que intentaba no pensar en comida, en pollos asados, en ensaladas gigantes con extra de tomate... no, tenia que concentrarse en averiguar el porque le resultaba familiar ese chico.

Genial, el joven no se asustó por su saludo tan repentino ni le había respondido con un simple “Hola” para luego dejar de hablarle, con dos palabras que dirigiera ya le daba a Roxxy para empezar una conversación con él, asumió, joven skater. Cuando ya estuvo suficientemente cerca de el noto en su aliento un leve olor a zumo de piña, no era muy fuerte pero si lo suficiente como para saber que el zumo que se había tomado era de ese sabor, que bien ahora se imaginaba piñas gigantes.

Su asunción pareció dar en el clavo cuando el joven le confesó que era skater, a lo mejor el le podria enseñar a hacer… a no, que no podía por su peso. Bueno, tambien podia encargar a alguien que le hiciera una tabla de metal que soporte su peso, asi podria hacer las maniobras que los otros skaters podían hacer, pero ahora mismo no podía hacer nada salvo mirar y preguntar por cosas.

Y al parecer el sonido producido por su estómago no fue pasado desapercibido por el joven, al cual aún no había ni preguntado el nombre, vamos que ella ni se había presentado, el cual le tendió una barrita a Roxxy, fue a cogerla pero entonces su dedos temblaron y echó la mano para atrás, mirando a Bart con un “sentimiento de culpa” que en realidad era porque estaba aceptando comida de un desconocido y no sabía su situación económica, ella tenía dinero y se podía aguantar estar sin comer un rato

-Gracias, pero creo que pod..re agunatar...

Ni siquiera ella sabe que es lo que dijo al final de esa frase cuando cogio la barrita de la mano de Bart con suma rapidez, le quitó el envoltorio y se la metió entera en la boca, luego volvió a mirar al chico con una mirada propia de un perrito que ha hecho algo malo y quiere que su dueño le perdone, aunque ella no habia hecho nada malo en si, para ella si que habia estado mal comerse la comida ofrecida por alguien sabiendo que ella puede comprarse lo que quiera

-Gracias, soy Roxanne Illios por cierto, pero me puedes llamar Roxxy

Le sonrió de oreja a oreja, la barrita no era mucho, de hecho no era nada para su estómago de dragona, pero al menos se había quitado la gusa de encima y ahora se encontraba mejor. Ahora él respondió a lo de que si se habían visto antes, su respuesta fue negativa pero en su cabeza Roxxy seguía intentando averiguar el porque le resultaba tan familiar.

Mientras el joven le decía que lo intentara y ella se preparaba para decirle que no podía, a uno de los skaters que estaba haciendo ejercicios se le escapó el skate  y acabó rodando hasta donde estaban los dos jóvenes, Roxxy lo cogió, espero a que viniese el hombre a por él y entonces fue cuando lo vio. En la parte de abajo del skate el hombre había escrito un nombre, supuestamente el suyo, que le fue muy familiar a la chica… “Tyler” y no, no era por el streamer, era por el chico que le engañó hace ya tiempo

-Tu… ¡Tu eres aquel chico!- le cogió de la mano con la suficiente fuerza como para sentirla pero no con la suficiente fuerza como para rompersela -¡Me engañaste! ¡Me emborrachaste! Y…- se acordó de atender al funeral del pobre Marthin, aun recordaba su nombre y tenía una foto suya que le dejó su familia en su habitación como recuerdo -Mataste a un hombre… Dime ¿¡Te has arrepentido o sigues siendo igual de malo!? Sin engaños

Curiosamente después de todo lo que el clon malvado de Bart le había hecho sufrir, la muerte de una persona, que la policía la acusara a ella incluso aunque eso se soluciono fácilmente al descubrir que ella también tenía heridas de taser, seguía teniendo una pizca de confianza en él y pensaba que a lo mejor tras todo este tiempo habría podido cambiar… si no, a lo mejor tendría que llamar a la policía pero fue entonces cuando recordó que tenía poderes, el de teletransportarse o algo asi, asi que decidio que no le soltaría la mano en ningun momento.

Se encontraba en una situación que no le gustaba para nada. Pensaba que había encontrado a un chico agradable con el que hablar, pero al parecer era ese mismo chico que tiempo atrás le electrocuto, le quiso hacer quedar como ladrona y mató a un pobre hombre, pero la mirada del chico parecía extrañada… pero ¿Y si era él otra vez engañandola? Intentaba confiar en él, pero después de lo que le hizo…

Le dijo su nombre, claro que como ya era la segunda vez que le había dicho su nombre pensó que podría ser otra mentira, así que decidió no usar ni “Tyler” ni “Bart” por lo menos de momento. Seguía diciendo que no se conocían y que él no era el perpetrador de los crímenes de los que Roxxy le acusaba, pero esa cara… si, sin duda alguna era él, no cabía otra cosa y al intentar negarlo dejaba pensar a la dragona que le estaba volviendo a intentar a engañar.

Y luego le pidió que le soltara, cosa que obviamente no hizo por si acaso, y otras preguntas mas que tambien daban a entender que el chico pensaba que Roxanne era más joven de lo que en realidad era, tampoco es que le molestase demasiado ya que la gente le solía confundir con una niña, pero pensaba que tenía que darle el dato de su verdadera edad

-Tengo 17 años, y no he perdido a mis pap… padres, ni estoy en una "institución"

Casi soltó “papis” y eso no hubiese ayudado mucho en esta situación, el negaba que fuera él quien le hizo daño, pero es que ella seguía estando segura de que era él… o no, empezaba a tener dudas. Si fuera el ya hubiese escapado, o peor, le hubiese hecho algo pero en cambio estaba ahí quieto y parecía querer ayudarla de verdad, ahora se encontraba en un dilema.

Decidió soltar su mano e iba a dar un paso para atrás pero al final se quedó junto a él, mostrando que confiaba en el. Le miro directamente a los ojos, por mucho que lo intentara seguía viendo en él la misma cara de Tyler, el problema no era que él le hubiese hecho daño a ella, lo malo era la muerte de Marthin… un asesinato era algo muy grave, Roxxy pensaba que el asesinato era el peor crimen de todos y ese chico había matado a una persona inocente

-Tu.... Si no fuiste tu, fue alguien identico a ti…un gemelo malvado o algo asi…

Sonaba a sinopsis de peli mala de espías, en la que el malo resultaba ser el gemelo malvado, pero es que ya no tenía otra idea. Dio unos paso y se acerco aun mas a Bart, tanto que se puso cara a cara con él y le miró fijamente, pudiendo el ver sus dorados ojos que miraban su cara. Definitivo; o era él o su gemelo, no había otra, se apartó de su cara.

-A mi nadie me hizo daño- refiriéndose con esto a que no le había hecho mucho daño físico ni mental, una descarga era soportable -… a Marthin sí, el pobre camarero que asesinast… fue asesinado por alguien muy parecido a mi

Una lagrima se escapo de los ojos de Roxanne que recorrió su mejilla, no conoció a Marthin para nada, solo lo conocía de ser el camarero que le atendió, pero eso no le impedía sentir tristeza por su muerte. Ya no sabia que hacer, ni que pensar… si no era el… no, no podía ser de otra forma… ¿La estaba engañando para salirse otra vez con la suya? ¿Estaba haciendo bien en confiar en el? Esperaba que si, esperaba que de verdad fuese algo como lo del gemelo si no… aún podría hacerle cambiar, hacerle mejor persona… quedaba esperar la respuesta del chico

-¿De… de verdad que te llamas Bart?- le pregunto, mientras se secaba las lagrimillas que se le habían escapado -Por fa… no me mientas

Ya era algo normal, casi como  un cliché, que la gente confundiera a Roxanne con una niña o por lo menos con una chica más joven de lo que era, al verla lo primero que piensa todo el mundo no es “Anda, una joven adolescente” y ya se estaba acostumbrado a esto, por lo que aceptó la rápida disculpa del velocista, o según ella del “teleportista” y paso de ese tema, había otros más importantes que tomar.

Al parecer no tenia ningun hermano y mucho menos un gemelo, hijo único como ella por lo que la idea del gemelo malvado se había desvanecido, también quiso aclarar el joven que nadie en su familia haría ese tipo de cosas, Roxxy tambien sabia que nadie de su propia familia haria algo asi… aunque no sabía en qué trabaja su madre, pero era rica así que en su mente pensaba que seria algo bueno… si, lo de pensar mal no es lo suyo.

Noto el cambio en la mirada de Bart, es la misma mirada que ponía ella mirándose en el espejo cuando de pequeña se sacaba los dientes de leche que ya estaban colgando, era la cara de haberte dado cuenta de algo, en el caso de Roxxy era que los dientes se podían sacar con un simple tirón, y en el de Bart era que el ya tenia una idea de quien era el responsable de lo que le contaba la dragona.

Y le dio un nombre, “Thaddeus Thawne” ¿Que clase de nombre era ese? Pero supuso que decía la verdad, ya que aunque le había dicho que se llamaba Tyler su comportamiento en la cafeteria, sobretodo al final, le dio a entender que le había dicho un nombre falso, entonces Thaddeus sería su verdadero nombre. Lo malo es que eso no aclaraba nada de porque se parecía tanto a Bart si el ya había dicho que era hijo único.

Le pregunto cuánto tiempo hacía desde que pasó lo que ella le había contando, siendo sincera no se acordaba de la fecha exacta pero sí que fue hace mucho tiempo, esa era una de las razones de porque no le había reconocido al principio, esa y que él parecía tener una cara un poquito más mayor, pero eran diferencias mínimas.

-Pues… creo que el tema fue hace mucho, yo diria hace casi un año, si me acordara de la fecha exacta te la diría

La policía seguramente si tenían en un archivo o algo así todas las pruebas y el dia exacto de lo sucedido, incluso minuto y hora… pero la memoria de Roxxy no era tan potente como para recordar todo eso. Le había preguntado eso porque según él, estaba ya arrestado y si hacía poco de eso significaba que estaba suelto de nuevo.

-Solo me acuerdo de que fue hace mucho, y que era igualito a ti… ¿Y porque? Si no es tu gemelo ¿Que Quien es?

Ya estaba empezando a tener un tono más calmado con bart, habiendo confirmado que no era él quien asesinó a Marthin se había quedado más tranquila y segura con el joven… que rápido cambian las cosas. El confirmo esto enseñándole su carnet de estudiante con su nombre, claro que Roxxy no tenía en mente que los carnet se podían falsificar así que para ella esto fue la prueba definitiva

-Te creo- le sonrió, pero entonces se dio cuenta de todo lo que le debía de haber hecho pasar, con la acusación y todo eso, se sonrojo por la verguenza -Perdon por… esto, yo de verdad pensaba que… lo siento

Se tapó la cara con las manos, pero se las abrió poco a poco para volver a mirar a Bart, se sentía mal pero ahora tenia interes por saber quién era ese tal Thaddeus y porque actuaba de esa manera, esperaba que el velocista le diese la respuesta a esta duda.

Todo se había solucionado, bueno eso no era del todo cierto pero si, se podría decir que medianamente estaba todo ya solventado, por la expresión de alivio que soltó Bart, pudo deducir que ese tal Thaddeus estaba ya en la cárcel, entonces genial. Aunque esperaba que pudiera reformarse, siempre había que esperar lo mejor de los demás

-Bueno, espero que se pueda reformar en la cárcel, a veces un mal corazón solo necesita una sonrisa calidad

Le sonrió de oreja a oreja, no cabia duda de que a pesar de saber lo que Thadd había hecho, bueno lo que ella sabía que era el asesinato de Marthin, seguía teniendo fe en que podía cambiar y ser mejor persona, todos tenemos un lado bueno solo que algunos lo tenemos muy pero que muy en el fondo.

Paso ahora a explicarle de dónde había salido Thadd, al parecer era un “niño de laboratorio” que se había creado su abuelo por una pelea, vamos que en algunas familias se dejan de hablar, en otras se crean un hijo nuevo, lo típico. Aunque todo eso le sonaba muy raro, su familia tenía que ser o muy rica o algo para que el Abuelo pudiera hacer eso… había un agujero argumental en todo esto.

-Sí, y yo que pensaba que la mia era muy compleja

Se rió un poco después de esto, aunque comparando lo que Bart le había contado de la suya con su abuelo, con lo de su madre dragona y todo eso… no sabia cual era más enrevesada. Tampoco es que fuese esto una competición o algo asi, pero sentía curiosidad por saber cómo era la familia de Bart… pero eso ya si seguía hacia delante la conversación.

Si que se había apresurado con las conclusiones, pero Bart tenía que entenderla; no solo el y Thadd eran prácticamente iguales, si no que cuando conoció a Thadd le dio un nombre falso, la trato bien y se hizo pasar por un buen chico… para ella, estaba volviendo a hacer lo mismo. Menos mal que resulto no ser asi

-Lo siento- Agacho la cabeza -Pero es que sois prácticamente igu… iguales

Se le quedó mirando fijamente, entrecerró los ojos un poco haciendo ver que estaba pensando, y en un segundo se le volvieron a abrir de par en par, puso la palma hacia arriba y chocó su propio puño en ella, dando a entender que se había dado cuenta de algo de una forma, todo sea dicho, bastante graciosa

-Tu debes de tener poderes ¿No?- volvio a poner sus manos en una pose mas normal, después de ese gesto tan “extravagante” -El podia… teletransportarse o algo asi, si uso adn de tu familia, significa que tenéis poderes ¿No?

Su cerebro había unido hilos, si usando el adn de una familia te salia un niño con superpoderes, significa que o alguien, o toda la familia, tiene poderes. Aunque tambien esta la opcion de que le había añadido el mismo los poderes, pero era más divertido imaginarse lo primero

La conversación ahora giraba entorno a la familia de Bart, más concretamente en Thadd que aunque no era familia de Bart tenía el adn de esta, así que se podría decir que era familia pero no, si, sonaba muy raro, pero es que la situación era rara ya de por si. Aunque el dijera que no son iguales, lo cual era verdad porque de lo poco que conocía a Bart el si parecía buena persona, no como Thadd, si que eran iguales físicamente o al menos casi iguales, si que se acordaba de que Ty Thadd parecía más joven que el velocista que tenía frente a él.

Desapareció ese pensamiento de su mente cuando le dio respuesta a la pregunta que le había formulado, que se puede decir que fue demasiado directa, pero que la había enunciado con buena fe y con el simple hecho de la curiosidad, si le decía que él tenía superpoderes bien, si le decía que no, pues bien también, no es que fuera a cambiar su opinión de el una u otra cosa.

Y claro, le dijo que no tenía poderes. Tomo su palabra y confío en él, si decía que no es que era que no. Justifico esto diciendo que él había sido modificado genéticamente para tener esos poderes, vamos que cuando estaba en una probeta le habían inyectado de todo para hacerlo mejor, o en este caso peor.

Ahora le tocaba el turno de preguntar a él, y la cuestión fue que si ella entendía de lo que estaba hablando, de los conceptos de la genética. Por un momento se quedó callada, parecía que iba a decir un rotundo no pero en vez de eso, le sonrió

-Tengo una idea muy básica de todo, pero creo que mas o menos lo entiendo. Entonces el gen que le da poderes se lo dieron cuando lo crearon ¿No?

La enseñanza que recibía Roxxy era muy libre, lo que básicamente le permitía estudiar cosas que a su edad serían impensables en los institutos, pero como ella lo hacía en su cara era libre de elegir estudiar lo que más le gustaba y tenía varios temas de estudio que le fascinaban. Claro que para luego tener un trabajo si que tendría que sacarse un título por lo menos, aunque su padre le decía que ella podría  heredar el trabajo de su madre… a saber que era.

Lo que le había dicho era verdad, tenía una idea muy básica y se podía equivocar, pero si le hablaban de adn o de… bueno, de genética en general, no se iba a perder. Por ejemplo, lo de los genes dominantes podía poner el ejemplo de Jeremiah, el era super alto mientras que su madre es muy bajita, asi que supone que el gen de su padre, que tendría que ser alto, fue el gen dominante.

Pero era todo muy básica. Entonces se volvió a fijar en la tabla de Skate de Bart y se acordó de porque se había acercado a hablarle

-¡Casi se me olvida! Quería verte con el skate

Puso sus manos en su espalda y entrelazo sus dedos, inclinándose hacia Bart para mirarlo a los ojos con una sonrisa, eso de espacio personal para Roxxy era un cuento chino

-¿Sabes hacer trucos? ¿Puedo verlos? Por fa...

Con ojos de perrito formuló esa pregunta, le encantaría poder ver a Bart hacer alguna maniobra con el Skate, aunque había otras personas en el skatepark pero como se había fijado en él… pues le había tocado.  También podía negarse, claro está, pero esperaba que no lo hiciera, que si no tendría que volverse cabizbaja “Y además nos quedamos sin tema, que veintipico son muchas pero doce son pocas… ¿Son doces?.... ¿Estoy alargando esto mucho?”

Si antes todo se había centrado en Thadd y en si Bart tenía poderes, ahora poco a poco la situación estaba apuntando más hacia el tema con el que había entrado a hablarle; el Skateboarding, algo que ella quería probar pero que seguramente no podría.

Le enseño la tabla, con la intención de que la cogiera y fuera ella quien intentase hacer esas maniobras, probarlo para ver cómo se sentía. La tomó en sus manos y la miró, el dibujo le gusto mucho, preguntándose si el dibujo era suyo propio o ya venia con la tabla

-Como mola ¿La has personalizado tu?- le preguno eso pero al segundo negó con la cabeza muy rápido y le devolvió el Skate -No me fio de darle un golpe o romperla, mejor usala tu

La excusa de que tenía miedo de hacerle daño a la tabla le servía para enmascarar, de momento, su peso, aunque era verdad eso de que no quería romperle la tabla, la gente le solía pillar cariño a este tipo de cosas. Se puso a su lado y le sonrió de forma amable

-Pero me puedes enseñar y cuando tenga yo una propia, lo puedo intentar yo solita…. O puedo encargar una con mi movil

No estaba muy segura, pero puede que en Amazon o en algun sitio asi alguien estuviese vendiendo una tabla de Skate de metal, un material que a lo mejor aguantaria más el peso de Roxanne que la madera, y como tenia Amazon Prime, se lo podrían traer con un dron. O si no, podría encargar a alguien que le hiciera una aunque eso si que tardaría más tiempo, lo malo de pesar tanto que no puedes ni subirte a un coche.

-Voy a buscar un segundo ¿No te importa, verdad?

No tardó mucho en encontrar una tabla de hierro reforzado, alguien la había hecho por un video, segun decia la pagina, y ahora la vendía porque necesitaba el dinero, unos ricos dos mil dólares. Claro que a ella no le importó pagar eso, y gracias a que a final no lo compro en Amazon si no en la propia página de su creador, la tendría ese mismo dia. Lo malo, es que sería por la noche y que claro, seguramente no aguanaria su peso ya que aunque era reforzado, no era lo suficiente como para aguantar dos toneladas... pero ella no sabia eso.

-Jo, me llega por la noche… Bueno, puedo aprender de ti y luego intentarlo yo ¿No?

Le dio un empujoncito en la espalda con la mano, muy suave para que le incitara a moverse hacia la pista, algo que ella hizo de forma alegre, casi dando saltos. Le agradaba la idea de verle hacer trucos y aprender de él.

-Y si quieres podemos volver a vernos y te enseño lo que he aprendido ¿Eres de aqui o estas de visita?

Le pregunto esto porque no estaba segura de que fuera de ahí o no, aunque ella tampoco es que pareciera un turista, bueno ella nunca parecía un turista haya adonde fuese por no solo ser igual de amable y feliz con todo el mundo, si no por su capacidad de hablar y entender todos los idiomas humanos, se podía ir a japón que no le costaba moverse por la ciudad. Era una ventaja hasta que te preguntaban cómo sabías hablar “x” idioma y ella no sabia que decir, ser superdotada era la respuesta que siempre daban sus padres cuando de viaje sucedia esta situación, ya que ella cuando más le preguntes sobre sus “habilidades” más probabilidades tiene de soltarte algo que no debería haber dicho, lo que estaba pasando ahora con Bart. Había conseguido evitar el tema de que ella usara la tabla del chico porque sabía que nada más hacerlo se partiría, pero si le preguntaba más puede que se le escapase eso de pesar dos toneladas.

El trabajo que había hecho Bart con la tabla le impresionó, le parecía muy bonito eso de que a la gente le gustase pintar o crear cualquier forma de arte, ella pintaba pero solo garabatos, aun así sabía que era un “hobby” entretenido, y con lo bien que le había quedado la tabla el joven podría dedicarse a esto si él quisiera.

-Wow- sus ojos brillaron, mirando a Bart, y le sonrió -Si algun dia tengo algo que pueda personalizar, te llamaré

Claro que no lo decía en serio ¿Oh si?. Se le quedó mirando un momento, perpleja, ya que él seguramente pensaba que podría arreglar un daño como el de un golpe, lo que el no sabia es que Roxxy nada más poner un pie en la tabla, esta sería destruida como si estuviese hecha de plastilina.

Ahora era un choque de dos jóvenes con personalidades, aunque diferentes en algunas cosas, parecidas en otras. Y a ambos cuando se les metia algo en la cabeza, no se les iba hasta conseguir eso que quieren, menos mal que Roxxy, de el no sabia, las cosas que quería normalmente era ayudar a los demás.

Cuando le volvió a insistir y le sonrió para convencerla, se sonrojó de forma leve. Le daba un poco de reparo eso de tener que negarse a hacer algo que en realidad quería por saber que su naturaleza se lo impedía, seguro que si fuera una mutante habría algo para quitarle los poderes… pero no había nada para hacerte dejar de ser lo que eres.

Miro a Bart y luego miró hacia la izquierda, a la derecha, a todos sitios, le estaba evitando la mirada. Era algo muy tonto, pero pensó que le podría estar “defraudando” al negarse a probar el skate, si, era algo muy estúpido pensar así por un simple skate, pero es que Roxxy era muy emocional.  Ella seguía intentando negarse, y él intentaba hacer que lo probara, con todo esto acabaron en la pista después de que ella le diera un empujoncito.

Ya en esta, miro a Bart mientras él le explicaba cómo tendría que ponerse una vez empezase a moverse con la tabla y después de la explicación, se bajo y parecía ofrecerle el turno a ella, quedó más claro cuando el mismo se lo dijo

-Yo eh… puedo hacerlo en el suelo

Decir esto con una media sonrisa no quedó muy convincente, vamos no le convenció ni a ella misma. Se resigno a que tendría que subirse en la tabla, romperla y sentirse fatal por haber hecho ese destrozo a algo en lo que el chico había puesto tanto trabajo, o al menos eso es lo que parecía a simple vista.

Lentamente se acercó a la tabla, subió un pie e hizo como si estuviera apoyándolo en esta, aún no había echado su peso encima pero sabía que al hacerlo se rompería… no podia ni queria hacer eso, se echó hacia atrás, negando con la cabeza y miró a Bart

-No puedo, yo- le miro, suspiro, y se le acercó para poder hablarle en susurros y que nadie se enterase de la conversación -Peso dos toneladas

Le miro esperando una reacción, aunque sabía que por su altura y el aspecto delgado que tiene seria algo dificil de creer y podría pensar que era algo que ella se había inventado para no tener que intentarlo, así que levanto su brazo derecho, con señal de que intentara moverla para demostrarle así que era verdad lo que le estaba diciendo.

Se le había pasado eso de que el ya respondió a la pregunta de su ciudad de residencia, y ella ni siquiera le había contado de dónde era, eso no estaba bien por lo tanto tenía que responderle, aunque fuera ya un poco tarde

-Se me habia olvidado, yo soy de San Francisco, vivimos lejos pero seguro que nos podemos volver a ver algun dia

Le sonrió, no sabía mucho de él pero ella, bueno no, su familia tenía dinero suficiente como para viajar a cualquier parte del mundo, así que si la dragona y el velocista querían verse alguna otra vez, no habría problema, el dinero y "poder correr muy a tope" eran poderes parecidos al fin y al cabo, si querías ir a un sitio ambos poderes te servían, qué bonito era el capitalismo.

Tras todo lo que le había costado evitar que Bart supiera su verdadero peso, al final tuvo que decírselo para no romper su tabla y la verdad es que no sabía del todo cómo iba a reaccionar el joven.

Esperaba que se extrañara al escuchar eso de que pesa dos mil kilos, o que al menos pensara que estaba mintiendo, lo que no se esperaba para nada es que lo aceptara sin más, no tuvo siquiera que intentar moverla para convencerse de que decía la verdad… los dos eran igual de confiados

¿Que de que estaba hecha su ropa? Sinceramente, Roxanne no sabia de que se hacía su ropa, era su madre la que se encargaba de encargarle la ropa así que no tenía ni idea, para ella siempre había sido ropa normal… aunque nunca había tenido ropa “normal” refiriéndose esto a ropa que se ve en las tiendas, la suya siempre había sido diferente

-Pues… no lo se, mi madre es la que me encarga la ropa, a ver un segundo

Se estiró un poco el sujetador deportivo, algo que no se debería hacer en público ya que podría incomodar a la gente a su alrededor, aunque de lejos todo el mundo pensaría que era una chiquilla… eso era aun peor, y miró a ver si encontraba alguna etiqueta que le indicará de qué estaba hecha su ropa, pero no encontró nada, volvió a dejarlo como estaba y entonces se le ocurrio que podria estar en la espalda, intentando mirarla empezo a dar vueltas sobre si mismo, hasta que quedar un poco mareada y tener que parar.

Entonces miró a Bart y pensó que el podria verla, de modo que se le acercó de espaldas mientras le señalaba su espalda, sonriendo

-¿Puedes mirar tu a ver si encuentras una etiqueta? A lo mejor dice de qué está hecha la ropa

La situación era un poco ridícula, entre ella buscando la etiqueta, dando vueltas sobre si misma y ahora que le estaba pidiendo a Bart que buscará el a ver si veía alguna etiqueta… cuando vuelva a casa sería buena idea preguntarle a su madre de donde salia su ropa. Lo que si le decían siempre es que se controlara con su energía, que no fuese pisando fuerte ni dando saltos porque podría romper las calles de la ciudad, así que siempre iba andando con cuidado, no se notaba porque ya llevaba mucho tiempo haciéndolo pero si que siempre andaba con cuidado de no romper nada, tampoco se montaba en ningun vehiculo que no fuera un avión e incluso estos a veces tenían problemas con su peso, dos mil kilos son muchos kilos.

Y entonces fue cuando su cuerpo le hizo click y los cambios que estaba sufriendo en la adolescencia entraron en juego, su cerebro se había dado cuenta de que le estaba pidiendo a una persona de género masculino que buscase por su ropa para ver si encontraba una etiqueta y aunque para ella no fuera mucha cosa, para su cerebro adolescente si que lo era, ademas su sesera tambien conecto lo que habia hecho antes con su ropa superior de caracter deportivo. Se giró y le miró, sonrojada mientras se ponía los brazos cubriendo su cuerpo que ya estaba cubierto por su ropa

-Mejor no… le preguntare a mi madre la próxima vez que la vea ¿Vale?

Hablando de situaciones raras, esta se llevaba la palma, solo faltaba que se pusiera a llover gatitos color arcoiris que vomitan flores muchitasticas. Ella, aunque fuera una dragona y una persona muy feliz, seguía teniendo los mismos cambios que se producen en esa etapa que cualquier otro humano, lo único eso si es que todavía no había pegado el estirón, puede que en unos años le tocara a ella, pero por ahora nanai

-Bueno… Aun sigo queriendo ver tus trucos

Le sonrió, esperaba que esto hiciera que el tema se volviese a centrar en el skateboarding y olvidar un poco lo que acababa de pasar, fue una situación muy rara

Que bien, el conocia San francisco y había estado por la ciudad, eso le vendría bien si alguna vez se veían ahí porque ella sabría a qué sitios llevarle como a… bueno, Roxxy era de salir si, pero cuando salia era para dar de comer a los pobres o pasarse por el hospital para dar regalos a los niños con una enfermedad bastante horrible o para hacer compañía a los señores y señoras mayores que habían sido abandonados, puede que esas actividades no fueran consideradas divertidas por la demás gente de su edad, pero para ella si.

Aunque también se divertía jugando a juegos en su cuarto, pero eso era en ocasiones especiales. Claro que para los dos poder volver a verse primero habría que conseguir alguna forma de contacto, el teléfono móvil estaría bien pero claro, a ella no se le ocurrió ni darle ni pedirle su número, más tarde si se acordaba lo haría, pero por ahora se limitó a asentir con la cabeza ante la idea de volver a verse

Le explico de dónde venía su interés por la ropa y por saber cómo es que su vestuario aguantaba su peso, si su familia estaba formada por científicos estaba claro que le interesaria la ciencia, por eso Roxxy le interesaba tanto… porque su familia era…. Bueno, no sabia que hacian sus padres, bueno su padre era el intérprete de su madre, pero a parte de eso no sabia que hacian, a lo mejor eran cientificos tambien, o a lo mejor eran justicieros enmascarados, la cacatúa y el cacatuo… no, eso no sonaba real y solo era un sueño que tuvo una vez Roxxy en el cual sus padres iban volando con ella disfrazados de… bueno, de eso.

Ya se le estaba pasando la vergüenza de lo que había pasado, aunque al joven parecía no haberle afectado, ni siquiera sabía cuántos años tenía pero aun asi, no se había avergonzado por nada lo que hizo que la vergüenza de Roxanne se esfumara más rápido, si él se hubiese dado cuenta y avergonzado también, la situación hubiese sido aún peor.

Estaban en la pista y ella le había pedido que le enseñara algún truco, su respuesta fue afirmativa lo cual permitió a Roxxy sentarse en el suelo con cuidado de no causar un mini terremoto, dobló las piernas y miró a Bart, esperando a ver si arte con el skate. Había algo que le atraía de los deportes, o hobbies, como este; la libertad de poder moverse, de poder saltar y hacer maniobras…. Ella aunque siempre estaba feliz tenía deseos de poder ser más “libre”, no podía ni siquiera saltar y mucho menos volar por el cielo en su forma draconiana… ojala pudiera hacer todo eso

-¿Cómo se siente hacer una pirueta con el skate?- hizo un símbolo de girar con el dedo índice  -¿Es muy chulo? Ojala yo pudiera hacerlo…

Tenía que entender que, aunque no supiera todo, pesar dos toneladas le impedía hacer muchas cosas que las demás personas hacen en su dia a dia y que eran normales, como ir en coche o dormir en una cama que no esté reforzada como para aguantar un coche. Le gustaría coger la tabla, y empezar a dar saltos con ella por la pista, claro que eso resultaría en esta rompiéndose y la pista destrozada por su peso

-Si no pesara tanto me compraría unos patines, y estaría todo el dia patinando ¿Sabes?- le sonrio, tenia esperanzas de alguna vez poder hacerlo, claro que mas que esperanzas era un sueño que no se podria cumplir -Iria de San Francisco a Canada, solo patinando

Le falto decir que si la gente no tuviera tanto miedo a los dragones, tambien estaria todo el dia volando de aquí para allá, pero claro una cosa era decirle que pesa dos toneladas, otra muy diferente decirle que es una dragona. Aún no había llegado a tanto, aunque es raro que él no se preguntará por qué ese peso, a lo mejor se pensaba que era una mutante y nada más, una mutante con el fantástico poder de… pesar mucho.

“Claro, y por eso los gatos son un arma de destrucción masiva más poderosos que cualqui… oh, que esto ha empezado ya” Ver las maniobras que el chico estaba haciendo le transmitía, a ella por lo menos, la misma sensación que cuando veía a un pajarillo revolotear cerca de un árbol porque está preparando su nido, algo agradable y, si era cien por cien sincera con ella misma, le producía una poquita de envidia, pero era tan poco que se acababa transformado en admiración.

Se quedó impresionada con todo lo que hizo, su boca estaba abierta y sus ojos brillaban mirando a Bart, parecia una niña que veía fuegos artificiales por primera vez, a lo mejor es cuando le preguntó qué sentía cuando hacía todo eso y él no se lo consiguió describir, aunque ella se quedó con la última palabra

-Creo que te entiendo, es casi como si estuvieras volando ¿No?

Le sonrió, el chico era muy agradable, bueno ella también lo era, casi como mirarse a un espejo que te cambia de género… y que te hace mas alto, te cambia el color de pelo… y todo es. Miró a su alrededor, había más gente practicando con el Skate, la mayoría parecían mayores que ellos, se preguntó porque se acercó a hablar justo a Bart y no a otra persona, puede que fuera porque estaba sentado y eso le ayudo con lo de acercarse y hablarle, era más difícil iniciar una conversación si la persona con la que lo intentabas estaba dando volteretas con una tabla de skate

O a lo mejor era porque “Si no, no habría tema”, la razón daba igual, lo importante era que estaba conociendo a lo que era un amigo en potencia. Tenía que recordar algo, una cosa que pedirle o que darle, pero ahora con lo del skate se la había olvidado ¿Que era? Ya se acordara,

El le dio esperanzas con lo de patinar, que a lo mejor algun dia podria conseguirlo aunque ella veía ese deseo un poco negro, no es que el color negro fuese malo, si no que era algo que tenía tan pocas posibilidades de suceder que era un sueño oscuro casi imposible de ver. Ahora fue él quien le preguntó sobre su familia, esta vez quería saber que si alguien en su familia pesaba lo mismo que ella

-Pues… supongo que mi madre, pero lleva miles de años muerta así que no s

Con una rapidez increíble se tapó la boca, dándose un golpe en la boca que se pudo escuchar a kilómetros de distancia, aunque eso era una exageración. Miro a Bart aun con la boca tapada, se la destapo y sonrió,mirándolo con una mirada nerviosa, chasqueo sus dedos y le senaño, intentando hacer parecer que todo estaba bien, que no habia dicho nada parecido a "Mi madre tiene miles de años y yo no soy humana del todo"

-Esto….¿Como puedo explicarte esto para que te sea coherente?

Obviamente contárselo evitando decir que ella y su madre eran dragones, pero ahora eso era algo imposible, la unica excus que se le ocurría era decir que eran seres mágicos… pero eso no ayudaba nada, suspiro y supuso que lo mejor era decir la verdad

-Creo que es mejor que te cuente de mi familia, pareces alguien en quien puedo confiar, pero mejor te lo cuento en otro sitio ¿Se te ocurre alguno? Tambien podemos quedarnos aqui, pero hablar mas bajito

Y su frase termino con otro sonoro rugido de su barriga, tanto que pareció un animal rugiendo, la barrita le había quitado un poco de gusa pero hambre seguía teniendo. Estaba segura de que podía confiar en Bart, por lo que contarle todo lo de su familia no le resultaba problema alguno, las amistades se empiezan en la confianza

Roxanne parecía tener un problema de memoria y es que por alguna razón se le olvidaban todas las veces que sus padres le dijeron “No vayas contando por ahí que eres una dragona o te vas a meter en problemas” no solo sus padres, si no Jeremiah también; cuando estaba con su familia tuvo que evitar varias veces que Roxxy mencionase eso de ser un ser mitológico, más que nada porque no sabía cuál sería su reacción al saberlo, pero fuera de la familia era totalmente diferente, si se lo soltaba a mucha gente al final acabaría sabiéndolo alguien peligroso,  un cazador de dragones o un coleccionista de animales mitológicos y aunque, claro está, Roxxy no quería que nada malo le pasase a ella o a su familia, estaba a punto de hablarle de ellos a un chico desconocido…bueno, no desconocido ya que conocía su nombre, completo además, era desconocido en el sentido de que solo había intercambiado unas pocas palabras.

Le miro a los ojos, como si así pudiera detectar si el muchacho era genuino y que podía confiar en el al 100%, si se lo contaba y el acababa siendo otro… “chico malo”, ella podría tener muchos problemas. Aunque claro que él ya le dijo que no era “Tyler” y parecía decir la verdad, además llegados a este punto seria incluso redundante seguir mintiendo. Aunque Roxanne confiaba en Bartholomew Henry Allen al 100% tras hacer sus maniobras mentales, aún seguía nerviosa y ni siquiera le había dicho nada todavía. Se rasco la cabeza con la mano izquierda, moviéndose el pelo fastidiando así su peinado un poco, la derecha la llevo a su moflete que lo aplano con la palma, sus pies daban toquecitos en el suelo en una repetición lenta y continua, dando algunos toquecitos con los talones y otros con la parte de los dedos, sus ojos no parecían poder quedarse quietos en un punto y miraban a su alrededor constantemente, miraron a una paloma que paso volando unos cuantos metros alejada de ellos, al skater que sacaba una botella de agua de su mochila para exprimírsela en la boca y al final volvió a centrar su mirada en Bart.

Le contesto algo que, aunque no sabía mucho de cómo era su familia o la relación que tenía con ella el joven, le pareció extraño cuanto menos, Bart tenia aspecto de chico joven y dejar a tu hijo irse solo en una ciudad nueva a lo mejor no era lo mejor que podías hacer siendo padre; al menos dejarle ir con algún amigo que se conozca la ciudad. Roxxy no pensó mucho en esto ya que recordó que ella estaba en la misma situación; la primera vez que estaba en esa ciudad y ya se había ido sola sin ningún miedo a perderse ¿Llevaba el móvil? No se paró a buscarlo, ya que recordaba el camino de vuelta a la casa de la familia de Jeremiah

-Bueno, no pasa nada yo creo que aquí puedo… contártelo

Miro a los lados comprobando así que nadie se encontraba lo suficientemente cerca como para escucharla hablar, tomo incluso más precauciones acercándose más a Bart casi como si fuera un niño pegándose al escaparate de una chocolatería. Suspiro y trago saliva, estaba lista para contarle que era en realidad, abrió la boca, la lengua hizo amen de moverse para empezar a pronunciar las palabras con las cuales le contaría su secreto y… la volvió a cerrar cuando dos jóvenes adultos pasaron a su lado hablando y riéndose entre ellos “¿Qué es esto? ¿Una sitcom?”

Una vez “pasado el peligro” y no habiendo moros en la costa, Roxxy al fin se vio capaz de una vez por todas contarle su secreto… sin embargo ahora tenía otro problema ¿Cómo contárselo? Lo más fácil sería decirle que su madre era una dragona y su padre un rey, o algo así, de hace muchos años y aunque existía la posibilidad de que él no la creyese esa no era la razón de no saber si contárselo así; ella pensaba que la gente se creía todo, o casi todo, de lo que ella decía ya que nunca mentía… bueno solo a veces, pero nunca con malicia. La verdadera razón de que no supiera como contárselo era que no se decidía si contarle la versión larga o la versión abreviada; la versión larga, aunque era un poquito más de tostón era más creíble, la versión corta… bueno, cualquiera puede decir “Yo soy un dragón” y quedarse tan contento.

Al final se quedó con la opción de contarle la versión abreviada de su historia, así si Bart tenía alguna duda o algo le podría preguntar a Roxxy alargando de esta manera la conversación que, siendo sincera, a la dragona le estaba gustando hablar con el muchacho “Incluso aunque parezca que haya tardado casi cuatro meses en contestarle” la narradora no dijo nada ante ese pensamiento interno de Roxanne. Un sándwich le fue tendido hacia ella al escuchar Bart los rugidos que salían de su hambrienta tripa, en otro momento habría declinado el ofrecimiento debido a su capacidad adquisitiva, sin embargo, el hambre la cegó y con un rápido movimiento de su mano derecha le quito el sándwich de la mano como si fuera un animalito hambriento. Abrió la boca y comprimiendo el bocata con su mano se lo metió entero en la boca agrandándose las mejillas como… como un hámster comiendo pipas, al darse cuenta de que a lo mejor no se estaba comportando bien, al menos no como sus padres le habían enseñado, se tapó los labios con la boca para poder hablar sin que se le viera la comida

-Perdón... y gracias

Aunque de todas formas hablar con la boca llena no era de buena educación, al menos si se tapaba un poco la boca al hablar era “menos desagradable”. Una vez se disculpó por haber comido como un pato volvio a centrarse en, bueno, en contarle de una vez por todas a Bart lo de su familia e incluso sin estar del todo segura si era acertado contárselo, Roxxy decidió confiar en él, aunque puede que la confianza no fuera lo suficiente al contar algo tan gordo

-Bueno veras… básicamente mi madre era una dragona y mi padre un rey o algo así

Sus manos se movían de izquierda a derecha con movimientos rápidos de las muñecas una y otra vez, lanzando sus dedos que eran arrastrados por el balanceo y también por eso de estar unidos al resto de la mano

-Y yo pues soy una Dragona y una humana a la vez

Al terminar de contarle su historia le planto en la cara una sonrisa de oreja a oreja, puede que contar historias no fuese su fuerte ni tampoco guardar sus secretos, pero lo que si se le daba bien a Roxanne era sonreír. Había hablado en voz baja, eso unido al hecho de estar tan cerca de Bart que casi podía meterla la nariz en el ojo ayudo a que nadie salvo el escuchase su historia… claro que ahora tenía que esperar a ver como reaccionaba el ante esto, o se lo creía de todo, o no se lo creía del todo o no se lo creía en absoluto, no tenía muchas más opciones. Para Roxxy era un pensamiento casi alienígena el que alguien no se creyera su historia, ella tenía en mente que si alguien decía la verdad la gente la creería siempre… no sería muy buena jueza ella.

Lo más básico de su historia ya estaba puesto sobre la mesa; era la hija de una dragona y un humano, ahora eso sí, tendría que explicarse un poco mejor si no quería dejar al joven con preguntas sin responder, total ya que ahora sabía lo que era en realidad ¿Qué tenía de malo darle los detalles? Además, si la conversación se llegase a alargar demasiado y Jeremiah la echase en falta solo tendría que llamarla al móvil, menos mal que no se le olvido llevárselo. Se limpió los labios de las migajas del sándwich usando el nudillo de su dedo índice como servilleta, sabía que eso no daba una buena imagen, mas no tenía otra forma de limpiarse. Sacudió las migajas que se había limpiado con cuidado de que no acabasen ni en su ropa ni en la de Bart.

Otro ofrecimiento por parte del muchacho y uno que sí tendría que declinar sí o sí; los sándwiches no eran notorios por su capacidad para quitar el hambre, a no ser que tu sándwich fuera un filetón con salsa de almendras metido entre dos panes, entonces sí que te quitaría el hambre y Roxanne… bueno, en su cumpleaños una vez le trajeron un bocata de dos metros supuestamente para todos y tuvieron que comprar uno extra porque Roxxy se lo comió ella solita en tan solo treinta minutos. Básicamente el sándwich que le dio Bart era, para poner un ejemplo, tirar una moneda a un pozo y esperar a que se llene, luego pensar “Hmm, si tiro más monedas a este pozo en algún momento se llenara”; acabarías pobre. Eso mismo le podía pasar a él si Roxxy decidía aceptar y ver que más le podía dar el joven, por suerte ella tenía constancia de esto

-No, gracias. Tengo un… apetito demasiado grande y no quiero dejarte sin nada de comer… o sin dinero

Pasado lo del bocata, Roxxy no se paró a pensar que a lo mejor le resultaría raro que una chica de su tamaño y de su físico tuviese un “gran apetito” de hecho sería una de las ultimas cosas que se te pasa por la cabeza al verla por primera vez, la primera cosa que se le suele pasar por la cabeza a todos y todas al verla es “¿Dónde estarán sus padres?”, al final tendría que aprender que su aspecto no denotaba tener diecisiete años en absoluto, lo que si denotaba era energía, la energía… de una niña pequeña

“V”, eso es lo que dijo el joven, cinco en latín, la letra uve del abecedario en muchos idiomas y según como se mire la letra “u” en el latín escrito, aunque no parecía estar refiriéndose a ninguna de esas cosas, él se refería a alguna historia; una serie, un videojuego o alguna película con ese nombre o al menos con eso en su nombre. Esto llevo a pensar a Roxanne en todo a lo que el chico se podría referir, de series hasta películas, de videojuegos hasta libros; The Elder Scrolls: V un juego al que ella jugaba en sus “ratos libres” tenía protagonistas que eran reptiles y también había dragones, que se supone tienes que matar a no ser que tengas mods que te impidan hacerlo, de aspecto más reptiliano que otra cosa ¿Se refería a eso?  Que más daba, además si se paraba a pensar en todo aquello con “V” en su nombre se pasaría el día entero pensando.

-No tengo esca

Tuvo que parar de hablar cuando Bart le paso el pulgar por la cara, no es que le molestase, pero cuando era pequeña su madre le limpiaba muchas veces la cara usando el pulgar y siempre, sin excepción, sacaba la lengua y se pedorreaba con la boca, era algo que no podía evitar hacer

-Pffft

Tras la inspección de Bart, de resultado negativo al no encontrar ninguna escama en su cara, Roxxy volvió a meterse la lengua dentro, ignorando que a lo mejor fue raro que hiciera eso, y seguir con su explicación de porqué no tenía escamas en su cuerpo

-No tengo escamas, es que cuando me transformo tengo plumas y no escamas, además- se paró a rascarse la columela de la nariz –estoy bastante segura de que nací mágicamente”, así que no soy una hi… hibr… eso.

Se quedó pillada al intentar decir la palabra “hibrida”, cuando le pasaba eso prefería pasar de decir la palabra entera y esperar que la persona con la que estaba charlando entendiese lo que quería decir.

-Por eso tengo tanto apetito- explicando asi lo de antes de "tengo un apetito demasiado grande", el apetito de una dragona -y tambien la misma fuerza, y peso, en ambas formas… magia.

Levanto las manos y movió los dedos imitando a un mago echando magia, acompañado con un ululo haciendo la vez de efectos de sonido, más que un mago parecía un fantasma. Al menos esperaba haber aclarado la duda de Bart de porque no tenía escamas

Off:

Otra vez tuvo que declinar la oferta de Bart de darle comida, la joven dragona tenía un espíritu amable lo que le hacía no dudar ni un segundo si alguien le pedía comida, razón de porque siempre que podía llevaba alimentos a los pobres con la ayuda de Jeremiah. Su bondad parecía no tener límites, pero cuando se trataba de aceptar la “caridad” de otros… eso ya le era más difícil. Hija de unos padres muy jóvenes, y ricos, Roxanne creció pudiendo tener todo lo que quisiera de hecho muchos regalos que le hicieron de pequeña ella se los regalaba a otra gente o simplemente los donaba, sus padres aprendieron la lección cuando cumplió once años y desde entonces no le regalan nada, sino que hacen una generosa donación a una organización elegida por ella. Por esto no era capaz de aceptar la ofrenda del joven, claro que tampoco le había explicado su “poder adquisitivo”

-Mi familia es… bueno, mis padres tienen mucho dinero así que no te preocupes- le sonrió agradablemente –Luego me comprare comida. Pero gracias por tu ofrecimiento

Una niña rica con dinero que no acepta la comida de los demás, sacado de concepto podría hacer parecer a Roxanne una típica niñita rubia que tiene todo lo que quiere porque sus papis tienen dinero… mas no podía ser más diferente de la realidad. Una vez le explico su situación, se dio cuenta de que cuando le ofreció comida con más “aporte calórico” no entendió muy bien a que se refería, para ella Bart no era más que un chico normal y cuando él le decía eso se imaginaba barritas energéticas de esas que Roxxy veía anunciadas en la televisión o a lo mejor el chico era parecido a ella y tenía que comer una cantidad exagerada para saciarse

-¿Mayor aporte calórico? Oh, ¿Eres como yo? ¿Tienes que meterle muchas calorías a tu cuerpo también?

Los ojos de Roxanne se abrieron y sus pupilas se dilataron, claramente excitándose demasiado por una tontería como era conocer a alguien que comiese igual que ello; como un pozo sin fondo. Ahora el chico le dio otra idea, ir a un sitio de comida y ya que ella comprara lo que quisiera y eso sí que era una buena idea, lo malo es que la cartera se la había dejado en la casa de la familia de Jeremiah y que sus padres no le habían dejado nada de dinero para el viaje; el dinero lo llevaba Jeremiah por si tenía que comprar comida extra para la dragona

-¡Eso estaría genial- volvió a sonreírle –Oh pero… es que me estoy quedando en la casa de los familiares de un amigo- nunca llamaba a Jeremiah “mayordomo” ya que ella lo veía más como un amigo, casi como un hermano –Y no tengo dinero aquí ahora mismo… pero si quieres podemos quedar luego ¿Qué te parece?

Bart le había caído bien, claro que no es que fuera muy difícil caer bien a la dragona; ¿No eres un genocida? ¿No eres extremadamente malo? Pues ya le caes bien, pero algo de lo que Roxanne no se percataba, pero si sus padres, es que aparte de Jeremiah… no tenía muchos más amigos. Saludaba a todo el mundo, era amable con todos e intentaba car bien a todo el mundo, pero en cuanto se trataba de salir con gente de su edad, o con más mayores o más jóvenes… le parecía resultar difícil, sus padres a veces se preocupaban de que se sintiera sola, más ella nunca demostraba nada de esto al estar siempre feliz; para ella todos eran sus amigos hasta que se demostrase lo contrario, aunque visto desde fuera la jovencita parecería estar muy sola al ni siquiera tener amigos, en el sentido normal de la palabra, con los que jugar a los cuatro videojuegos contados que juega. Bart podría ser un nuevo amigo, aunque Roxanne ya lo veía como tal para el joven podría ser diferente, a lo mejor para él no era más que una joven extraña

Bart demostró interés cuando ella le confeso que en vez de escamas su cuerpo draconiano estaba cubierto por plumas, lo que le hizo sonreír orgullosamente; no todos los días alguien le decía “cool”, esto le recordó a un dato curioso que vio en un documental que hablaba sobre los dinosaurios y su evolución

-Pues sabes, las plumas antes eran escamas que evolucionaron lentamente en plumas, como las de las patas de los pájaros

Le sonrió, aunque no supiera exactamente si a Bart le interesaba ese dato, ella se lo dio esperando que le pareciese igual de interesante que a ella. Eso sí, cuando él le compartió su interés por ver su forma dragona, tuvo que decepcionarle

-No puedo, no me dejan transformarme, me dicen que es peligroso que la gente puede asustarse... y atacarme

Se puso cabizbaja, si por ella fuera saldría volando por los cielos en ese mismo instante con el joven en su lomo como en esa película que veía de pequeña de cuyo título no podía acordarse… aunque puede que algún día pudiese llegar a transformarse sin miedo a la reacción de la gente… algún día.

-La verdad- se rasco la barbilla ante lo que le dijo Bart de los híbridos –no he pensado mucho en ello, de hecho, ni siquiera sé con qué clase de magia me creo mi madre… ojalá pudiera preguntárselo en persona.

Se dio cuenta de que ahora el sabia cosas sobre su familia y sobre ella, y ella no sabía casi nada sobre el

-Bueno, dejémonos a mí a un lado- sacudió la cabeza de lado a lado, como si estuviera negándose a seguir la conversación en torno a ella -¿Y tu familia? ¿Cómo son tus padres?

Le sonrió ampliamente, expresando real interés en saber más del joven que acababa de conocer

Habían llegado al punto de la “paradoja de las buenas personas” en las que dos buenas personas intentaban hacer lo que ellos pensaban que era lo mejor para el otro, haciendo asi imposible que ninguno de ellos acabara satisfecho; el joven le ofrecía comida amablemente y Roxxy la rechazaba amablemente con la idea de que al tener el dinero que tenía (y el apetito) no estaría bien aprovecharse de la amabilidad de un chico que acababa de conocer, esto también le hacía pensar a la dragona en una situación invertida, una en la que ella ofrezca comida a alguien hambriento y este, o esta, le negase el ofrecimiento ¿Como se sentiría entonces? Seguramente no sería para tanto, o al menos eso pensaba ella ya que pocas veces alguien rechazo alguno de sus ofrecimientos.

A sí, el metabolismo. Roxxy vio sobre todo eso en un documental que echaron por la tele hace unos años, como algunas personas podían comerse cinco hamburguesas con triple de queso en un dia y no engordar ni un kilo mientras que otras con tan solo oler una aceituna subían siete kilos, sin embargo, en el propio reportaje también hablaban de que tener el metabolismo rápido no te daba una inmunidad contra las enfermedades que venían por comer demasiada comida basura, demasiado azúcar, etc… etc…. Y ella habiendo viajado a otros países podía decir con seguridad que los niveles de azúcar en la comida de los estados unidos era tan elevada que si se exprimiera de todos los alimentos del país se crearía un nuevo continente. Quemar las calorías era lo normal, pero no tanto el quemar “otras cosas”. Ella por suerte era bastante “sana” a la hora de comer, sana entre comillas porque sí, meterse un pollo entero en menos de diez minutos mucha gente lo vería como algo poco sano, más Roxxy comía poca, por no decir casi ninguna, comida basura; siendo de una familia asquerosamente rica nunca fue a restaurantes de comida rápida así que todo eso es extraño para ella. No fue si no con la llegada de Jeremiah a su vida que empezó a comer otras cosas, ella y sus padres; las hamburguesas caseras del joven mayordomo eran una delicatesen para la familia, lo malo era que para hacer la de Roxxy tardaba casi dos días

Otro ofrecimiento de Bart que Roxxy iba a rechazar amablemente… hasta que se dio cuenta de que este si que podía aceptarlo. A diferencia de la mayoría de personas en el mundo, la jovencita solo veía el dinero como un papel sin sabor “Bueno esa parte si que es común en todas las partes del mundo… ¿no?" que podía ayudar a la gente a ser felices pero que para ella no tenía valor alguno. Es por eso que si Bart le dejaba dinero para poder comprar algo de comer ella se lo podría devolver cuando vuelva a tener su cartera… aunque también le podría devolver un sandwich… pero eso no se le pasó por la cabeza

-¡Vale! Así cuando tenga la cartera, te puedo devolver el dinero y ya esta

Le sonrío, solo le faltaba estar moviendo una cola de lado a lado y ya estaria completa su transformación; parecía un cachorro que le acababan de decir “Buen chico” y dado una chuche

-Podemos ir a… ¡algún sitio!- No tenía ni pajolera idea de donde se podía comprar comida en esa ciudad o mejor dicho; no tenía ni pajolera idea de donde se podía comprar comida en esa ciudad sin que te miraran raro por pedir una cantidad exagerada; aún recuerda la cara que se le quedó a un heladero cuando en vez de una tarrina le pidió un cubo entero de helado -Y comprar algo y podemos comer juntos

Roxxy ya se había hecho ideas en la cabeza cuando Bart solo le ofreció prestarle dinero, Roxxy es que era mucho de asumir sobretodo si se trataba de comida y de la compañía de alguien; comer sola era algo que no le gustaba. Cuando Bart dijo “la ciencia y tecnología” Roxxy soltó una rápida carcajada. Podrían ser aliados si no fuera por el hecho de que ·”niñas que han sido creadas usando magia por una dragona con la sangre de un humano” no entraba en el filtro de investigación de la mayoría de científicos… aunque en verdad, si que le podría ser útil para descubrir más sobre su madre, más que nada porque ella se hizo a la idea de que estuvo viva por mucho, mucho tiempo y alguien que vive tanto tiempo… alguna marca tiene que dejar, y para eso si que había científicos, la cosa era encontrarlos.

La historia familiar de Bart le recordó un poco a la suya, no es que fueran muy parecidas pero si que tenían algunas similitudes como el no haber sido criados por sus padres biológicos

-Lo siento mucho por tu padre, seguro que era un buen hombre

De nuevo volvía a asumir aunque no tenía motivos para pensar que su padre era un ”buen hombre” tampoco tenía motivos para pensar lo contrario. Eso si, lo de que su madre no podía hacerse cargo de él le recordó a una historia que ella conocía bien

-Me has recordado a mi amigo Jeremiah, el mayordomo de la familia- Eso ultimo lo dijo casi sin querer ya que aunque sus padres si que se referían a él como el mayordomo, Roxxy pocas veces lo hacía -Que se crió sin padre y cuando él y sus hermanos se hicieron mayores nadie podía… o quería, ahora mismo no me acuerdo de que dijo, cuidar de su madre anciana así que él decidió cuidarla hasta que un dia yo me lo encontré y ahora él y su madre viven en la casa de mis padres… en mi mente las historias era más similar, lo juro

Cuando lo contó se percató que la historia de Jeremiah y la de Bart no eran tan parecidas como ella pensaba, en vez de ser la madre la que no se puede hacer cargo del hijo, son los hijos los que no se podían hacer cargo de la madre… básicamente lo contrario a lo que le contó.

Por fin se pusieron de acuerdo y era el momento de elegir un lugar en el que comer, menos mal que Roxxy se lo tragaba básicamente todo por lo que elegir dónde o qué tipo de comida comprar seria mucho mas fácil que convencer a la jovencita de aceptar “limosnas”. La pregunta que le hizo Bart, sin embargo, tardó unos segundos en responderla y eso que la respuesta estaba clara

-Pues… ¡Todo! La verdad

Se rasco la barbilla con el dedo índice y el pulgar mientras ponía cara pensativa

-Aunque suelo comer comida que llene mucho porque… bueno, tendria que comer más ensaladas que una vaca para estar llena

Soltó una carcajada ante la comparación que se acababa de hacer que ni siquiera sabía si era verdad o no ¿Cuanto podía comer una vaca? Roxxy no sabia esa respuesta, lo que si sabia es que ella si que se podía comer una vaca entera, o al menos eso cree ella. Nunca ha visto una vaca en persona.

-¡La pasta me encanta! Los italianos tienen una cocina excelente, molto bene. Aunque el sushi esta riquisimo tambien, 美味しい

Con todo esto, la muchacha se dio cuenta de algo crucial; no le había dado una respuesta clara si no varias diferentes

-Bueno… si vamos a comer juntos, mejor elige tu

Le sonrío, qué era lo que mejor se le daba hacer y dejo que eligiese el ya que ella nunca se decidiría por un tipo de comida ni aunque estuviese años mirando que comer. Bart aclaro antes de nada que su comida se la iba a comer para no desperdiciarla y en eso estaba muy de acuerdo Roxxy; tirar comida en buen estado era un crimen… bueno y a veces incluso en mal estado, aún recuerda esa semana que se pasó en el hospital por comerse un trozo de sándwich que encontró debajo de su cama, nota mental para si misma; si el pan está verde y lo de dentro morado significa que no es comestible.

La joven respondió a la sonrisa del chico con otra sonrisa y eso de que su padre fuese buena persona le recordó, y esta vez no porque se pareciese la historia, a su padre biológico

-Mi padre biológico también fue un buen hombre… creo, la verdad no se toda la historia. Se que era un Rey, como ya te dije, que pensaba que la guerra no era la solución, sino el diálogo- se pasó la mano derecha por la cabeza -tambien se que murio por esos ideales

Con eso termino todo lo que sabía de su padre biológico, si tuviera que hablar de su padre adoptivo sí podría decir más cosas ya que lo conocía mejor. Curiosamente la edad de su padre una vez que la gente le conocía le extrañaba, Roxxy tenía 17 años y su padre aun no llegaba ni a los 40 años ni de lejos así que haciendo cuentas, esto claro está sin saber que Roxxy es adoptada, tendría que haber tenido a su hija muy de joven demasiado como para ser algo normal. Su madre no, su madre era unos años más mayor que el.

Los ojos de Roxxy se iluminaron cuando se acordó, casi por arte de magia, que tenía que avisar a Jeremiah si quería irse a comer con Bart por la ciudad. Menos mal que se acordó

-Voy a avisar a mi amigo de que me voy a comer fuera ¿Vale?

Sacó su teléfono y marcó el número que automáticamente llamaba a Jerry, cuando lo cogió ambos se alegraron de escuchar la voz del otro

-¡Jerry! Estoy en un parque de skate con… si, un chico… no, no es como… es joven, no se cuantos años tiene, no se lo he preguntado- Roxxy daba vueltas sobre si misma mientras hablaba por el móvil -Sí, es de fiar… no es.... Vaaale

Se apartó el teléfono del lado de la cara y estando aún en llamada presiono la tecla que tenía forma de cámara y la cara de Jeremiah apareció en su teléfono

-A ver, dejame ver a ese “chico”

Se notaba la desconfianza en la voz del hombre, él no conocía a Bart y que Roxxy estuviera con un desconocido le daba mala espina; sabía que la joven dragona podía ser muy confiada a veces.

-Mira, es el. Se llama Bart

Le enseñó a Jerry al joven al cual saludo con un gesto de la cabeza

-Hmm… no parece peligroso, eso es verdad

-¿Ves? No tienes que preocuparte

-Sabes que si… Roxanne, eres muy confiada y a veces tengo miedo de que alguien malo se te acerque y tu..

-¡Tranquilo!, soy muy fuerte

Roxxy sonrió de oreja a oreja, Jeremiah prefirió fruncir el ceño

-Sí, pero no intimidas nada

Eso no podía negarlo, si la gente no solía acercarse a ella para intentar engañarla o atracarla cuando iba con Jerry era porque el gigante de dos metros y algo intimidaba a cualquier persona… bueno no a cualquier persona, muchas mujeres se acercaban para pedirle su número; era muy popular entre el género opuesto aunque él nunca aceptaba invitaciones de mujeres desconocidas. Era algo tímido en cuanto a esos temas

-Bueno… solo digo que tengáis cuidado y… pasadlo bien

Desde el móvil Jerry lanzó una mirada a Bart y se despidió con otro gesto de la cabeza, cuando volvió la mirada a Roxxy sonrió. La voz de una mujer, de la madre de Jeremiah, se escuchó por detrás de Jerry y este se giró un momento mientras la joven se despedía

-Adios Jerry, dale muchos besos a tu madre de mi parte, ¡hasta luego!

Cuando Jerry se despidió con otra sonrisa y otro gesto de la cabeza finalizó la llamada. Roxxy guardo el movil y sonrió a Bart

-El era Jeremiah, Jerry. Es mi amigo, bueno es el mayordomo de mi familia, pero para mi es mas mi amigo

Lo aclaro por si no había entendido la dinamica del duo Roxxy/Jerry. Ahora lo que quedaba era esperar a que Bart se comiera su comida y luego que el decidiese que comida comer ya que para Roxxy… eso seria demasiado dificil.

Aclaraciones:

Giro hacia la vaca cuando le comento lo del peso del bovino, torció la cabeza hacia un lado y en su rostro se pudo ver que no entendía que él no entendió que quiso hacer un chiste, por eso se extrañó un poco cuando le pregunto su peso

-Dos toneladas- le respondió mientras “destorcia” la cabeza -si tuviera que comer diez por ciento de mi peso tendría que comerme...

Se miró a las manos con las que empezó a contar en voz baja y por unos segundos casi parecía que le fuese a salir humilló por las orejas, segundos después volvió a alzar la cabeza y miró a Bart de nuevo

-Muchas ensaladas

No le habían salido las cuentas y se quedó con una leve expresión de frustración en la cara, parecía un niño que se comió una galleta pensando que era con trocitos de chocolate y resultó ser de pasas, mas al preguntar el joven que si le parecía bien ir a un restaurante italiano su rostro se iluminó de nuevo

-¡Vale! Y cuando estemos en el restaurante, le mandare la ubicación a Jeremiah para que pueda venir con mi cartera

Sonrió de oreja a oreja, no pensaba en ningún momento que iba a comer gratis, si Jeremiah llegase a tiempo pagaría ella y si llegase tarde teniendo así Bart que pagar todo el, le daría el dinero al chico; el plan perfecto y sin fisuras “A no ser que haya un terremoto, entonces si puede haber fisuras… no es culpa mía, yo no soy la que escribo esto”.

Se apeno, de nuevo, al volver a escuchar que el padre de Bart había muerto, pero sonrió cuando le dijo que él murió ayudando a los demás, aunque ella no supiera nada de ninguna invasión tiránica… puede que fuese porque el padre hizo un buen trabajo, no tenia ni idea

-¡Yo- sonrio de oreja a oreja, con los ojos cerrados al ser apretados por los mofletes y se cruzó de brazos -voy a cambiar el mundo, no me importa si muero intentándolo!

Esa sonrisa transmitía confianza y una “valentía” ante la muerte increíble, pero también transmitía desconocimiento e infantileza; ella exclamaba que “cambiaría el mundo”, sin embargo, eso era más fácil decirlo que hacerlo. Muchas personas intentaron cambiarlo, algunas para mejor y otras para peor, y no todas consiguieron hacer lo que se prometieron, más Roxxy no pensaba en nada eso, en su mente solo veía su “triunfo”

-Aunque aun soy muy joven… bueno, eso me da más tiempo para hacerlo

Se rio sonoramente, algunas personas que se hallaban cerca la miraron al escucharla para luego seguir su camino, Roxxy centro su mirada de nuevo en Bart mientras sonreia

-¿Nos vamos entonces?

Off:

Al escuchar la respuesta a cuanta fruta y verdura tenía que comerse, se dio una palmada en la frente al darse cuenta de lo estúpida que había parecido al no saber hacer una cuenta tan sencilla

-Es verdad, que había que multiplicar. Lo siento, es que suspendió matemáticas

Roxxy le había contado su deseo de cambiar el mundo y no como otras personas que al escuchar eso se burlarian de ella diciendo cosas como que “es algo estúpido” o “es imposible” el joven, en cambio, le respondió que no importaba la edad; si quería cambiar el mundo no importaba cuando se empieza, o al menos eso entendió ella. No pudo hacer otra cosa que sonreír

-¡Sí! Yo intento hacer ahora todo lo posible pero…- agacho la cabeza al suelo un segundo para seguidamente mirar directamente a los ojos del chico -si no lucho contra la razon de las injusticias que hay en este mundo, al final todo mi trabajo sera en vano

Ella se refería a que aunque ella donará todo su dinero a la caridad, que era algo que prácticamente hacía y sus padres ya le dijeron en múltiples ocasiones que no podía donar más de diez millones al año porque si no acabarían en la bancarrota, a gente que lo necesitará más que ella, si no hacía algo por cambiar la razón de la existencia de esas personas pobres, maltratadas o hambrientas, al final todas esas donaciones habrian sido en vano. Era como llenar vasos de agua en un grifo para intentar que no se llene la habitación de agua, sin cerrar el grifo, pero para eso tenía tiempo. Ahora mismo, y ella lo sabía, era demasiado joven y dependía demasiado de sus padres y Jeremiah como para hacer lo que prometía. Aunque ella estaba segura de que algun dia de estos pondría el mundo patas arriba

La joven dragona siguió impacientemente al chico hasta llegar al restaurante italiano que emitia un aroma tradicional, casi como si fuera la residencia de una familia italiana que por el azar de la vida tambien vendian comida. Una vez en el restaurante, les saludo un camarero, les llevó a una mesa para dos y tras pedirles nota les trajo sus respectivas comidas, Roxxy se sintió un poco mal al ver que Bart no pedía nada, más se enteró durante la conversación que tuvieron mientras ella se zampaba uno de sus platos de cannelloni di magro con ricotta e spinaci, mientras algunos clientes e incluso algunos camareros la miraban impresionados por su capacidad de tragar, de que el tenia mas comida luego y por eso no pedía nada.

A la joven le gustaban las “comidas étnicas” aunque para ella no eran más que comidas, todo debido a no solo que sus padres la llevaran en muchos de sus viajes por el mundo haciendo así posible que probase de todo un poco si no que incluso sus padres tenían diferente gastronomía étnica; siendo la madre de origen griego y el padre de origen alemán. Una vez terminó de comer, el camarero les entregó la cuenta no sin antes resaltar lo impresionado que estaba con Roxanne; ver a  una adolescente tan pequeña y delgada comer de esa manera siempre era impresionante.

Menos mal que Jeremiah apareció poco después y tras presentarse formalmente ante Bart, pagó la cuenta y dejo que Roxxy y el joven se despidieran, incluso la dragona le pidio el numero de telefono a Bart. Sus caminos se separaron  al fin y la dragona se fue con su mayordomo-mejor amigo de vuelta a la casa de la madre de este. Roxxy, como era de costumbre, esperaba con toda su alma volver a ver al chico algun dia de estos. De momento tenia su numero y eso ya era suficiente para ella