El tiempo, siempre ha sido una constante difícil de definir para la gran mayoría. De este, solo se sabe con certeza que se divide en tres facciones, pasado, presente y futuro. O al menos eso era lo que se creía. Muy pocos llegaron a aventurar sus mentes hacia la posibilidad de que el tiempo también se dividieran en realidades alternativas, tan infinitas como los reflejos encontrados de dos espejos. Ahora esa teoría ya es un hecho, el mundo se ha vuelto un compuesto de fragmentos de todas esas dimensiones, reuniendo distintas personas y lugares en un mismo plano existencial.
Pero tal hecho no es nuevo para los residentes de la enorme mansión ubicada a las afueras de Weschester, hogar de los mundialmente famosos X-Men. Un grupo de mutantes que lucha para proteger a un mundo que les teme por ser diferentes, un grupo que con los años ha aprendido a adaptarse a cada uno de los conflictos que se han atravesado en su camino y que se han topado con muchos viajeros de distintos mundos y tiempos.
En uno de los pasillos de esa enorme mansion, resuenan los tacones al caminar de una de los miembros del equipo, quizás la más versada en el arte de la superación y adaptación. La pelirroja conocida como Jean Grey a.k.a Mavel Girl, a.k.a Phoenix.
Hasta hace poco, había estado muerta debido a un enfrentamiento contra un clon del mutante conocido como Magneto. Pero ahora, ha vuelto a la vida, y no solo se ha topado con que el mundo ha cambiado totalmente, sino con que, además posee fragmentos de recuerdos de una vida que no le pertenecen, una vida diferente, mas “realista”, una versión Ultimate de la historia. A esto se le suma el hecho de que el motivo de su renacer, se debe al vínculo innato e inamovible con la entidad cósmica conocida como la Phoenix forcé, una entidad que, tras devolverle la vida, no ha hecho eco de su presencia. Quienes la conocieron en el pasado, dirían que tales aspectos serían más que preocupantes, tanto por la salud de la mujer, como por la del mundo entero. Sin embargo, Jean ha logrado conseguir hasta el momento, un punto neutro que le permite continuar con su vida de la mejor forma posible, la más normal. Después de todo, no es la primera vez que pensamientos de versiones “alternas” de ella misma, invaden su mente. Le había pasado con Madelyne Pyro y con la misma Dark Phoenix.
Así que es una pendiente que ya ha subido antes.
- Buenos días Srita Grey - Una voz femenina la saca de su ensimismamiento. Con cierto desconcierto la mujer se gira para mirar el rostro de quien le llamo.
- Buenos días Cessily - Contesta el saludo con una sonrisa - pensé que era imposible sorprender a un telepata - bromea la mutante de piel plateada con cierto hilo en su voz - Eso solo es un mito urbano. Ya descubrirás que hay muchas formas de sorprender a uno ¿vas hacia el comedor? -
- Si usted lo dice… Y sí, pero pasaba a dejarle una redacción que deje pendiente para el profesor - la ligera tensión ante lo improvisto de la conversación, era más que palpable, no necesitaba ser una telepata para darse cuenta de la incomodidad de la joven, y no podía evitar el preguntarse si tenía que ver con ella - De acuerdo, ve entonces. Nos veremos luego en clase -
- No es por ti, roja. Los chicos aún se aclimatan a todos estos cambios, no es fácil para ellos - resonó la voz del mutante con garras de adamantium, a pocos metros de ella. Aun sonaba como si la conociera con todo detalle - No lo sé, a veces me pregunto si no me habré vuelto demasiado fría tras todos estos años - << Tras tantas resurrecciones >> pensó por ultimo para sí, observando a la joven perderse por los pasillos del instituto, y sin voltear a mirar al hombre recostado sobre el marco de la puerta.
- Todos hemos cambiado un poco. La vida nos moldea. Pero eso no significa que nos volvamos malas personas. Y tu… - se acerca a ella mientras habla, acariciando su cabello con la confianza que solo un vínculo como el de ellos brindaba - … definitivamente no eres indiferente ni insensible - desvía su mirada hacia mutante, topándose con sus ojos claros, ojos que podrían helar la piel de muchos de sus enemigos pero que solo reflejaban bondad y comprensión al mirarla a ella - Gracias, Logan… - susurra tras fundirse en un cálido abrazo, estrechándolo con fuerzas.
En momentos así, recuerda que por más fuerte que intenta ser, o que es, siempre necesita los brazos de un ser querido en los cuales refugiarse. Pero ¿Cómo refugiarse en alguno de ellos? La gran mayoría de los que la rodean, no son las personas que ella recuerda por más parecidos que tengan. Ni siquiera sabe qué clase de vinculo comparte con exactitud con el hombre que la estrecha entre sus brazos. Y hasta que ese tipo de cosas no se aclaren, prefiere ser prudente y marcar cierta distancia.
Se separa de su pecho lentamente, sin mirarle a la cara. Coloca un mechón de sus rojos cabellos tras su oreja antes de volver a articular - Creo… Creo que debo seguir. Aun debo reunirme con el profesor y organizar las clases para hoy - susurra intentado no sonar emotiva. Pero es inútil ante un hombre que parece conocerle mejor que nadie. Logan acuna el rostro de la mujer en sus manos y asiente - de acuerdo. Búscame si me necesitas - dice sin más, respetando la barrera que ella establece entre ambos. ¿Cómo podría culparla? Todo aquello era nuevo para todos.
Algunos minutos después de aquel encuentro, Jean se encontró con el único hombre en todo el universo en el que confiaría casi a ciegas, Charles Xavier, el fundador de la Patrulla X. Aun así, no le platica nada sobre los Falsh de recuerdos que ha estado teniendo, que inundan sus pesadillas, ni de sus temores sobre el Phoenix. No quiere preocuparlo. En su lugar, se limita a desempeñar su papel como mano derecha del hombre, y toma el pensum educativo que debe impartir.
- Bienvenidos a historia 101. Tal vez algunos me conozcan, y tal vez algunos no. Mi nombre es Jean Grey y seré su profesora en esta asignatura por lo que sigue del año escolar… - inicia su presentación hacia sus alumnos, mirándole desde su lugar a un lado de la enorme pizarra - … Como muchos sabrán por todas las noticias mundiales, extraños sucesos han ocurrido en nuestro mundo, y parece que la historia que cada individuo recuerda, varia uno de la otra… sin embargo, en esta clase nos enfocaremos en estudiar los sucesos más importantes en la historia del mundo eventos comunes para la mayoría, a pesar de todo… este nuevo orden, por llamarlo de alguna forma - explica mientras camina por los pasillos, sintiendo la incertidumbre, miedo y frustración en los estudiantes. Aquello hizo que sintiera la imperante necesidad de hacer algo para calmar sus miedos.
- Pero no es todo lo que aprenderemos. Acá también conseguiremos un modo de adaptarnos a los cambios, a crecer como una familia y aceptarnos tal cual somos. Es mi deseo intenso, el que no se sientan desprotegidos, porque están bajo el cuidado de los mejores mentores que se podrían tener. No les miento diciendo que todo será fácil… pero al menos les aseguro que estaré allí para ustedes, a cada paso del camino -
Tal vez fuese la honestidad en sus palabras, o el hecho de que había usado su telepatía para disminuir un poco la ansiedad en sus alumnos. Como fuese, el hecho era que había conseguido que los chicos se sintieran más ajusto en su clase y eso era lo que deseaba porque marcaba la esperanza de un buen comienzo. No solo para ella.
Y esta es la Jean Grey que ha vuelto al mundo. Una que, a pesar de sus conflictos internos, sigue anteponiendo las necesidades de otros a las suyas. Que sigue amando con tanta pasión como al inicio, aun cuando debe mantener distancia porque es lo mejor. Y que sobre todo está decidida a apoyar a la nueva generación de mutantes, a guiarlos en medio de todos los conflictos que se avecinen.
Lo que le depare al futuro, aún es incierto. Pero una cosa es segura: Ella luchara por mantenerse en pie con el carácter férreo que le caracteriza, así tenga que renacer de sus cenizas una vez mas.