Más vale tarde [15/06/2018] (Doug)

Señor, sdflisafoivzdur, lo siento, Señor, pero no le he entendido, podría repetirlo, Señor, el millonario volvió a darse la vuelta en la cama murmurando algo, Señor, no me es posible entenderle, ¿podría tratar de vocalizar mejor sus ordenes verbales?, Señor, ¡QUE ME DEJES DORMIR, JODER!, lamento haberle despertado señor, pero creo que esto es importante, Tony se tapó con la almohada para evitar que Jarvis le molestara, pero el volumen de la voz aumento para que eso no fuera un obstáculo, Señor, por favor, es importante, sabe que sino no le molestaría.

Al ver el escaso resultado de sus intentos Jarvis activo el programa de limpieza de la habitación, abriendo las cortinas y la puerta corredera de la terraza, el robot inmediatamente tomo las sábanas para cambiarlas y al millonario no le quedó más remedio que incorporarse, Te pienso desmontar por esto Jarvis, no lo creo, Señor, le he hecho cosas peores en el pasado y estoy seguro que en cuanto se le pase el enfado atenderá a razones, podría hacerlo antes de que se me pase el enfado, en ese caso, Señor, supongo que es una suerte que disponga de dos servidores separados para alojarme, y que el otro este en un lugar seguro.

Vas a decirme que quieres o tengo que seguir soportando tu escaso humor, enseguida, Señor, ¿recuerda que me dijo que buscara datos acerca de todos los héroes y villanos que han aparecido tras la colisión?, si, sorprendente, Señor, ¿que es sorprendente?,
que lo recuerde, no creí que le diera la más mínima importancia, vale, continua por favor.

Tony se puso en pie y fue a por un café, había dormido apenas dos horas, aunque ahora estuviera aprovechando para fastidiarle, estaba seguro de que Jarvis tenía algo importante, Verá, Señor, aún quedan fuentes por revisar y estoy catalogando toda la información, pero he encontrado algo que no he podido solucionar personalmente, ¿que?, al parecer la ciudad de Gotham sigue bastante chapada a la antigua, Señor, y no he podido hacer que liberen al señor Rattman, me suena el nombre..., Doug Rattman, Señor, dijo la IA proyectando la ficha que Industrias Stark tenía sobre el científico.

Ah, si, ahora lo recuerdo, ¿que pasa con él?, esta ingresado en Arkham, Señor, una institución mental para criminales peligrosos, Joder... ¿le dio un yuyu muy fuerte o que?, en realidad no, Señor, al parecer cayo por uno de los portales o algo similar y acabó en Gotham, allí lo tomaron por loco y lo encerraron en el sanatorio, lleva allí desde la colisión, bueno, ponme al teléfono con el director, ese es el problema, Señor, dicen que no hay problema en liberarlo, pero que antes hay que retirar la denuncia y que hay que recoger al enfermo personalmente, he contactado con la comisaría y están dispuestos a retirar los cargos, pero también exigen que alguien se presente allí para rellenar los documentos.

Genial..., voy a ducharme, te odio Jarvis, te odio mucho, y mas cuando tienes razón, siempre tengo razón, Señor, lo se... yo te programé ¿recuerdas?, preparalo todo para salir, y algo de comer por favor, algo me dice que hoy va a ser un día largo.


Tras horas en la comisaria y bastante tiempo en el propio sanatorio mental, por fin accedieron a entregarle a Doug, aún así le informaron de que era peligroso y le dijeron una serie de protocolos, ¿no se daban cuenta aquellos imbéciles que había sido un error?, solo quedaba un requisito más, los dejarían reunirse en una sala, manteniendolos vigilados a través de un espejo, por si el paciente daba muestras de violencia.

Tony esperaba sentado en una incomoda silla, frente a una mesa anclada al suelo, cuando por fin un celador con cara de orangután y un cuerpo a juego con la cara hizo entrar al científico en la habitación, Buenas tardes Doug, he venido a sacarte de aquí, ¿que tal estas?, dijo el millonario en un tono suave, recordaba que Rattman era un tipo asustadizo, solo faltaría que ahora le diera uno de sus ataques de pánico y decidieran mantenerlo aquí “unos días más”.

Una tiza.

¡¡Una tiza!!

Hacía tiempo que sucedió. Al llegar, los nervios le traicionaron ¡¡No entendía nada!! ¿Dónde estaba? ¿Por qué nadie conocía los lugares que mencionaba? y si se trataba de una dimensión paralela, ¿No debería haberse destruído con la incursión de otro Douglas Rattmann? las teorías probaban que la existencia de dos versiones distintas de un mismo elemento coexistiendo en el mismo plano de realidad podía colapsar el universo, ¡Fascinante! Pero no era momento para ciencia... Le arrastraron a un lugar oscuro y frío, voces gritaban a su alrededor, y empezaba a estar falto de sus pastillas... Rebuscó en los bolsillos; Con las prisas, los celadores habían olvidado requisarle un rotulador. Ante él, aunque mal iluminadas, se extendían algunos metros de paredes blancas algo sucias. Destapó el rotulador, posó la punta sobre el muro y empezó a delinear. De pronto, la paz reinó en su cuerpo; Todo el miedo, todos los malos pensamientos y temores, se estaban marchando por la punta de ese rotulador...

Horas después, los guardias contemplaron su obra; Miles de fórmulas matemáticas, dibujos terribles que harían apartar la mirada a la mente más serena, y otros de corte impecable, dignos de un artista, cubrían los muros. Con el paso de los días, las paredes fueron ennegreciendo tras las capas y capas de tinta. Un rotulador moría, y otro nuevo era entregado al misterioso paciente que no figuraba en ningún registro civil, ya que cuando pintaba o escribía, estaba callado, muchas veces tan concentrado que ni siquiera comía. Era uno de los niños buenos de Arkham, de esos que daban pocos problemas y por ende, se ganaba ese tipo de regalitos. Pero era precisamente eso lo que causaba la ira de los menos tranquilos, y también hubo momentos de dolor, violencia, y horror entre aquéllos muros, y no solo por sus visiones...

Una noche, Douglas comenzó a gritar, y los celadores acudieron a ver qué había ocurrido. Las paredes estaban completamente negras. El hombre permanecía allí con su último rotulador en la mano, contemplando un espacio impracticable para su arte. Meses de paz se habían volatilizado, ya no le quedaba nada...

Y de repente, un celador le había traído una tiza. Una tiza blanca como la nieve. El hombre, ya muy demacrado, flaco, con el pelo demasiado largo y una barba poblada y descuidada, tomó en sus manos temblorosas el precioso regalo, y comenzó de nuevo. Todo iba bien...

...hasta que le apartaron de la pared forzosamente, le embutieron en una camisa de fuerza mugrienta, y en el transcurso del forcejeo, su tiza cayó y fue aplastada por la bota de uno de sus captores. Sintió un rayo atravesar su corazón ante la escena, y una resignación inhumana invadió su ser, hasta que fue llevado a una salita donde le esperaba alguien a quien su psique no estaba preparada para ver...

Tony Stark. Allí estaba, derrumbando su nueva realidad. Cuando llegó, le convencieron de que todo lo que conocía nunca existió, ni Stark industries, ni la torre Stark, ni el maldito Tony Stark mismo. Le costó meses aceptar que aquélla realidad toda su vida anterior solo formaba parte de su locura, y cuando al fin se había adaptado a ese nuevo mundo cruel y espantoso, donde él era un don nadie salido de la nada y su pasado tan sólo un sueño, ese mismo pasado venía en traje a buscarle, tras toda la locura de la colisión de mundos.

Le observó. Sonrió. Y de pronto empezó a carcajearse de forma maníaca, causando incomodidad en el guardia que atendía la sala. Clavó sus ojos multicolor en el joven frente a él y dejó escapar las palabras tal como acudían a su cabeza:

- ¡Márchate! ¡No eres real! Yo no soy real, mi pasado no existe, ¡Soy una broma de mal gusto, como dijo ese payaso de la celda de al lado! ¡Y tú eres de peor gusto aún! Portales, Torres Stark, partículas universales aceleradas en un caos absoluto y todo para demostrar que Yo, Douglas Rattmann, sólo soy un fraude ¡¡¡JAJAJAJAJAJAJAJAAAA!!! ¿¿Lo puedes creer?? ¡¡El universo no tenía otra cosa que hacer!! ¡¡Y ahora apareces tú!! ¡¿Por qué?! ¡¡Ya había asumido que todo era una gran mentira!! - De pronto, el hombre sollozó amargamente- Márchate... Por favor, necesito pertenecer a un sólo mundo...aunque sea éste...

Cabizbajo, el antes científico cerró los ojos. Aquéllo era demasiado para él. Estaba agotado.

Doug siempre había sido un tipo raro, pero parece ser que el estar estos últimos meses aquí encerrado, en un sanatorio mental de dudosos resultados y recibiendo un tratamiento inhumano había acabado con su cordura, Doug, por favor, relájate y siéntate, le dijo con la voz más calmada de que fue capaz, si actúas así volverán a encerrarte y no podré ayudarte, mírame compañero, sabes que soy real, pregúntale al celador y te dirá que estoy aquí, te dimos por perdido durante la colisión, y hasta ahora no he sabido donde estabas.

Las palabras de Tony no parecían estar logrando mucho efecto, así que cambió de táctica, Tus proyectos están parados Doug, sin tu mente privilegiada para hacerlos avanzar, no hay posibilidad de completarlos, hay cientos de ecuaciones por resolver, formulas que solo tú serías capaz de completar, ahora todos los mundos son uno, es imposible, pero es así, y tú eres uno de los pocos que puede llegar a explicarlo, pero no encontrarás aquí las respuestas Doug, si quieres hallar las fórmulas que expliquen lo ocurrido has de venir conmigo, hemos de salir de aquí, ¿lo entiendes?.

No sabía que más decirle, quizás era demasiado tarde para razonar con él, quizás había perdido la razón dentro de esta cárcel de locura a la que llamaban sanatorio, si era así tendría que traer a un psiquiatra de Nueva York para quitarles la custodia legal de Doug y llevárselo de aquí, con la esperanza de que al llegar a su antiguo entorno eso le ayudara a recuperarse.

Tus proyectos están parados Doug...

Aquella frase se coló en la mente de Doug atravesando la niebla de gritos y ruidos aterradores constantes que formaba su mente...

...Sin tu mente privilegiada para hacerlos avanzar, no hay posibilidad de completarlos...

¡Desaparece Stark,¡¡DESAPARECE!! ¡¡Deja de atormentarme con tu presencia!!

...Hay cientos de ecuaciones por resolver, fórmulas que solo tú serías capaz de completar...

¡¡¡¡BASTA!!!!

Todo se revolvía y convulsionaba en la mente del científico. Se sacudía y forcejeaba contra su camisa de fuerza sin levantar la vista de la mesa,no quería mirar a ese hombre imposible para él. Cada maldita palabra era un latigazo doloroso en la estructura que había elaborado sumido a las presiones de este nuevo mundo. Ahora era un paciente de Arkham, un vagabundo sin nombre y sin pasado, no iba a desaparecer así como así, ¡¡NO OTRA VEZ!!

...Ahora todos los mundos son uno...

Y de pronto una luz. Una revelación científica imposible... Nuevos mundos unidos en uno solo. Un concepto tan sumamente interesante, que ni su esquizofrenia en pleno apogeo podía hacerle ignorar. Quedó inmóvil y alzó la vista al joven millonario, con una chispa de esperanza. Por su mente pasó de nuevo la imagen de la tiza aplastada. Ya no tenía nada que hacer aquí...

-¿Puede prometer que eso es cierto? ¿Hay todo un nuevo mundo ahí fuera, señor Stark?

El celador se sintió incómodo ante ese cambio tan brusco. Estaba deseando que se llevasen a ese tipo siniestro de allí...

Doug parecía cada vez más nervioso, se debatía en su camisa de fuerza y Tony temía que le hubieran destrozado la mente tanto en el mal llamado sanatorio que fuera tarde para sacarlo de allí, pero con su última frase un resquicio de cordura tomó el control, aún había una posibilidad, aunque en cuanto llegaran a Nueva York habría que buscarle un psicólogo o psiquiatra que le ayudara a superar todo esto.

Si Doug, es cierto, por lo que yo se es así, pero tu eres el experto en ese tema, te necesito en el equipo para estudiarlo, imagínatelo, todo el multiverso reducido a un único nivel de existencia, el millonario hizo hincapié en el asunto que había sido capaz de devolverle la razón, si se mantenía así suficiente tiempo le dejarían llevárselo de allí, ¿vendrás a ayudarme?.

Tony se sentía culpable de la situación, si se hubiera dado cuenta antes quizás su empleado estaría en mucho mejor estado, estaba claro que su estancia en una celda de un psiquiátrico le había desquiciado, ya antes era un tipo tímido y algo extraño, pero estos episodios eran algo nuevo, algo que debía haber desarrollado en Arkham o durante la colisión, al menos eso es lo que pensaba el millonario, ya que desconocía el estado mental de Doug antes de la colisión.

Fascinante... fascinante... fascinante, fascinante, ¡¡¡fascinante!!!

¡Múltiples realidades reducidas a una! ¿Qué habría sido de los "yoes" paralelos? ¿Habrían pasado a formar parte de un solo ser? ¿Todos los Douglas Rattmann de otras realidades eran ahora él mismo? De ser así, ¡¡No podía dejar que perdiesen más el tiempo en este maldito antro! ¡¡Tenía que entenderlo, tenía que intentar saber qué había sucedido, qué consecuencias podía tener, qué ventajas, qué inconvenientes, cómo era ahora la historia... Demasiado para perdérselo.

Una solitaria lágrima de emoción resbaló por su mejilla hasta perderse en su poblada barba, que se torció al esbozar la mayor sonrisa de que era capaz. Sus ojos bicolor pasaron de estar totalmente faltos de vida, sumidos en la sombra de sus propias cuencas, a resplandecer como los de un crío particularmente soñador en un parque de atracciones.

- Sáqueme de aquí, señor Stark, y tendrá a su disposición a un hombre que no comerá, no descansará, no vivirá porque estará demasiado ocupado buscando respuestas. ¿Está usted dispuesto a asumir tal responsabilidad? -Su todo de voz sonaba feliz, incluso pícaro. Después de muchísimos años, se atrevió a hacer una broma. Era algo que en él, era un gesto extraordinario.

Tal vez sí algún Rattmann bromista se había unido a su ser. Tal vez incluso un Rattmann sano y cuerdo lo hubiera hecho, y aún no lo supiera, pero solo era cuestión de tiempo averiguarlo...

Doug recuperaba la cordura, incluso al parecer se atrevía a bromear, eso debía de ser una buena señal, al menos Tony esperaba que los psiquiatras al otro lado del espejo opinaran eso, Bien, supongo que tendré que asumir esa responsabilidad, esta misma noche podemos volar a Nueva York, seguro que estas deseando volver a casa, ahora que las cosas estaban más calmadas miró al celador, ¿podemos irnos ya?.

Había firmado una montaña de papeles para llegar hasta aquí, solo esperaba que ahora no les diera por decir que Doug no estaba en sus cabales y le hicieran quedarse, levantaría un ejercito de abogados si era necesario...

Si, aunque si sufre alguna crisis será su responsabilidad, contestó el celador interrumpiendo los pensamientos de Tony, finalmente no había sido tan difícil, el celador abrió la puerta y esperó a que ambos pasaran, mantente cuerdo un poco más Doug y no habrá problemas, pensaba Stark para sí mismo.

Fuera los esperaba un coche de alquiler, al millonario aun le parecía increíble que en esta ciudad no hubiera una sucursal de Industrias Stark, pero así era, así que no quedaba más remedio que alquilar la limusina, una vez dentro se sirvió un abundante whisky, ¿quieres uno?, le preguntó a Doug cuando se sentó, bueno, tu dirás, vamos al hotel o directamente al aeropuerto, no te vendrían mal una ducha y un afeitado, aunque eso también podemos arreglarlo en el avión, dijo Stark con una sonrisa.

El papeleo para cederle la libertad al científico fue breve, y pronto sintió el inmenso placer de recuperar sus viejas ropas. Sin embargo, un escalofrío recorrió su cuerpo al ponerse la misma camisa, los mismos pantalones y zapatos, y la bata con las que vivió el incidente, pero había algo más importante ahí fuera. Todo un nuevo mar de conocimiento. El universo se había reescrito, prácticamente era como contemplar la ciencia naciendo de cero.

¡¿Cómo podía ser tan afortunado?!

Se reunió con Stark jr en el siniestro hall de Arkham con una sonrisa en los labios. Mientras ambos abandonaban en coche aquél lúgubre lugar por la puerta principal, una tormenta empezaba a sonar en la colina más oscura de Gotham...

Ya en el hotel, el personal miró de modo extraño a la curiosa pareja, especialmente al ex-recluso, pero no tardaron en quitarle importancia; En Gotham, si tenías dinero suficiente para permitirte una habitación en el Ritz como la que Tony Stark había pedido, les daba igual si querías pasar la noche con una cabra. Pero nada más lejos de los retorcidos pensamientos del recepcionista y el botones; Aquél hombre andrajoso no era un mendigo desesperado por algo de dinero de que se iban a aprovechar, sino un hombre que renacía, volvía de las cenizas más oscuras a la luz del mundo. Cuando ambos llegaron a la habitación, Tony empezó a instalarse, y deshizo las maletas sin prisas.

- Señor... Si me disculpa, voy al baño.- La única obsesión de Doug por ahora era recordar cómo era un cuarto de baño decente, uno d everdad, y no el retrete insalubre junto a la litera de su celda. Al ver la ducha, sintió lo más parecido a amor a primera vista, y sin perder el tiempo, se desnudó y activó el agua. ¡Cómo había añorado la caricia del agua tibia recorriendo su cuerpo, y los vapores condensándose en la mampara y el espejo! Sentía paz... Era uno de esos momentos en los que casi podía sentirse una persona normal, sin miedos, ni visiones ni voces en su cabeza. Solo el relajante sonido del agua al caer. Se sorprendió de lo mucho que le había crecido el pelo, en el que ya podía hundir las manos al completo y que generaba una cantidad poco acostumbrada de espuma durante el lavado. Al terminar, se secó y se erolló la toalla a la cintura. Se acercó al espejo, y retiró el vaho para contemplar su aspecto. Le costaba reconocerse en el hombre que le devolvía el reflejo del cristal; Tan flaco que empezaban a notarse sus costillas, pálido, con aquélla barba y esa espesa mata de pelo. Negó con la cabeza y tomó la maquinilla de afeitar que le había traído Stark.

Al rato salió del cuarto y encontró una camisa y pantalones nuevos sobre la cama, y un par de calcetines. Sonrió de nuevo. Stark jr era muy generoso. Tras vestirse, salió a su encuentro dando vuelta con los brazos en cruz para lucir el vestuario. A pesar de su delgadez, la ropa nueva y el afeitado le hacían lucir atractivo.

- Muchas gracias, señor Stark. Aquí estoy de nuevo. No sé cómo podré pagárselo...

Cuando Doug salió de su cuarto y entró en la sala privada que separaba las habitaciones, encontró allí a Tony montando un sistema holográfico, y junto a el una carretilla que debía haber traído el servicio de habitaciones hacía poco, no sabía que te apetecería así que he pedido un poco de todo, pescado, carne, verdura... y dentro de un rato traerán la bandeja de los postres, cuando terminó de montarlo lo encendió, la verdad el aspecto de Doug había mejorado radicalmente solo con la ducha y el afeitado, y claro, la ropa de persona ayudaba bastante.

¿Qué como puedes pagármelo?, pregunto divertido el millonario, bueno en realidad soy yo el que te paga a ti, y un buen sueldo por cierto, pero si realmente quieres hacer algo por mí, explícame como ha sido posible esto, pulsó un botón y aparecieron las distintas representaciones gráficas del momento de la colisión, mientras en otra pantalla se proyectaban los datos en forma de ecuaciones, la mitad de la física teórica se ha ido al carajo y la otra mitad se mantiene sujeta con alfileres, un evento de esta magnitud debería haber destrozado la realidad, pero igual que el proceso inicial se inició algo lo detuvo apenas comenzó, e hizo que los restos de las distintas realidades se fusionaran... ¿como? ¿por qué? Y lo que es más importante, ¿vendrá alguien a acabar el trabajo?.

Tony cogió distraídamente algo de uno de los platos y se lo introdujo en la boca sin mirarlo, ¿Brocoli? Odio el brocoli, ya mas atento se sirvió en un plato alimentos más de su gusto y se sentó en el sofá mirando el despliegue que cubría casi media habitación, lo he visto ya cientos de veces, he rehecho los cálculos una y otra vez, y cada vez que lo veo pienso que debo estar dejándome algo, que me debo haber saltado un paso, que algo no encaja, este es tu campo, tú investigabas esto incluso antes de la colisión, es tu campo, dime compañero ¿que me he dejado? ¿donde está el error? ¿o acaso el error es la colisión en si?.

Cuán agradable era oír la conversación de un hombr einteligente lleno de dudas. Alguien como Stark no planteaba dudas estúpidas como "¿Qué color escojo?", "¿Me queda bien?", "¿Cómo puedo cortar mejor las patatas?, no... Allí había cuestiones importantes, universales, verdaderas razones por las que poner en marcha el cerebro y tratar de explicar las cosas fabricando teorías. Se sentía a gusto en compañía de su jefe. Se cruzó de brazos y bajó la mirada a un punto inconcreto de la moqueta del suelo. Cuando entraba en aquél trance, parecía una estatua. Quien le viese en aquél momento, dudaría incluso de si respiraba.

Era muy cierto lo que decía Tony sobre que el cataclismo había durado un tiempo demasiado breve respecto a su envergadura e importancia, pero el nivel y área d einfluencia de un hecho no repercutía en su duración; Estudios bastante precisos afirmaban que el Big bang, que dio lugar a todo el universo, no duró sino unos segundos, y el resto fue tan sólo el viaje de la materia hacia todos los rincones. Si la colisión de las dimensiones había actuado d ela misma forma, era más que plausible que hubiera sido breve, pero respecto a cómo las realidades se habían fundido sin destruirse... Era más complicado. ¿Que alguien hubiese intervenido? Entonces habría que aceptar que alguien tenía control sobre todos los universos implicados, y en qué lugar, en qué búnker protegido de las realidades podía ubicarse esta entidad? Sería algo tan parecido a un verdadero dios, que daba miedo sólo pensarlo...

Sin embargo, una idea rondaba la cabeza de Douglas respecto a cómo se había solucionado todo de forma tan veloz... ¿Y si no había un ente que lo controlase todo? ¿Y si todo se controlaba a sí mismo? Douglas empezó a caminar nervioso por la habitación dándole vueltas a la teoría a su parecer absurda, que muchos ecologistas empleaban como estandarte y que afirmaba que el planeta tierra, en su conjunto, era un ser vivo gigantesco, que reaccionaba a nuestra presencia cómo si fuésemos un virus. ¿Y si era cierto? ¿Y si era aplicable a algo más grande aún?

Corrió al baño en busca de la maquinilla de afeitar y regresó con una de las cuchillas de recambio. Se sentó en un sillón junto a Stark y le miró muy serio.

- Señor... creo que tengo una teoría sobre todo lo que ha mencionado...

Ante un Tony stark atónito, el científico se hizo un corte en los dedos, que empezaron a sangrar profusamente. Observó sonriente a su superior y comenzó a dar explicaciones como si no fuese consciente de las heridas:

- ¡¡Un ser vivo, señor!! ¡¡El universo, todos los universos, han actuado como una célula madre, realizando un proceso inverso!! En vez de separarse, ésta vez el movimiento ha consistido en unirse. Las realidades eran como una amalgama de células en un ser vivo, pero algo hirió el orden establecido y la respuesta del universo fue fundir realidades para solidificarse y resistir la ruptura. Del mismo modo que las plaquetas acudirán a mis dedos para crear una costra y evitar que me desangre. Lo que intento decirle, señor Stark es... Que el multiverso, actúa como un sistema biológico gigantesco, una forma de vida que no podemos comprender desde nuestra postura antropocéntrica...

Otro tipo de delirios empezaban a inundar la mente de Douglas. Su sangre empezaba a manchar la moqueta y él sólo podá imaginar con ojos desencajados que eran sólo micropulgas de una minipulga de otra pulga mayor sobre el lomo de un inmenso perro estelar.

(OFF ROL:Se me había ocurrido que, llegados a este punto, Tony puede sentir preocupación y pedir a Jarvis que investigue y descubra lo que le pasa a Rattmann, ¿qué te parece?

Tony se levanto e inmediatamente le quito la cuchilla a Doug, Si, lo que dices tiene sentido, pero no hacía falta una demostración tan... realista, con una simulación hubiera sido suficiente, rasgó su camisa e improvisó un vendaje para la herída de Dough, aunque personalmente pienso que más bien alguien le ha vendado la herida al universo, en cualquiera de los dos casos, estamos hablando de un ser de gran poder, y si existe me gustaría saber qué o quién es, ¿a ti no?, creo que deberíamos centrarnos en investigarlo y no hacer más suposiciones por esta noche.

Con el vendaje terminado el millonario revolvió un momento su maleta y extrajo un bote de pastillas, Tomate una de estas, yo las tomo como caramelitos cuando necesito dormir para concentrarme con toda mi capacidad en un problema, dijo dándole una de las pastillas y tendiéndole un vaso de agua, necesitaremos nuestras dos mentes trabajando al unísono y al máximo rendimiento para encontrar la solución al problema.

Tony pensaba que la colisión y su estancia en Arkham habían acabado perturbando a Doug, ya que el desconocía que tuviera problemas mentales anteriores, agravados ahora por haber suspendido la medicación abruptamente.

OFF:

Douglas dejó sus pensamientos cósmicos en cuanto sintió cómo Tony le vendaba la mano herida. Por un instante se sintió extrañado, no comprendía la situación, pero entonces cayó en la cuenta; Seguía sin su medicación. Tal vez había estado momentáneamente lúcido ante las fascinantes noticias del mundo exterior, pero una vez superada la novedad y lejos de algo que le distrajera, como sus garabateos en las paredes, la recaída era inminente. Puede que ya no le atormentasen visiones espantosas, o voces en su cabeza, pero aquél corte en su mano era prueba de que se había dejado llevar por un entusiasmo fuera de lugar...

...que para variar, era peligroso.

Apenas tenía esperanzas de no haber asustado al multimillonario, pero con suerte, echaría la culpa de ese hecho a su estancia en aquél infierno al que llamaban irónicamente "sanarorio" Arkham. De pronto, Stark se levantó y rebuscó en su maleta. Doug esperó inmóvil ver qué tramaba su jefe, cuando éste le ofreció una pastilla. Al parecer, eran unos potentes somníferos. No eran de la marca que solía usar Doug, pero dio por hecho que sería cosa del cambio en el mundo. Nuevos mundos, nuevas empresas... ¡NO! No iba a perderse de nuevo en teorías para acabar rajándose otra parte del cuerpo. Sin demora, se tragó el comprimido (Ya tenía práctica en hacer pasar ese tipo de cosas por su gaznate a la primera, ni siquiera le causaban un leve picor), bebió el agua, y observó a Stark.

- Creo que iré a acostarme. Una pena haber disfrutado esta ropa tan poco tiempo, pero supongo que mañana será otro día. Gracias por la pastilla señor, y... bueno, quisiera disculparme por el macabro espectáculo que le he ofrecido. Me dejé llevar por el entusiasmo, no volverá a ocurrir.

No supo si era otra de sus paranoias, o su propia conciencia, pero algo gritó en su cabeza "¡Ni siquiera tú lo crees, Douglas!"

Tony ayudó a Rattman a llegar hasta su cama, entre el cansancio y la pastilla no tardó en quedarse dormido, Dulces sueños Doug..., dijo mientras salía del dormitorio del científico, ¿Jarvis?, pregunto una vez cerrada la puerta, si, Señor, el millonario continuó hasta su propio dormitorio y cerró también, por si Doug se despertaba, necesito que busques información de Doug, del nuestro y de los de otras dimensiones si la hubiera, hemos de averiguar si ya estaba tocado de antes o ha sido cosa de ese mal llamado sanatorio.

Unos minutos después Jarvis estaba listo para dar su informe, Señor, he completado el análisis preliminar de las bases de datos disponibles... no creo que le guste, Señor, no importa si me gusta o no Jarvis, he de saberlo, como desee, Señor, en primer lugar debo empezar con que hay mas de cien mil casos documentados del Síndrome Post-Colisión, aunque parezca un número elevado no lo es tanto considerando los más de seis mil millones de personas del mundo, dicho síndrome suele ser una forma de paranoia producida por los cambios radicales en el mundo que algunas mentes no están preparadas para aceptar.

Personalmente no creo que este sea el caso del señor Rattman, he encontrado referencias a una crisis psicótica a temprana edad, nunca lo declararon curado, Señor, por lo que estimo que es posible que o bien usara un nombre supuesto para obtener la medicación, o su psiquiatra se la suministraba de forma que no apareciese en los registros médicos de industrias Stark, eso encajaría en su actuación de esta noche, bueno, eso en realidad son buenas noticias Jarvis, no le entiendo, Señor, averigua que medicación tomaba y consigue que la tengamos aquí por la mañana cuando se despierte, eso debería dejarle en su nivel de rareza normal ¿no?, quizás no sea tan simple, Señor, pero entiendo su lógica, haré lo posible, Señor, ahora le recomiendo descansar, si el señor Rattman intenta acuchillarlo mientras duerme trataré de despertarlo, gracias Jarvis... tranquilizador, como siempre, es un placer, Señor, como siempre, dijo con un sutil tono irónico.

Tony mostró mucha más amabilidad de la necesaria acompañándole hasta la habitación. Lo cierto era que las pastillas estaban haciendo efecto ya, tendría que preguntarle qué marca eran y si eran muy caras, aunque eso dependía de cómo avanzara la noche... Temía qué pasaría en cuanto su raciocinio descansara y la conciencia pura, y enferma, tomase el control. Las noches en Arkham fueron duras, durísimas. Se ganó más de una paliza por despertar a los reclusos equivocados, por ello procuró dormir lo menos posible, pero era bastante insano llevar meses durmiendo escasas dos, tres horas... Sus cansados ojos descansaban rodeados de unas ojeras tales que al verse en el espejo hacía un rato se comparó a sí mismo con un Panda. Era algo gracioso ahora que lo recordaba, y se quedó dormido con una media sonrisa en los labios. Por fortuna, dormirse pensando en algo divertido, y aquéllas pastillas tan potentes le hicieron recuperar el sueño que se negó aquéllos oscuros días.

                                             

Por la mañana, algo de luz empezó a entrar por la ventana, y se desperezó pesadamente. Escupió uno de sus mechones de pelo; No acababa de acostumbrarse a esa magnífica melena que ahora tenía, seguramente al llegar a la ciudad acudiría raudo a alguna peluquería. Se preguntaba qué hora era, ya que no escuchó ningún despertador, ni el señor Stark había acudido a despertarle. ¡Qué bueno era vivir sin horarios y con tanto dinero bajo el brazo! Aunque por lo menos, no era un patán, Tony trabajaba a conciencia para poseer tal fortuna, y ese era un mérito que no tenían muchos de sus compañeros VIP... Se sentó al borde del colchón y restregó sus ojos. Pronto volvería al trabajo... a los blancos e impolutos laboratorios, llenos de gente seria y educada, estudiosa, de vez en cuando alguno se dejaba caer en plan bromista, pero nada desagradable. De repente, Douglas alzó la mirada hacia la pared. No había nada significativo en ella, pero sí en su cabeza; aquéllos recuerdos le llevaron a vestirse rápidamente y salió al encuentro de Stark, que estaba en el salón principal.

-Buenos días, señor... Perdone, ¿Qué hora es? Ignoro cuanto he dormido -Entonces recordó que tenía preguntas más importantes que hacer, no había tiempo para banalidades - Esto... Disculpe, señor Stark, querría saber algo... Dígame, ¿ha rescatado a muchos otros compañeros de la empresa? La verdad, no tenía mucha relación con ellos, pero eran brillantes y agradables, y siento inquietud por su paradero, ¿Están bien?

Un brillo ilusionado iluminaba la cara del científico. Por alguna extraña razón, toda su fe se depositó en el hombre que tenía frente a sus ojos en ese momento.

¿Eh?, dijo Tony al ser interrumpido mientras desayunaba y repasaba las proyecciones tras unas últimas modificaciones, ah, hola Doug, espero que hayas dormido bien, yo llevo un rato repasando estos nuevos modelos, la verdad es que si tomamos como cierto lo que dijiste anoche el pobre universo esta jodido en mayúsculas..., mira, aquí puede verse la frecuencia en la que se encontraba nuestro universo, al menos aquel del que procedo yo, cada universo tenía la suya propia pero tras la colisión no hay una única frecuencia, hay zonas con diferentes valores, aunque lentamente parece que todos tienden hacia está, dijo señalando uno de los gráficos tridimensionales que flotaban en medio de la habitación, una nueva frecuencia distinta de las anteriores, y en principio creo que suficientemente estable como para mantener la realidad funcionando.

Esto... Disculpe, señor Stark, querría saber algo... Dígame, ¿ha rescatado a muchos otros compañeros de la empresa? La verdad, no tenía mucha relación con ellos, pero eran brillantes y agradables, y siento inquietud por su paradero, ¿Están bien?, le preguntó el científico una vez terminó de hablar, era una pregunta lógica, pero como siempre Tony se había dejado absorber por el trabajo, debería haber empezado por ahí.

Bueno, la mayoría siguen en sus puestos con normalidad, algunos son de otras de esas dimensiones, pero las mayores diferencias que hemos apreciado son recuerdos levemente distintos, en general tu equipo sigue igual, de tu planta solo faltan dos personas, Beatriz Stilson, que sigue desaparecida y Benjamín Norton, por desgracia él fue sepultado por una pared que apareció de la nada durante la colisión y se desplomó sobre él, los números totales en la torre entraban dentro de la normalidad de lo ocurrido durante la colisión, Tony sabía el número exacto de muertos y desaparecidos en todas su sucursales, y el nombre de muchos de ellos, pero no te centres en lo negativo, también ha habido algunas nuevas incorporaciones, venidas de otras dimensiones, con concepciones revolucionarias de la física, estoy seguro de que querrás conocer a algunos de esos nuevos compañeros.

Por cierto, en esa bandeja de ahí tienes el desayuno, bacon, huevos revueltos, un par de tostadas, café y zumo de naranja... ah, y tu antigua medicación por si crees que puedes seguir necesitandola, dijo cono de pasada, sin darle importancia, dentro de tres horas vendrán a recogernos, hasta entonces podemos ponernos con esto o si lo prefieres dar una vuelta por la ciudad, también deberíamos ir a comprarte ropa nueva y quizás un corte de pelo, para que causes buena impresión a tus compañeros a tu regreso ¿que te parece?.

Betty y Ben... Vaya, alguna vez había coincidido en la máquina de café con Ben, era un buen tipo. Hablaba mucho de sus gemelos que jugaban en el equipo de baseball de la escuela primaria... Se preguntaba cómo estaría su familia ahora. A Betty apenas la conocía, pero Ben alguna vez bromeó con él sobre ella porque, según su versión, se lo comía con los ojos cada vez que se cruzaban por la planta. Rattmann sintió una incómoda sensación entre timidez y tristeza por ella, "Ojalá esté bien..."

Y luego estaba lo de la medicación. De alguna forma, Stark había dado con su mayor secreto; Su historial médico. No entendía por qué no le despedía inmediatamente, ¿Acaso sólo le daba lástima hacerlo? ¿Tal vez lo haría más adelante? No sabía qué pensar...

- Señor... ¿Realmente quiere usted tener a alguien como yo en sus filas? No se moleste pero, que yo haga algo ilegal como ocultar mi historial médico para entrara atrabajar en una gran empresa como la suya me parece incluso lógico, pero ¿Qué gana usted teniendo a un desequilibrado rodeado de tecnología punta? Podría arruinar la imagen de su empresa...- Hizo una larga pausa, y reflexionó una breve respuesta sobre los planes para aquéllas tres horas- No, no se preocupe por la ropa, ya me trajo ésta que llevo puesta, pero lo de la peluquería sería fantástico, señor.

Le costaba ver quién de los dos estaba más loco ahora mismo, pero su estómago vacío reclamaba atenciones, y sacando un par de comprimidos del bote como tenía costumbre, llenó una copa de agua y se las tragó, antes de desayunar deleitándose con cada bocado. La comida de Arkham no era precisamente una exquisitez.

Bueno Doug, en realidad lo que hiciste no es ilegal, al menos no si lo hiciste por las razones que supongo, esconder una enfermedad que puede producirte un importante rechazo social esta permitido por la ley, siempre que esa enfermedad no conlleve un riesgo para los demás, en tu caso nadie fue nunca afectado, por lo que lo que hiciste puede ser considerado una falta de confianza, pero no una ilegalidad, dijo Tony separándose de las proyecciones y dedicando a Doug toda su atención.

Y por supuesto que quiero tener a alguien como tu entre mis filas, eres un genio, la genialidad y la locura suelen ir de la mano, tu cerebro funciona de manera distinta al del resto de las personas, es capaz de cosas que ni siquiera yo soy capaz de alcanzar, te ayudaré a mantener bajo control eso en la medida en que me sea posible, con tu trabajo podemos ayudar a toda la humanidad Doug, y nunca le has hecho daño a nadie, además tu medicación te ha permitido mantenerlo a raya durante todo este tiempo, y ahora además tendrás mi apoyo.

Tony sonrió ante el último comentario del científico, Bueno, las manchas de sangre no salen fácilmente, y dentro del propio hotel hay una sastrería y una peluquería, así que mientras te arreglan ese desastre que tienes sobre la cabeza te pueden preparar otro par de camisas y chaquetas, luego podemos comer algo y coger el avión de vuelta a casa, ¿nos ponemos en marcha?.

OFF:

-Por supuesto señor. Adelante - Hizo una breve pausa mientras una sonrisa se dibujaba en su cara contemplando el bote de pastillas que aún tenía en su mano- Por cierto, muchísimas gracias... Verá, me he pasado tanto tiempo temiendo que esto sucediera, que usted supier alo que me pasaba, y ahora que ha sucedido, no asimilo que lo haya tomado tan bien. Creo... creo que yo le tengo más miedo a mi enfermedad del que realmente da. Pero sabiendo que usted deposita su confianza en mí de todas maneras, creo que le debo el esforzarme por estar a la altura de tal gesto.

El flaco hombrecillo recogió los bártulos del desayuno en el carrito donde llegaron y fue decidido a por sus escasas pertenencias a la habitación. Se miró al espejo,y se tocó el pelo sorprendido una vez más por cuanto había crecido, y al volver al salón, buscó de nuevo el carrito del desayuno, y lo examinó hasta dar con las servilletas. Efectivamente, a pesar de no haberse fijado demasiado inicialmente, los ojos no le habían engañado, y el portaservilletas que las recogía era elástico. Lo sacó y ni corto ni perezoso, se hizo una coleta para estar más cómodo. Era algo ridícula por su pequeño tamaño, pero bastaría hasta llegar a la peluquería.

-¿Nos vamos, señor?

Una nueva vida se abría ante el bueno de Douglas Rattmann, pero no era la vida de un vagabundo loco con un pasado falso, si no la que siempre había querido, y una vez perdió, a través de un portal dimensional a un infierno de asfalto llamado Gotham; la de un científico de Industrias Stark, que tomaba su café en la máquina y se sentaba en silencio en su espacio del laboratorio, sumido en un mar de ideas que esperaban convertirse en realidad.

(OFF: Puedes cerrarlo ya, Tony )